Elche y Celta empatan en un partido excelente
El equipo vigu¨¦s suma apenas un triunfo en sus 16 ¨²ltimos partidos, pero mejora su juego y enjuga la ventaja inicial de su rival
Empataron Elche y Celta y a los primeros les supo el punto mejor que a los segundos. Aunque pueda parecer que los locales siempre anhelen m¨¢s. Manda la clasificaci¨®n. Incluso en los albores de la temporada nadie quiere verse abajo. El Celta puede acabar la jornada en puesto de descenso si Levante y Huesca ganan sus partidos. Apenas ha ganado uno de sus ¨²ltimos 16 partido de Liga, el que le opuso en la segunda jornada de la campa?a actual al Valencia.
El partido fue excelente y exigente. De presiones altas y b¨²squeda de soluciones, con pasajes vibrantes y opciones de gol para ambos. El C...
Empataron Elche y Celta y a los primeros les supo el punto mejor que a los segundos. Aunque pueda parecer que los locales siempre anhelen m¨¢s. Manda la clasificaci¨®n. Incluso en los albores de la temporada nadie quiere verse abajo. El Celta puede acabar la jornada en puesto de descenso si Levante y Huesca ganan sus partidos. Apenas ha ganado uno de sus ¨²ltimos 16 partido de Liga, el que le opuso en la segunda jornada de la campa?a actual al Valencia.
El partido fue excelente y exigente. De presiones altas y b¨²squeda de soluciones, con pasajes vibrantes y opciones de gol para ambos. El Celta no hab¨ªa apenas tocado la pelota cuando se vio obligado a defender un centro al ¨¢rea aparentemente inocuo. Hacia la pelota se lanzaron los dos delanteros del Elche, la toc¨® Pere Milla mientras su compa?ero Lucas Boy¨¦ tej¨ªa un intento de chilena. Entre medias estaba el reaparecido Hugo Mallo, ausente tras unas semanas lesionado y despu¨¦s de un cisma con su entrenador que le cost¨® el brazalete de capit¨¢n. Nadie lo hab¨ªa visto en directo, nadie lo reclam¨®. Per¨® salt¨® la alarma en el VAR y todo acab¨® en el punto de penalti. No import¨® mucho que el pie de Boy¨¦ rozase la cabeza de Mallo, que se protegi¨® en el salto y encontr¨®, de manera accidental e involuntaria, la pelota con su brazo. Alguien, en alg¨²n despacho, ha reinventado el esp¨ªritu de la norma y propicia situaciones muy discutibles. Fidel no vacil¨® desde los once metros y puso al Elche en ventaja.
La normativa arbitral nunca estuvo tan viva como en los ¨²ltimos tiempos. El pasado campeonato empez¨® con una pauta: los pisotones en el tend¨®n de Aquiles del rival no s¨®lo eran falta, sino que tambi¨¦n supon¨ªan expulsi¨®n. As¨ª se fue Modric a la caseta en el partido que abri¨® aquella Liga en Bala¨ªdos. Luego se matiz¨® el castigo para que acabase en amonestaci¨®n. Un a?o y tres meses despu¨¦s una acci¨®n id¨¦ntica sucedi¨® en Elche, y en el ¨¢rea del Celta. No se se?al¨® penalti. Ocurri¨® cuatro minutos despu¨¦s del tanto del equipo local, en un encontronazo entre Murillo y Verd¨². El Celta estaba de los nervios, con uno de los auxiliares del entrenador en la caseta despu¨¦s de varios gritos y reproches.
Le cost¨® al Celta templarse. Seguramente lo logr¨® porque su t¨¦cnico hab¨ªa agrupado a bastantes peloteros en el once. Denis Su¨¢rez y Brais M¨¦ndez evolucionaron por dentro, detalle que redunda en la lucidez con la que se mueve la pelota. Santi Mina, Iago Aspas y Nolito asomaban por los tres carriles de ataque. El Elche debi¨® soportarlos adem¨¢s en la presi¨®n y aunque nunca le volvi¨® la cara al partido, con recursos para solventar esos problemas, empez¨® a sentirse inc¨®modo.
Al Celta le apretaba una piedra en el zapato, la de la clasificaci¨®n. As¨ª que por detr¨¢s en el marcador y ante un rival que pugna por salvar la categor¨ªa, s¨®lo cab¨ªa la reacci¨®n. Junt¨® pases en campo contrario y encontr¨® espacios donde no parec¨ªa haberlos porque el Elche supo juntarse. Los encontr¨® Brais M¨¦ndez tras sendos pases brillantes firmados por Aspas y Denis. Pero en la definici¨®n opt¨® por la seda cuando la situaci¨®n seguramente requer¨ªa otro tipo de terno. Porque en el mano a mano estaba delante Edgar Bad¨ªa, un portero excelente en esa suerte.
El Celta es el equipo con peor porcentaje de acierto ante el marco rival (emboca el 5% de las oportunidades que genera). Y esos nuevos errores avivaron sus urgencias. El Elche tuvo entonces su momento. Lucas Boy¨¦ pudo marcar en pleno destape de la zaga del Celta, donde Murillo estuvo demasiado blando en los duelos. Tocado por su infortunio, el Celta encontr¨® el premio cuando menos boletos jugaba. Santi Mina marc¨® al filo del descanso tras una inteligente acci¨®n de Aspas, que pivot¨® entre centrales para abrirle un espacio al buen chut de su compa?ero.
La paridad no s¨®lo se apreci¨® en el marcador. El juego se nivel¨®. Pero el partido tampoco se cay¨®. El Elche, el ¨²ltimo equipo en llegar a la categor¨ªa y adem¨¢s de manera inopinada, ha construido un equipo solvente, pleno de futbolistas expertos. Los refuerzos argentinos tienen jerarqu¨ªa y kil¨®metros de rodaje. Ah¨ª emerge Marcone, un pretoriano del t¨¦cnico Jorge Almir¨®n, con el que hace cuatro a?os fue campe¨®n nada menos que con Lan¨²s. Un cacique en la medular.
Bien armado el Elche, el paso de los minutos pareci¨® desactivar la ambici¨®n del Celta. Pero cuando Iago Aspas anda por medio, y hay un partido por ganar, nada est¨¢ terminado. Nada se detuvo en un partido grato de ver y que acab¨® en un cara o cruz fren¨¦tico en el que Tete Morente pudo marcar el tanto de la victoria y el meta Edgar Bad¨ªa no dej¨® de pedir asistencia m¨¦dica, lesionado cuando su equipo ya hab¨ªa agotado todos sus cambios. Mal que bien acab¨® el partido.
S¨®lo los achaques del portero local detuvieron el frenes¨ª. El Celta pidi¨® la expulsi¨®n de Lucas Boy¨¦ tras un choque con Brais M¨¦ndez en el que el gallego acab¨® con el p¨®mulo ensangrentado. No dej¨® de sentirse agraviado el equipo de ?scar Garc¨ªa con un ¨¢rbitro (De Burgos) con el que ya mantuvo viejos litigios. Entre protestas y desazones se fue a la caseta con un punto de amargor.