La inexplicable pifia de Mikkel Hansen
El dan¨¦s, tres veces mejor jugador del mundo y gran amenaza de Espa?a en las semifinales del Mundial, condujo a su equipo al l¨ªmite tras un grav¨ªsimo error en cuartos
¡°Me ha costado dormir. Creo que pod¨¦is saber por qu¨¦¡±, acert¨® apenas a decir este jueves Mikkel Hansen cuando compareci¨® para dar explicaciones por lo ocurrido. Acostumbrado a fulminar rivales y a dominar el balonmano de la ¨²ltima d¨¦cada, unas horas antes el genio dan¨¦s hab¨ªa desatado el caos de camino a las semifinales del Mundial contra Espa?a (20.30, Tdp).
Cuando Egipto, uno abajo al final de la pr¨®rroga, ya se hab¨ªa rendido y esperaba resignada su derrota en cuartos, la melena y la cinta m¨¢s famosas de las canchas colapsaron sin que nadie supiera c¨®mo ni por qu¨¦. En lugar de realiza...
¡°Me ha costado dormir. Creo que pod¨¦is saber por qu¨¦¡±, acert¨® apenas a decir este jueves Mikkel Hansen cuando compareci¨® para dar explicaciones por lo ocurrido. Acostumbrado a fulminar rivales y a dominar el balonmano de la ¨²ltima d¨¦cada, unas horas antes el genio dan¨¦s hab¨ªa desatado el caos de camino a las semifinales del Mundial contra Espa?a (20.30, Tdp).
Cuando Egipto, uno abajo al final de la pr¨®rroga, ya se hab¨ªa rendido y esperaba resignada su derrota en cuartos, la melena y la cinta m¨¢s famosas de las canchas colapsaron sin que nadie supiera c¨®mo ni por qu¨¦. En lugar de realizar un par de maniobras sencillas de distracci¨®n para enga?ar al reloj, lo de toda la vida, dej¨® literalmente de jugar los ¨²ltimos 15 segundos, hasta que los ¨¢rbitros le pitaron pasivo a falta de dos. Y, en lugar de dejar el bal¨®n en el suelo como siempre se hace, lo despej¨® a una esquina. Una acci¨®n clara de sabotaje: expulsi¨®n, penalti en contra, empate y segundo tiempo extra.
?Qui¨¦n pod¨ªa entender lo que hab¨ªa hecho Mikkel Hansen, de 33 a?os, ganador de la triple corona (Europeo, Mundial y Juegos), durante temporadas el mejor pagado, y nombrado tres veces el mejor jugador del planeta? Por suerte para ¨¦l, sentado en una silla plegable en una esquina del pabell¨®n, vio c¨®mo el caos no se detuvo ah¨ª y el africano Elmasry, a falta tambi¨¦n de dos segundos para acabar la segunda pr¨®rroga, cometi¨® otro sabotaje incomprensible que condujo el duelo a los penaltis donde, ah¨ª s¨ª, Dinamarca despach¨® a la anfitriona. ¡°El partido m¨¢s loco¡± de su carrera con la selecci¨®n, reconoci¨® el n¨®rdico. Su cinta blanca acab¨® en la cabeza del verdadero h¨¦roe, el portero Niklas Landin, que detuvo dos lanzamientos de siete metros.
En esa monta?a rusa llega al cruce con Espa?a la estrella danesa, azote en la ¨²ltima d¨¦cada de todos gracias a un brazo derecho prodigioso. ¡°Lo conozco y no le afectar¨¢. Tiene un car¨¢cter y una personalidad muy fuertes¡±, asegura Rodrigo Corrales, que fue compa?ero suyo en el PSG durante tres campa?as, antes de que el gallego se marchara el pasado verano al Veszprem h¨²ngaro. Sus historias recientes en este campeonato no pueden ser m¨¢s opuestas: el portero espa?ol, determinante contra Noruega con sus 19 intervenciones; y Mikkel Hansen, protagonista de un cortocircuito in¨¦dito pese a sus 10 tantos ante Egipto. ¡°No pienso que estas cosas nos afecten a los deportistas m¨¢s all¨¢ del momento. Y una carrera como la suya no es solo por el talento, sino porque f¨ªsicamente es un ejemplo y, sobre todo, por su fortaleza mental. ?l ahora lo ¨²nico que ve es la oportunidad de llegar a una final, no lo dudo¡±, valora Corrales de viaje a El Cairo para disputar la fase decisiva.
