El Valencia se lleva un punto de San Mam¨¦s

Van Morrison, que era de la quinta de George Best, podr¨ªa haber cantado a d¨²o con Jon Morcillo, el exterior zurdo del Athletic, su c¨¦lebre Days like this: ¡°Cuando no siempre est¨¦ lloviendo, habr¨¢ d¨ªas como ¨¦ste / Cuando no hay nadie quej¨¢ndose, habr¨¢ d¨ªas como ¨¦ste / Cuando todo se pone en su sitio como con un interruptor / Bien, mi madre me dijo que habr¨¢ d¨ªas como ¨¦ste¡±. No llov¨ªa en San Mam¨¦s, aunque el cielo estaba gris como la extra?a camiseta del Valencia, pero todo se puso en su sitio, como con un interruptor, cuando Un...

Van Morrison, que era de la quinta de George Best, podr¨ªa haber cantado a d¨²o con Jon Morcillo, el exterior zurdo del Athletic, su c¨¦lebre Days like this: ¡°Cuando no siempre est¨¦ lloviendo, habr¨¢ d¨ªas como ¨¦ste / Cuando no hay nadie quej¨¢ndose, habr¨¢ d¨ªas como ¨¦ste / Cuando todo se pone en su sitio como con un interruptor / Bien, mi madre me dijo que habr¨¢ d¨ªas como ¨¦ste¡±. No llov¨ªa en San Mam¨¦s, aunque el cielo estaba gris como la extra?a camiseta del Valencia, pero todo se puso en su sitio, como con un interruptor, cuando Unai Sim¨®n bloc¨® un centro desde la banda derecha del Valencia, sac¨® con la mano, a la manera de Iribar, hacia la misma zona desde la que sali¨® el centro y que estaba desguarnecida. Por all¨ª corr¨ªa Morcillo vertical, esperando la pelota, superando la l¨ªnea del medio campo, llegando hasta la frontal y centrando para que Hugo Guillam¨®n metiera la pierna y batiera a su guardameta.

Marcaba el Athletic y para Morcillo todo se puso en su sitio despu¨¦s de una primera parte en la que Thierry le hab¨ªa conquistado la banda una vez s¨ª y otra tambi¨¦n. En cambio, las cosas se descolocaron para el Valencia, que no encontraba la ropa en los armarios en el comienzo de la segunda parte despu¨¦s de haberla dejado bien ordenada en la primera. Hasta que Guillam¨®n meti¨® la pierna.

Aunque en realidad, todo se puso en su sitio tambi¨¦n para el Valencia, porque libre de prejuicios, propuso un partido a cara de perro que el Athletic acept¨®. Todo estaba en su sitio, por fin entr¨® el f¨²tbol a San Mam¨¦s, por la puerta grande. El Athletic, es cierto, pudo disfrutar de unos minutos iniciales en los que el Valencia, todav¨ªa poco centrado, regal¨® un par de ocasiones. Un resbal¨®n de Wass permiti¨® un disparo de Williams que acab¨® en c¨®rner. Un minuto despu¨¦s centr¨® Morcillo y Vencedor, que estaba solo, remat¨® fuera de cabeza. Luego la tuvo Sancet, con toda la porter¨ªa para ¨¦l, pero Dom¨¦nech se la sac¨® abajo en una gran parada, aunque el delantero tuvo mucha culpa.

Pero hab¨ªa f¨²tbol, en las dos ¨¢reas, y tambi¨¦n el Valencia asust¨® en un remate de cabeza de Wass que sali¨® alto.

Rondaba el gol las dos porter¨ªas, y lleg¨® el empate despu¨¦s de un saque de esquina que lleg¨® despu¨¦s de que Sancet estropeara un contragolpe de libro con un pase raqu¨ªtico. Tuvo en el pecado la penitencia, y Gabriel Paulista estuvo mucho m¨¢s firme para rematar de cabeza el env¨ªo desde la esquina, batir a Unai Sim¨®n e igualar a los dos equipos.

Sigui¨® as¨ª hasta el final el partido, con el Athletic, que hizo siete cambios en relaci¨®n al partido de Copa contra el Betis, pero no se modific¨® el marcador. Empuj¨® el Athletic lo que pudo, o lo que supo, y aguant¨® bien el Valencia para llevarse un punto que le aleja de la zona m¨¢s caliente. Los bilba¨ªnos ya piensan en la semifinal copera del jueves. Esperan que las cosas se pongan en su sitio ese d¨ªa.