En la cola para conseguir la primera cerveza en el Mundial de Qatar: ¡°Aqu¨ª es m¨¢s preciada que Messi¡±

Tras la marcha atr¨¢s de Qatar, que el viernes decidi¨® ¡ªcon el apoyo de la FIFA y la resignaci¨®n del patrocinador, Budweiser¡ª que no se vender¨ªa alcohol en las inmediaciones de los estadios, los aficionados han acudido este s¨¢bado al Fan Festival, ¨²nico sitio ¡ªadem¨¢s de los hoteles de lujo¡ª donde pod¨ªan beber cerveza. La cola era ya larga 40 minutos antes de que se abriera la veda, a las 19.00 en Doha (las 17.00 en Espa?a), y eso que todav¨ªa se ...

Tras la marcha atr¨¢s de Qatar, que el viernes decidi¨® ¡ªcon el apoyo de la FIFA y la resignaci¨®n del patrocinador, Budweiser¡ª que no se vender¨ªa alcohol en las inmediaciones de los estadios, los aficionados han acudido este s¨¢bado al Fan Festival, ¨²nico sitio ¡ªadem¨¢s de los hoteles de lujo¡ª donde pod¨ªan beber cerveza. La cola era ya larga 40 minutos antes de que se abriera la veda, a las 19.00 en Doha (las 17.00 en Espa?a), y eso que todav¨ªa se ven pocos extranjeros en el emirato porque el viaje es tan caro que los aficionados apuran al ¨²ltimo d¨ªa ¡ªla v¨ªspera de que juegue su selecci¨®n¡ª para aterrizar en Qatar. La comparaci¨®n de Kevin, argentino de 27 a?os, da la medida de la proeza de hacerse con una budweiser: ¡°Aqu¨ª es m¨¢s preciada que Messi¡±. De un envidiable buen humor tras tres d¨ªas de viaje desde Buenos Aires, explicaba: ¡°En el avi¨®n te daban vino, ginebra... sin problemas, pero aterrizas aqu¨ª y es la ley seca. Vamos a adaptarnos. Llevo cuatro a?os ahorrando para estar aqu¨ª. Para m¨ª es un sue?o cumplido¡±.

A Matildo, argentino pero residente desde hace 20 a?os en Ibiza, le entr¨® la morri?a en la cola. ¡°En Espa?a cada cinco minutos hay un bar. Es raro, pero bueno...¡±, dec¨ªa, encogi¨¦ndose de hombros. Cuando los camareros de Budweiser empezaron a servir la cerveza, la gente comenz¨® a cantar de alegr¨ªa y se oy¨®, a lo lejos, un sentido ¡°S¨ª, se puede¡± en perfecto castellano sediento. Previamente, hab¨ªan tenido que caminar varios kil¨®metros y pasar un control de seguridad como el de los aeropuertos, as¨ª que la mayor¨ªa opt¨® por comprar las cervezas de cuatro en cuatro. Se las llevaban como trofeos y al salir de la cola con ellas eran entrevistados por periodistas de distintos pa¨ªses como si fueran el mejor jugador del partido en la zona mixta. ¡°?C¨®mo te sientes con esta primera cerveza?¡±, preguntaba una televisi¨®n a un estadounidense con peluca. ¡°?Deliciosa! La necesitaba¡±. En su pa¨ªs, explic¨®, cuestan m¨¢s o menos lo mismo que en Qatar, no as¨ª en M¨¦xico, como lamentaba Alan, acompa?ado de su novia, Bibiana, y otras cuatro rubias: ¡°Me ha llevado entre 40 minutos y una hora conseguirlas. Me han costado unos 250 pesos y en mi pa¨ªs habr¨ªan sido unos 20 pesos o 50 en el estadio. Hay que respetar las reglas de este pa¨ªs, pero la cerveza es fundamental para pasarlo bien¡±. La pareja estuvo dos a?os ahorrando para poder pagarse el viaje.

La llegada de la cerveza dividi¨® la ampl¨ªsima explanada del Fan Festival en dos mundos: los extranjeros hac¨ªan cola para hacerse con una budweiser, los residentes locales segu¨ªan en la otra punta el concierto y los fuegos artificiales con nada m¨¢s en la mano que sus tel¨¦fonos m¨®viles grab¨¢ndolo todo. Antes de que comenzara la actuaci¨®n principal, sali¨® al escenario el presidente de la FIFA, Gianni Infantino. Por la ma?ana, en una dura rueda de prensa, periodistas de distintos pa¨ªses ¡ªhay 12.300 acreditados¡ª acorralaron al suizo con preguntas dif¨ªciles [de responder] sobre derechos humanos. En cambio, en la tarde de este s¨¢bado, en el festival, Infantino se llev¨® los aplausos de los residentes en Qatar, molestos con las cr¨ªticas que est¨¢ recibiendo su pa¨ªs en los medios de todo el mundo.

El presidente de la FIFA salud¨® primero ¡°a los catar¨ªes¡±, y se oy¨® un murmullo peque?o de vuelta ¡ªsolo el 15% de los habitantes del emirato son aut¨®ctonos¡ª; luego a ¡°los indios¡± ¡ªy son¨® un estruendo de aplausos¡ª, a los argentinos y los brasile?os ¡ªque han sido los primeros en llegar a Doha¡ª. Le acompa?aban varias ¡°leyendas¡±, como Iker Casillas, Bebeto, Roberto Carlos y Materazzi, que fue el que menos aplausos recibi¨®. Zidane le propin¨® un cabezazo despu¨¦s de que insultara a su hermana en el Mundial de 2006, pero a?os despu¨¦s se convirti¨® en uno de los principales apoyos de la candidatura de Qatar para acoger el Mundial y los habitantes del emirato son fieles a sus aliados.

Una especie de gog¨® hac¨ªa filigranas con una pelota encerrado en una jaula en forma de bal¨®n. Todo eran aperitivos antes de la actuaci¨®n de Maluma, quien, al contrario que otros artistas como Shakira, Dua Lipa o Rod Stewart, s¨ª ha aceptado actuar en el Mundial que Amnist¨ªa Internacional llama ¡°de la verg¨¹enza¡±. Sergio, espa?ol, apuraba su cerveza vestido con la camiseta de la Roja. El viaje, el alojamiento y las entradas le ha costado ¡°unos 5.000 euros¡± y est¨¢ dispuesto a disfrutar pese a todo. ¡°En este Mundial manda Qatar, no la FIFA. Algunos amigos no han venido y han dicho que no lo iban a ver ni siquiera desde casa porque todos sabemos que los homosexuales est¨¢n perseguidos y no se respetan los derechos humanos. A m¨ª no me gusta que se celebre aqu¨ª, pero es lo que hay. El f¨²tbol no tiene la culpa de todo esto¡±.

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