¡°Lo conozco y no le afectar¨¢. ?l tiene una personalidad muy fuerte¡±, asegura Rodrigo Corrales, compa?ero de Hansen en el PSG tres campa?as
El camino del astro n¨®rdico en este Mundial est¨¢ resultando accidentado. Primero dud¨® si acudir dada la intenci¨®n de los organizadores de meter en los pabellones un 20% del aforo, algo a lo que renunciaron por reticencias como la suya. Luego se perdi¨® los dos ¨²ltimos partidos de la segunda fase por molestias estomacales ¨C¡±fue un placer despertarme con la alarma y no con la alarma interior¡±, ironiz¨® antes de cuartos. Y, por ¨²ltimo, el gran apag¨®n frente a Egipto. De momento, lo que marca su expediente antes de encarar a los Hispanos son 29 goles (73%) con su brazo de Thor (dios del trueno y la fuerza) y 19 asistencias. Mientras Espa?a se despliega de forma coral, Dinamarca orbita irremediablemente alrededor de ¨¦l.
Las seis medallas con la selecci¨®n es lo que ha aquilatado su palmar¨¦s porque en el d¨ªa a d¨ªa de los clubes a¨²n no ha cazado el gran trofeo, la Champions. Nasser Al-Khelaifi lo convirti¨® en 2012 en el balonmanista mejor pagado del mundo como primera piedra del multimillonario proyecto parisino que sigue sin alcanzar la cumbre. El ¨²ltimo intento fue hace un mes, pero cay¨® en semifinales contra el Barcelona. Quiz¨¢s con los azulgrana ya tendr¨ªa ese gran t¨ªtulo, pero en el Palau apenas dur¨® dos cursos. ¡°Lleg¨® con 20 a?os, era muy joven¡±, recuerda Albert Rocas, campe¨®n del mundo en 2005 y 2013, y compa?ero entonces de aquel chico extravertido. ¡°Se ve¨ªa que iba a ser uno de los mejores, sin embargo, la segunda temporada trajeron a Rutenka y ¨¦l se vio apartado¡±, a?ade el extremo espa?ol ya retirado, hoy jefe de estudios en un instituto madrile?o.
Hansen se volvi¨® a Dinamarca y, al calor del hogar, en un equipo construido a su alrededor (AG Copenhague, ya desaparecido), se convirti¨® en un icono. ¡°Ahora el n¨²mero uno es el noruego Sagosen, que ha cogido el relevo de Karabatic. Mikkel tiene m¨¢s recursos en ataque, su calidad en el pase no se la he visto a casi nadie, su tiro¡ Pero no defiende y eso le lastra. Era el mismo caso de Talant [Dujshebaev]¡±, argumenta Rocas, que no espera ninguna vigilancia especial de Espa?a. Minimizar a Hansen, o reducir Dinamarca solo a ¨¦l, ser¨¢ una de las claves para que la selecci¨®n atrape otra final.
La selecci¨®n, nueve semifinales en los ¨²ltimos 11 torneos
Lo subrayaba Joan Ca?ellas antes de viajar a Egipto a modo de reivindicaci¨®n, casi un lamento por el poco reconocimiento, a su juicio, que reciben: ¡°No hay otra selecci¨®n que haya disputado m¨¢s semifinales en los ¨²ltimos diez a?os¡±. Las cuentas le dan la raz¨®n. Con esta, de las 11 Europeos y Mundiales recientes, los Hispanos se han clasificado nueve veces para la lucha por las medallas. Solo fall¨® en los dos ¨²ltimos Mundiales (2019 y 2017). En comparaci¨®n con sus compa?eros de viaje en la fase final, Dinamarca y Francia lo han conseguido en seis ocasiones y Suecia, en dos.
Uno de sus valores es la veteran¨ªa bien administrada. Llegados al final de un torneo abrasivo con partidos cada dos d¨ªas y encajonado en medio de un calendario de clubes al l¨ªmite, las piernas pesan y la mente se apaga. Esta circunstancia, conocida desde el principio, amenazaba a Espa?a por esa vieja guardia que copa el vestuario (nueve jugadores por encima de los 30 a?os); sin embargo, su situaci¨®n antes de afrontar las semifinales es la m¨¢s id¨®nea de los cuatro supervivientes.
Dinamarca cuenta con cinco jugadores que superan la cota de los 250 minutos en pista (Magnus y Niklas Landin, Saugstrup, Svan y Mensah Larsen) tras las dos pr¨®rrogas en cuartos contra Egipto. En la selecci¨®n de Jordi Ribera, solo el extremo ?ngel Fern¨¢ndez llega a esa cifra. El duelo de tr¨¢mite frente a Uruguay y el c¨®modo final de Hungr¨ªa facilit¨® el ahorro de energ¨ªa. En Suecia, hasta seis sobrepasan esa cantidad de tiempo en cancha y en Francia, ¨²nicamente dos.
¡°Somos un grupo veterano, pero ante Noruega, que juega 60 minutos corriendo, aguantamos muy bien el ritmo. Es dif¨ªcil saber el partido que nos conviene contra Dinamarca. Lo mejor es ser fieles a nuestro estilo: defender, sacar r¨¢pido para hacer goles f¨¢ciles y estar lo m¨¢s finos posibles en est¨¢tico¡±, analiza Rodrigo Corrales.