El cl¨¢sico llega con el Girona l¨ªder

A la espera del cl¨¢sico entre Barcelona y Real Madrid, el Girona es el l¨ªder de la liga espa?ola y da continuidad a su cuento de hadas. La revelaci¨®n del campeonato ya gana incluso cuando su juego no est¨¢ al nivel que ha mostrado en sus mejores tardes. Al Celta le castig¨® con crueldad con un gol postrero tras una pol¨¦mica que disparar¨¢ los agravios en Vigo.

Una alta delegaci¨®n del Celta acudi¨® esta semana a una reuni¨®n con Med...

A la espera del cl¨¢sico entre Barcelona y Real Madrid, el Girona es el l¨ªder de la liga espa?ola y da continuidad a su cuento de hadas. La revelaci¨®n del campeonato ya gana incluso cuando su juego no est¨¢ al nivel que ha mostrado en sus mejores tardes. Al Celta le castig¨® con crueldad con un gol postrero tras una pol¨¦mica que disparar¨¢ los agravios en Vigo.

Una alta delegaci¨®n del Celta acudi¨® esta semana a una reuni¨®n con Medina Cantalejo, el jefe de los ¨¢rbitros. Fueron dos horas de charla, con im¨¢genes y agravios de los que el t¨¦cnico Rafa Ben¨ªtez se queja amargamente. Al Celta no le sobra f¨²tbol, pero tampoco le acompa?a la fortuna con las decisiones de los trencillas. En Girona no mereci¨® ganar un partido en el que apenas sali¨® de su campo, pero pudo estar cerca de ese triunfo cuando en el tramo final del duelo el ¨¢rbitro anul¨® un tanto celeste despu¨¦s de que el meta Gazzaniga tropezase con Dotor. El portero sali¨® a detener un bal¨®n profundo, pero el esf¨¦rico se le escurri¨® de las manos y tropez¨® con el jugador del Celta. La pelota qued¨® a los pies de De la Torre, que empuj¨® la pelota al red. El ¨¢rbitro anul¨® el gol y el VAR no dijo esta boca es m¨ªa. Poco despu¨¦s lleg¨® el gol del triunfo para el Girona.

El partido transit¨® trabado, pr¨®digo en interrupciones, contingencias y percance, sin conllevar apuros para los porteros. Antes del descanso el Celta apenas se estir¨® en dos t¨ªmidas llegadas de Tapia y Bamba. El Girona no supo encontrar espacios y Guaita apenas tuvo que intervenir. Lo hizo al comenzar el segundo tiempo para detener un testarazo de Dovbyk a la salida de un c¨®rner, el primer remate entre palos de la escuadra local. Pero nada cambi¨®. Continuaron los tropezones, las ca¨ªdas y los parones. A esa altura el plan del Celta consist¨ªa en abrocharse en torno a un 4-4-2 y juntarse para jugar en su campo sin que poco o nada sucediese. El club no se reconoce en los puestos de descenso que ocupa, con un triunfo despu¨¦s de once jornadas, pero al menos en Girona no mostr¨® codicia para tratar de imponer su capacidad y dominar al rival.

Del Girona cab¨ªa aguardar m¨¢s, o al menos la clasificaci¨®n ayuda a generar expectativas. Le falt¨® precisi¨®n al cuadro que adiestra M¨ªchel, inc¨®modo sin espacios, pero tras tanto insulso trasteo lleg¨® un final m¨¢s fren¨¦tico. Lo busc¨® M¨ªchel con una llamada a Portu y Stuani para mover el ataque. Encontr¨® nuevas soluciones porque la torre uruguaya empez¨® a bajar los balones que llegaban al ¨¢rea. En uno de ellos estuvo Miguel Guti¨¦rrez cerca del gol con un chut desde la frontal.

El Girona se aviv¨® a¨²n m¨¢s cuando Tsygankov entr¨® por Arnau. Couto tom¨® el lateral en un movimiento que evidenci¨® la escasa confianza de M¨ªchel en Pablo Torre, que calent¨® en la banda sin salir al campo. Lleg¨® entonces el desenlace, la pol¨¦mica del gol anulado al Celta y el triunfo local con un disparo de Herrera desde fuera del ¨¢rea. ¡°?Madre m¨ªa!¡±, exclam¨® Ben¨ªtez.

Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.