Una falsa interpretaci¨®n de la realidad de LaLiga Impulso

El art¨ªculo del pasado 3 de marzo sobre LaLiga Impulso firmado por J.I. Conde Ruiz y J.F Jimeno (reconocido madridista, por cierto) re¨²ne tal cantidad de inexactitudes y malinterpretaciones que como presidente de LaLiga no puedo permitirme no aclarar.

Empiezo por los argumentos econ¨®micos, que, a pesar de la formaci¨®n de los autores (o precisamente por ello), ni se analizan en profundidad ni son eje principal del art¨ªculo. Sus afirmaciones contienen errores de bulto y un ?intenci...

El art¨ªculo del pasado 3 de marzo sobre LaLiga Impulso firmado por J.I. Conde Ruiz y J.F Jimeno (reconocido madridista, por cierto) re¨²ne tal cantidad de inexactitudes y malinterpretaciones que como presidente de LaLiga no puedo permitirme no aclarar.

Empiezo por los argumentos econ¨®micos, que, a pesar de la formaci¨®n de los autores (o precisamente por ello), ni se analizan en profundidad ni son eje principal del art¨ªculo. Sus afirmaciones contienen errores de bulto y un ?intencionado? desconocimiento de una operaci¨®n que ha sido sobradamente explicada y publicada en los medios de comunicaci¨®n.

No mencionan que LaLiga Impulso es una operaci¨®n de inversi¨®n, vehiculada a trav¨¦s de cuentas en participaci¨®n. Es decir, una operaci¨®n de riesgo para el inversor que s¨®lo obtendr¨¢ ese beneficio, que califican de ¡°chollo¡± si los clubes de LaLiga obtienen ganancias equivalentes (incluso mayores en t¨¦rminos absolutos), gracias a las inversiones que tales recursos nos permiten acometer, consiguiendo anticipar 20 a?os lo que alcanzar¨ªamos con medios propios y posicionando nuestra competici¨®n a la vanguardia del f¨²tbol mundial en infraestructuras y tecnolog¨ªas. Siendo as¨ª, bienvenido sea el beneficio para CVC.

Pero como dec¨ªamos, en el art¨ªculo hay poca y malinterpretada argumentaci¨®n econ¨®mica y mucha y malintencionada argumentaci¨®n de otra ¨ªndole. El desprecio hacia los presidentes firmantes del acuerdo es intolerable. Se les acusa de ¡°cortoplacismo¡± y de ¡°no tener que rendir cuentas a su masa social¡± ni velar por la ¡°estabilidad futura de sus clubes¡±. Los autores ignoran que alguno de los clubes firmantes es tambi¨¦n Club Deportivo, como tambi¨¦n ignoran (o no) que la Ley de Sociedades de Capital establece mecanismos de rendici¨®n de cuentas que las sociedades an¨®nimas deportivas cumplen escrupulosamente, como demuestran sus auditor¨ªas anuales.

Les acusan de recurrir ¡°a la soluci¨®n f¨¢cil: la venta r¨¢pida de activos a precio inferior al de mercado¡±. Mienten intencionadamente o se constata que los autores desconocen la operaci¨®n que critican. Se lo resumo: se invierten 2.000 millones de euros a cambio de un 8,2%, es decir, aproximadamente 130 millones de euros anuales, un m¨²ltiplo de 15 veces EBITDA, que es una valoraci¨®n de mercado alta, refrendada por expertos independientes como Bibium Capital, Rothschild y Duff & Phelps tras analizar exhaustivamente el plan de negocio de LaLiga y transacciones comparables en el mundo del deporte y el entretenimiento.

Dudo si desconocen que los clubes de LaLiga est¨¢n gestionados por profesionales, en muchos casos con exitosas trayectorias empresariales, por lo que es un insulto gratuito que se dude de su criterio para tomar decisiones de negocio. Este menosprecio a la capacidad de gesti¨®n de la mayor¨ªa que conforma LaLiga Impulso solo se entiende desde la egolatr¨ªa de quien encabeza el discurso de la minor¨ªa no adherida al plan. Menosprecio que torna en pleites¨ªa con operaciones similares planteadas desde esa ¨®rbita.

La Liga Impulso es fruto de muchos meses de un trabajo conjunto asesorado por prestigiosas firmas como Ur¨ªa Men¨¦ndez, KPMG o Latham & Watkins, para presentar a los clubes un plan detallado sobre el que pudieran decidir voluntariamente su participaci¨®n. Para ello, muchos clubes han recurrido, a su vez, a expertos externos que valoraran el proyecto y la conveniencia individual del mismo. La aceptaci¨®n por parte de los clubes es el resultado de mucha reflexi¨®n y an¨¢lisis profesional y no es de recibo que, continuamente, se ponga en duda.

En esa l¨ªnea de falta de respeto a la inmensa mayor¨ªa de los clubes de LaLiga, los autores fantasean con ¡°incentivos indirectos (primas) para perder¡± y ama?os que recuerdan a pr¨¢cticas desterradas de nuestro f¨²tbol profesional contra las que se han establecido controles que funcionan gracias al trabajo conjunto de todos los que participamos de LaLiga.

Esto, adem¨¢s de ser una acusaci¨®n muy grave, falta a la verdad en el c¨¢lculo planteado, ya que, seg¨²n el mecanismo de reparto establecido en el Real Decreto Ley 5/2015, un 25% del reparto a cada club de LaLiga Santander (15% a los de LaLiga Smartbank) se determina en base a su clasificaci¨®n individual en LaLiga. Cualquier club, en cualquier posici¨®n de la tabla, obtendr¨ªa un beneficio econ¨®mico muy superior subiendo un puesto en LaLiga que benefici¨¢ndose de una p¨¦rdida de posici¨®n de otro club.

Igualmente, inventan una liga ¡°dopada¡± que dificulta el ascenso de clubes ¡°m¨¢s humildes¡±. No deben saber que LaLiga Impulso destina recursos a esos clubes que, por m¨¦ritos deportivos, optar¨ªan al ascenso a la categor¨ªa profesional. Estos clubes que asciendan a LaLiga en el futuro podr¨¢n acceder a los fondos con un importe m¨ªnimo de cuatro millones de euros. Adem¨¢s, durante los primeros 10 a?os, se reconocer¨¢ el importe que les hubiera correspondido de haber participado en LaLiga durante la temporada 2021-22.

Puedo entender que, para los interesados en liderar un f¨²tbol de ¨¦lites, donde ellos perciben el grueso del beneficio y deciden qu¨¦ migajas reparten al resto, sea inasumible un plan que supone el desarrollo y crecimiento del conjunto del f¨²tbol profesional. Sin embargo, LaLiga Impulso es una realidad libremente elegida por los clubes que la componen que va a suponer un crecimiento exponencial para toda LaLiga, incluidos aquellos que no quieren ver crecer al resto.

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