La voz reivindicativa de Aitana Bonmat¨ª toca el cielo por segunda vez con otro Bal¨®n de Oro
La centrocampista azulgrana, una l¨ªder en el campo y fuera de ¨¦l, iguala con dos trofeos a su compa?era Alexia Putellas y completa un podio plenamente cul¨¦, con Graham Hansen y Paralluelo
El Bal¨®n de Oro parece haber encontrado residencia fija en Barcelona. Por cuarto a?o consecutivo, el galard¨®n premia a una futbolista espa?ola y cul¨¦. ¡°Mi mentalidad ganadora, competitiva y ambiciosa es lo que b¨¢sicamente me ha hecho la jugadora que soy¡±, dec¨ªa en un v¨ªdeo emitido en la gala despu¨¦s de dar las gracias a sus compa?eras y a su club: ¡°Esto no se consigue sola¡±. Bonmat¨ª vio c¨®mo sus compa?eras en el Bar?a Caroline Graham Hansen y Salma Paralluelo completaban un podio...
El Bal¨®n de Oro parece haber encontrado residencia fija en Barcelona. Por cuarto a?o consecutivo, el galard¨®n premia a una futbolista espa?ola y cul¨¦. ¡°Mi mentalidad ganadora, competitiva y ambiciosa es lo que b¨¢sicamente me ha hecho la jugadora que soy¡±, dec¨ªa en un v¨ªdeo emitido en la gala despu¨¦s de dar las gracias a sus compa?eras y a su club: ¡°Esto no se consigue sola¡±. Bonmat¨ª vio c¨®mo sus compa?eras en el Bar?a Caroline Graham Hansen y Salma Paralluelo completaban un podio plenamente azulgrana. Este a?o, en el Teatro Ch?telet de Par¨ªs, Aitana Bonmat¨ª (Sant Pere de Ribes, 26 a?os) levant¨® su segundo Bal¨®n de Oro, igualando el n¨²mero de su compa?era Alexia Putellas. Fue la culminaci¨®n de un a?o de reivindicaciones y liderazgo, no solo futbol¨ªstico. En el campo, Aitana firm¨® una temporada hist¨®rica en el FC Barcelona con el p¨®ker de t¨ªtulos ¡ªChampions, Liga, Supercopa y Copa¡ª, 19 goles y 19 asistencias en 40 partidos. Reconocida, tambi¨¦n, como la mejor jugadora de la Champions ¡ªanot¨® en las semifinales y la final¡ª y de la Nations League, en la que se coron¨® campeona con la Selecci¨®n Espa?ola. No tuvieron la misma suerte en los Juegos de Par¨ªs: cuartas tras una clasificaci¨®n hist¨®rica. Pero, m¨¢s all¨¢ del c¨¦sped, es una de las l¨ªderes en la reivindicaci¨®n social.
¡°Siempre me he preocupado por los m¨¢s vulnerables. Y teniendo altavoz, me he implicado m¨¢s. Lo hago porque lo siento. Est¨¢ en el ADN de mi familia porque mis padres siempre han luchado mucho contra las desigualdades sociales y de g¨¦nero¡±, explic¨® en una entrevista a EL PA?S. Aitana form¨® parte de las 15 jugadoras que pidieron no ir convocadas con la selecci¨®n hasta sentirse escuchadas y valoradas. Algunas, entre ellas Aitana, regresaron para levantar la Copa del Mundo en Australia. Pero todo qued¨® empa?ado por el beso no consentido de Luis Rubiales a Jennifer Hermoso.
Tras recibir el premio a mejor jugadora de la UEFA, Bonmat¨ª decidi¨® alzar la voz, reivindicando el respeto y la dignidad de las mujeres. ¡°Como sociedad no debemos permitir que haya abuso de poder en una relaci¨®n laboral, ni faltas de respeto¡±. Y sentenci¨®: ¡°A todas las mujeres que sufren lo mismo que Jenni, estamos con vosotras¡±. Las futbolistas volvieron a armarse con el Se Acab¨® por bandera, y la lucha termin¨® con la dimisi¨®n de Rubiales y el entonces seleccionador Jorge Vilda.
Detr¨¢s de su figura mundial, aparece una mujer reivindicativa. El origen, los ideales de sus padres, de quienes hered¨® el car¨¢cter. Vicent Conca, padre de Aitana, fue detenido el 1 de julio de 1992 por la Guardia Civil en la sede de Moviment de Defensa de la Terra. Con los ojos vendados, fue interrogado, golpeado y torturado durante tres d¨ªas, seg¨²n su propio relato. A ciegas, escuchaba los gritos de sus compa?eros. A veces, con una bolsa de basura en la cabeza; otras con una pistola en la boca, o la cabeza sumergida en agua. El primer d¨ªa no comi¨® ni durmi¨®. El tercero, le despertaban para ponerle en pie u obligarle a hacer flexiones. Al cuarto d¨ªa compareci¨® frente al juez Baltasar Garz¨®n por la investigaci¨®n para encontrar a las personas relacionadas con el movimiento independentista Terra Lliure unas semanas antes de los Juegos de Barcelona. 25 personas fueron juzgadas y 17 afirmaron haber sufrido torturas. En 2004, 12 a?os m¨¢s tarde, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos conden¨® el Estado espa?ol por no haber investigado las denuncias de torturas.
Conca naci¨® en Ontinyent (Valencia), de familia pobre y numerosa. Aitana, en su infancia, pasaba una semana all¨ª en Navidad y dos en verano, y fue all¨ª cuando sus t¨ªos Toni y Merc¨¨ le regalaron su primera camiseta del Bar?a. Su padre estuvo siete a?os recolectando fruta en Lleida y el Pened¨¦s para pagarse los estudios ¡ªobtuvo una beca para la UB¡ª y la manutenci¨®n. Aitana aprendi¨® del esfuerzo de sus padres y de su lucha. Como la de portar primero el apellido materno. Cuando naci¨®, en 1998, la legislaci¨®n espa?ola no lo permit¨ªa, por lo que durante m¨¢s de un a?o y medio figur¨® con los dos de su madre, Rosa Bonmat¨ª. Hasta que, tras su lucha y la de otras familias, lograron que a partir del a?o 2000 fuese legal.
No es de extra?ar que, Aitana, conocedora de las ideas claras y directas de sus familiares, intentase pararle los pies a su madre en alg¨²n momento. A finales de 2019, en la gala de premios de la Federaci¨®n Catalana de F¨²tbol, Aitana advirti¨® a Rosa para que no atendiese a la prensa ni a gente del club. Pero cuando la futbolista se gir¨®, encontr¨® a su madre hablando con el entonces presidente Josep Maria Bartomeu. C¨®mo no, con m¨¢s reivindicaciones: que las futbolistas jugasen en el Camp Nou ¡ªm¨¢s tarde lo conseguir¨ªan, y batir¨ªan r¨¦cord de asistencia¡ª, que aumentasen los precios de las entradas al Johan y otras reclamas. ¡°Me han dado coraje en la lucha de la mujer y la conciencia social de ayudar a los m¨¢s desfavorecidos y luchar contra todas aquellas causas que considero injustas¡±, comparti¨® Aitana en su libro Unidas somos m¨¢s fuertes. Ahora lo aplica a su profesi¨®n.
Fuera de los focos, Aitana volver¨¢ a Ribes, con sus amigos de siempre, a la plaza de siempre. La mejor futbolista del mundo se amparar¨¢ en los suyos y su burbuja; no hablar¨¢ de f¨²tbol: guardar¨¢ el Bal¨®n de Oro, y sacar¨¢ la guitarra.