El Maccabi de Tel Aviv jugar¨¢ sus partidos de la Euroliga como local en Belgrado
El conjunto israel¨ª debutar¨¢ en su nueva sede europea, que ya acoge al Partiz¨¢n y al Estrella Roja, el 9 de noviembre contra el Bayern M¨²nich
El Maccabi de Tel Aviv ser¨¢ en los pr¨®ximos meses el Maccabi de Belgrado. La Euroliga ha decidido este martes que el conjunto israel¨ª de baloncesto dispute sus encuentros como local en la competici¨®n europea en el pabell¨®n Aleksander Nikilic de la capital serbia, debido al conflicto ¨¢rabe-israel¨ª, por el que se han suspendido ya las competiciones deportivas dom¨¦sticas y que ha obligado a modificar la organizaci¨®n de las citas internacionales. En Belgrado, donde ya juegan el Partiz¨¢n y el Estrella Roja, se estren...
El Maccabi de Tel Aviv ser¨¢ en los pr¨®ximos meses el Maccabi de Belgrado. La Euroliga ha decidido este martes que el conjunto israel¨ª de baloncesto dispute sus encuentros como local en la competici¨®n europea en el pabell¨®n Aleksander Nikilic de la capital serbia, debido al conflicto ¨¢rabe-israel¨ª, por el que se han suspendido ya las competiciones deportivas dom¨¦sticas y que ha obligado a modificar la organizaci¨®n de las citas internacionales. En Belgrado, donde ya juegan el Partiz¨¢n y el Estrella Roja, se estrenar¨¢ el Maccabi el pr¨®ximo jueves 9 de noviembre frente al Bayern M¨²nich. El encuentro de la semana anterior, el 2 de noviembre, en el que el equipo israel¨ª deb¨ªa recibir en su pista al Real Madrid, ha quedado aplazado para contar con m¨¢s tiempo para la planificaci¨®n y puesta a punto de todo lo que supone un traslado as¨ª en cuanto a infraestructura, log¨ªstica, seguridad y cobertura televisiva.
El estallido del conflicto provoc¨® como primeras medidas que los jugadores y el cuerpo t¨¦cnico del Maccabi se refugiaran desde principios de octubre en Chipre, y que la Euroliga aplazara el encuentro que el equipo amarillo deb¨ªa disputar en Italia contra el Olimpia Milano y que cambiara de sede la cita prevista en Israel ante el Valencia Basket. Ese encuentro se disput¨® el 18 de octubre en la Fonteta entre fort¨ªsimas medidas de seguridad desde la llegada del Maccabi y su alojamiento fuera de la ciudad hasta la disputa del partido en un pabell¨®n convertido en un b¨²nker. El Ministerio del Interior decret¨® la alerta m¨¢xima, unos 700 polic¨ªas se desplegaron entre el recinto y los alrededores, adem¨¢s de la vigilancia de un helic¨®ptero y un dron, y apenas acudieron 2.809 espectadores cuando la afluencia media ronda los 7.000 en la competici¨®n europea. Los jugadores del Maccabi vistieron de negro, se entrenaron con una camiseta con el lema Bring them home now, Traedlos de vuelta a casa ahora, y se guard¨® un minuto de silencio. ¡°Est¨¢bamos entrenando y ve¨ªas a gente con linternas revis¨¢ndolo todo¡±, coment¨® el entrenador del Valencia, Alex Mumbr¨². El Maccabi perdi¨® por 75-66 en la primera ocasi¨®n en que compet¨ªa desde el comienzo de la guerra y posteriormente venci¨® fuera al Panathinaikos (81-86). Este jueves visita al M¨®naco y su siguiente cita ser¨¢ ya en Belgrado ante el Bayern. El Bar?a acudir¨¢ a esta nueva sede el 23 de noviembre y el Baskonia, el 19 de diciembre.
El Partiz¨¢n vivi¨® una situaci¨®n similar en 1991 y 1992, cuando se mud¨® a Fuenlabrada debido a la guerra de los Balcanes. Aquel inolvidable equipo, dirigido por Zeljko Obradovic, conquist¨® ese curso su primera Copa de Europa con un triple de Djordjevic en el ¨²ltimo suspiro de la final contra el Joventut en Estambul. Recientemente el club madrile?o visit¨® Belgrado y fue homenajeado en agradecimiento a aquella ¨¦poca.
Es la segunda ocasi¨®n en un a?o y medio en que la pol¨ªtica y los enfrentamientos b¨¦licos sacuden al baloncesto europeo. En marzo de 2022, la Euroliga excluy¨® definitivamente a los tres equipos rusos, CSKA Mosc¨², Unics Kaz¨¢n y Zenit de San Petersburgo (adem¨¢s del Lokomotiv Kuban de la Eurocup) como castigo por la invasi¨®n de Ucrania ordenada por el presidente Vlad¨ªmir Putin. La competici¨®n qued¨® reducida a 15 conjuntos y la clasificaci¨®n se reh¨ªzo eliminando los resultados de los tres clubes expulsados. Para entonces muchos de sus jugadores hab¨ªan salido ya de esas plantillas (Shengelia, Ponitka, Lorenzo Brown...) y la desaparici¨®n de tres equipos que compet¨ªan en la ¨¦lite alter¨® el ecosistema del baloncesto europeo. El veto se mantiene, y se le une ahora la mudanza del Maccabi, de Tel Aviv a Belgrado.
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