Danjuma no es Haaland: el Sevilla logra un empate milagroso ante el Villarreal

Danjuma no es Haaland. En el minuto 91, un gran pase de Yeremy al interior del ¨¢rea del Sevilla dejaba solo a Danjuma, que estir¨® su pierna como lo suele hacer el delantero del City para intentar hacer el segundo gol del Villarreal. El gol no lleg¨®. El Sevilla se salv¨® de forma milagrosa de perder y conserv¨® un punto despu¨¦s de adelantarse en el marcador con un tanto de ?liver Torres. Danjuma no es Haaland ni Morales tampoco ...

Danjuma no es Haaland. En el minuto 91, un gran pase de Yeremy al interior del ¨¢rea del Sevilla dejaba solo a Danjuma, que estir¨® su pierna como lo suele hacer el delantero del City para intentar hacer el segundo gol del Villarreal. El gol no lleg¨®. El Sevilla se salv¨® de forma milagrosa de perder y conserv¨® un punto despu¨¦s de adelantarse en el marcador con un tanto de ?liver Torres. Danjuma no es Haaland ni Morales tampoco es Henry a la hora de definir con el bal¨®n controlado en el ¨¢rea. En un descuento de cinco minutos, el Villarreal le cre¨® tres ocasiones clar¨ªsimas a un equipo roto en defensa, que vive de lo que genera Isco y que est¨¢ a a?os luz del grupo competitivo de temporadas anteriores.

El empate afortunado del Sevilla (siete disparos a puerta del Villareal por uno de los andaluces) se produjo en el partido 120 de Lopetegui en Primera con el conjunto andaluz. El vasco igual¨® a Helenio Herrera, un mito del f¨²tbol mundial, y entrenador del equipo andaluz entre 1953 y 1957. Con Helenio Herrera, el Sevilla fue dos veces subcampe¨®n y una vez cuarto clasificado. Con Lopetegui, ha sido tres veces cuarto clasificado y gan¨® la Liga Europa. Helenio Herrera se march¨® al Os Belenenses y luego al Barcelona. Lopetegui sigue en el alambre.

Al vasco solo lo sostiene Monchi mientras el resto de ejecutivos del club mantiene que la destituci¨®n del t¨¦cnico debe ser inminente. Nadie sabe a ciencia cierta qu¨¦ puede ocurrir en la semana del par¨®n. Mientras, el Sevilla volvi¨® a ser un equipo vulnerable, de paso cansino, que tuvo la fortuna de adelantarse en el marcador y que luego se limit¨® a defender, y malamente, su escasa ventaja. El Villarreal, demasiado t¨ªmido, se hart¨® de fallar ocasiones y solo empat¨® en una buena acci¨®n de ?lex Baena, en plena racha. En pleno l¨ªo, a Lopetegui se le ocurri¨® poner a Nianzou de mediocentro. Ocho minutos dur¨® el invento, aunque le cost¨® recibir el afortunado gol de Baena. Ni Helenio Hererra, a veces exc¨¦ntrico, hubiera tomado una decisi¨®n as¨ª.

Quiz¨¢s Emery quiso ayudar a su paisano Lopetegui. 34 kil¨®metros separan Hondarribia de Asteasu, en Gipuzkoa. Llama la atenci¨®n que en tan peque?o espacio geogr¨¢fico hayan nacido el propio Emery y el t¨¦cnico del Sevilla. Una especie de milla vasca de donde procedieron dos de los tres entrenadores que ganaron la Liga Europa con el Sevilla. En el Ciutat de Val¨¨ncia, Lopetegui alcanzaba a Helenio Hererra seg¨²n el dato aportado por el analista Pedro Mart¨ªn mientras su futuro pende de un hilo. El Villarreal suma su segundo partido sin ganar en la Liga tras perder ante el Betis y desperdiciar una ocasi¨®n tras otra ante este Sevilla tan desconocido. Entre vascos anduvo el juego, con permiso del gran Helenio Herrera.

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