El paso atr¨¢s del Real Madrid femenino
El equipo de Alberto Toril, que ha perdido los 14 cl¨¢sicos, sufre esta temporada tambi¨¦n una involuci¨®n en el resto de citas se?aladas
La c¨²pula del Real Madrid, con Florentino P¨¦rez a la cabeza, acudi¨® el 27 de mayo del a?o pasado al estadio del Legan¨¦s con la aspiraci¨®n de obtener el primer t¨ªtulo en la corta historia del equipo femenino, fundado en 2020. Disputaba contra el Atl¨¦tico la final de la Copa de la Reina, una competici¨®n en la que el Barcelona hab¨ªa sido eliminado por alineaci¨®n indebida. La ocasi¨®n se presentaba al dedo para el conjunto blanco, que le hab¨ªa sacado 18 puntos a las rojiblancas en Liga y en el minuto 88 ganaba 2-0. Pero en medio del diluvio que ca¨ªa esa noche de s¨¢bado en Butarque, las muchachas de...
La c¨²pula del Real Madrid, con Florentino P¨¦rez a la cabeza, acudi¨® el 27 de mayo del a?o pasado al estadio del Legan¨¦s con la aspiraci¨®n de obtener el primer t¨ªtulo en la corta historia del equipo femenino, fundado en 2020. Disputaba contra el Atl¨¦tico la final de la Copa de la Reina, una competici¨®n en la que el Barcelona hab¨ªa sido eliminado por alineaci¨®n indebida. La ocasi¨®n se presentaba al dedo para el conjunto blanco, que le hab¨ªa sacado 18 puntos a las rojiblancas en Liga y en el minuto 88 ganaba 2-0. Pero en medio del diluvio que ca¨ªa esa noche de s¨¢bado en Butarque, las muchachas de Alberto Toril entraron en barrena a unos metros de la orilla. El Atl¨¦tico les empat¨® en el 95 y luego les derrot¨® en los penaltis. Un Lisboa femenino en toda regla.
Aquel chasco fue el inicio del paso atr¨¢s que desde entonces ha venido sufriendo el Madrid femenino, penalizado por la grave lesi¨®n a principios de la temporada (rotura de cruzado) de su estrella Caroline Weir, que el curso anterior le hab¨ªa dado un salto gracias a sus 19 goles y 12 asistencias.
Las blancas encajaron este domingo la 14? derrota en otros tantos cl¨¢sicos (0-3), una herida que empieza a resultar ulcerosa. Con todo, quiz¨¢ lo peor de esta campa?a es que, a diferencia de la pasada, tambi¨¦n han flaqueado en las otras citas de cartel ante rivales que, en la mayor¨ªa de los casos, no se antojan tan inalcanzables como las azulgranas. Se mantienen segundas en Liga, pero su esperado acercamiento al Bar?a y a los puestos nobles de Europa se ha frenado.
En Champions, acab¨® la fase de grupos con un punto, y gracias. Solo fue capaz de obtenerlo en casa, ante el Chelsea (2-2), gracias a un penalti cuya falta se produjo fuera del ¨¢rea (no hay VAR). Luego perdi¨® los cuatro partidos contra el Par¨ªs FC y H?cken. ¡°Esto es f¨²tbol¡±, dijo Toril, al que no se le ha escuchado una palabra de autocr¨ªtica, cuando cay¨® contra las suecas cuatro d¨ªas despu¨¦s del 5-0 encajado en Montju?c en Liga. Y en Copa de la Reina, acab¨® fuera en cuartos por el Atl¨¦tico (2-1), al que tampoco pudo vencer en Liga a domicilio (1-1).
El martirio con el Barcelona
No todos sus males han sido el Barcelona, aunque cada cl¨¢sico ha resultado una tortura. Las estad¨ªsticas resultan corrosivas en Valdebebas. El balance de goles es 6-49 en su contra. No ha marcado en los ¨²ltimos cuatro duelos (1-0, 5-0, 4-0 y 0-3) y la ¨²ltima vez que lo hizo, en la Supercopa de 2023 (3-1), acab¨® perdiendo en la pr¨®rroga tras jugar una hora con una jugadora m¨¢s por la expulsi¨®n de Irene Paredes.
En los ¨²ltimos seis encuentros, desde que Opta toma registros, el Madrid ha realizado apenas siete tiros a puerta por los 45 de las cul¨¦s. Este domingo, el ¨²nico que logr¨® se produjo casi en el 90, con todo resuelto. Sin Weir en toda la campa?a, los fichajes no han sido capaces de cubrir el socav¨®n (Signe Bruun lleva nueve tantos y Hayley Raso solo ha sido titular en la mitad de los choques ligueros) y el centro de la defensa se ha agrietado con frecuencia.
Dentro del mutismo habitual de un equipo que no ofrece ruedas de prensa (salvo cuando la competici¨®n -Champions, Copa y Supercopa- se lo obliga), todas las declaraciones p¨²blicas de Alberto Toril han sido una llamada a la paciencia y, en ocasiones, un elogio al equipo pese a algunos reveses claros. ¡°Muchas veces, las expectativas son demasiado elevadas. Tenemos claros cu¨¢les son nuestros objetivos. Tenemos pocos a?os de vida. El momento llegar¨¢, seguro¡±, afirm¨® tras el 0-4 del pasado enero en la Supercopa. ¡°Estoy contento con la trayectoria¡±, apuntal¨® unos d¨ªas despu¨¦s. Unas palabras p¨²blicas que casan con las que dedic¨® en privado a las jugadoras este domingo tras el 0-3 de Valdebebas y que capt¨® la televisi¨®n: ¡°Volveremos a intentarlo. Os felicito por el trabajo. No os vay¨¢is tristes, ?vale? Seguid intent¨¢ndolo, ?de acuerdo?¡±, les dijo en el centro del campo el t¨¦cnico blanco, con contrato hasta final de esta temporada.
Y cuando el verdugo fue un rival m¨¢s terrenal, como el Atl¨¦tico, el fondo del discurso tampoco vari¨®. ¡°Estamos en los objetivos del club, que es clasificarnos para la Champions. Si conseguimos la segunda plaza, ser¨¢ muy positivo¡±, zanj¨® el pasado febrero despu¨¦s de la eliminaci¨®n de Copa, sin que mediara el Bar?a.
Tiempo, paciencia y hasta fe. A eso se ha ido encomendando Toril en las sucesivas derrotas en las citas m¨¢s se?aladas mientras en el d¨ªa a d¨ªa de la Liga, sin gran brillo, ha hecho valer su superioridad econ¨®mica para consolidar una posici¨®n c¨®moda y cumplir con la nota m¨ªnima: segundas, ahora con seis puntos de ventaja sobre el Levante (los dos ir¨ªan a la Liga de Campeonas) y siete sobre el Madrid CFF.
A varias Lunas del Barcelona, muy endeble en la Champions y derrotadas por el Atl¨¦tico en Copa, las grandes jornadas, term¨®metro de la evoluci¨®n del proyecto, han dejado un Madrid femenino un paso por detr¨¢s de lo esperado.
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