Bruselas urge a Espa?a a actualizar su Presupuesto con un ajuste de 5.500 millones

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La carta de la Comisi¨®n Europea a Espa?a

Bruselas urge a Espa?a a aprobar un nuevo presupuesto ¡°tan pronto como sea posible¡±. Y exige garant¨ªas al nuevo Gobierno de que incluir¨¢ recortes ¡°del 0,5% del PIB¡±, en torno a 5.500 millones. La Comisi¨®n Europea ha enviado este martes una carta a Espa?a ¡ªjunto a otros seis pa¨ªses¡ª a la vista de que el presupuesto de 2017 no satisface, una vez m¨¢s, los compromisos adoptados. Bruselas subraya que el objetivo de d¨¦ficit del a?o pr¨®ximo ¡°no est¨¢ asegurado¡±, y va incluso m¨¢s all¨¢: ¡°Puede haber riesgos para la correcci¨®n oportuna y duradera del d¨¦ficit excesivo de aqu¨ª a 2018¡±. Para entonces har¨¢ falta otro tijeretazo: 5.500 millones m¨¢s.

Los socios de la UE enviaron sus presupuestos a Bruselas el 15 de octubre, y la Comisi¨®n Europea ha despachado siete cartas a los pa¨ªses con riesgo de incumplir. Espa?a, fiel a la tradici¨®n, est¨¢ entre el grupo de los rezagados. Bruselas es consciente de que ¡°un Gobierno en funciones no tiene poderes presupuestarios completos¡±. Pero el brazo ejecutivo de la UE urge a Espa?a a presentar un nuevo presupuesto ¡°tan pronto como sea posible¡± ¡ªla Comisi¨®n quiere m¨¢xima celeridad: antes de fin de a?o¡ª, con la en¨¦sima oleada de recortes, esta vez por importe de medio punto de PIB. En plata: las nuevas cuentas p¨²blicas de 2017 deben incluir un tijeretazo de 5.500 millones, seg¨²n la carta firmada por el vicepresidente Valdis Dombrovskis y el comisario Pierre Moscovici. Y aunque la misiva no lo cite expl¨ªcitamente, en 2018 ser¨¢n imprescindibles 5.500 millones adicionales: Bruselas quiere 11.000 millones de recortes estructurales (sin tener en cuenta el efecto de la recuperaci¨®n econ¨®mica) en los dos pr¨®ximos a?os.

El en¨¦simo rev¨¦s europeo era m¨¢s que esperado en Madrid. El Ejecutivo en funciones present¨® unas cuentas p¨²blicas con un d¨¦ficit del 3,6% del PIB, lejos del objetivo del 3,1%. Espa?a era consciente de que esa carta llegar¨ªa: se limit¨® a prorrogar los presupuestos de este a?o ante la falta de Gobierno, y el ministro Luis de Guindos ha admitido ya que el pr¨®ximo Ejecutivo tendr¨¢ que aprobar el recorte que exige Bruselas, aunque no ha aclarado si reducir¨¢ gasto p¨²blico o, lo m¨¢s probable, aprobar¨¢ una subida de impuestos que revertir¨ªa la rebaja electoralista de Rajoy.

Se repite la historia: tambi¨¦n el a?o pasado Bruselas envi¨® una carta por los ¡°serios riesgos¡± de incumplimiento, pero entonces el Ejecutivo reaccion¨® desafiante: ¡°Espa?a es el pa¨ªs que m¨¢s crece y por supuesto que cumplir¨¢¡±, dijo el titular de Hacienda, Crist¨®bal Montoro. ¡°Siempre acabamos cumpliendo¡±, le secund¨® un Luis de Guindos que meses m¨¢s tarde se vio obligado a pedir disculpas. Guindos promet¨ªa entonces que el agujero iba a acabar 2016 ¡°por debajo del 3%¡±; ahora lo cifra en el 4,6%, y puede que se quede corto. Los sucesivos incumplimientos pudieron costarle una multa multimillonaria a Espa?a, un estigma del que el Gobierno solo se libr¨® con ayuda de Berl¨ªn.

Junto al de Espa?a, Bruselas ha dado media docena de avisos adicionales (B¨¦lgica, Italia, Chipre, Lituania, Portugal y la muy ortodoxa Finlandia), pero con la boca peque?a. En p¨²blico, la cantinela es la de siempre: las reglas son las reglas. Pero en la pr¨¢ctica Berl¨ªn presion¨® para que ni Espa?a ni Portugal fueran sancionadas, y Bruselas ha decidido ahora mirar hacia otro lado en los casos m¨¢s flagrantes. Italia ha aprobado un presupuesto que incumple el d¨¦ficit con claridad; el Gobierno de Matteo Renzi, sabedor de que los tiempos est¨¢n cambiando, no piensa tocar ni una coma se ponga como se ponga la Comisi¨®n, a dos pasos de un refer¨¦ndum en el que se juega su futuro.

El lento giro hacia una pol¨ªtica fiscal menos estricta se inici¨® en 2015, pero en p¨²blico Europa se resiste a cambiar su narrativa, ese las reglas son las reglas aunque nadie las cumpla. No hay nada parecido a una expansi¨®n fiscal en la eurozona, pero hoy tampoco puede decirse que haya austeridad en la UE. Alemania ha aprobado rebajas fiscales. Bruselas mira hacia otro lado cuando se trata de Francia, m¨¢s ahora con la pujanza de Le Pen. Nadie va a molestar a Italia. Y Espa?a emerge de a?os de purga fiscal, pero Rajoy levant¨® el pie del freno antes de las elecciones y las continuas desviaciones no han tenido consecuencias. La carta de la Comisi¨®n, eso s¨ª, es un aviso a navegantes: si hay un pa¨ªs que debe tener cuidado, ese es Espa?a, que despu¨¦s de todo cerrar¨¢ este a?o con el paro y el d¨¦ficit m¨¢s abultados de Europa, solo por detr¨¢s de la rescatad¨ªsima Grecia.