Las f¨¢bricas de coches vuelven a la actividad en Espa?a entre fuertes medidas de seguridad

Largas colas marcaban a las cinco de la ma?ana de este lunes el retorno a la actividad de la factor¨ªa de Seat en Martorell (Barcelona). Todos los empleados con mascarilla y respetando distancias de seguridad de m¨¢s de dos metros. Una imagen similar se esperaba en las otras dos plantas espa?olas de la automoci¨®n que arrancan hoy la producci¨®n tras m¨¢s de un mes de par¨¢lisis: Volkswagen (Navarra) y ...

Largas colas marcaban a las cinco de la ma?ana de este lunes el retorno a la actividad de la factor¨ªa de Seat en Martorell (Barcelona). Todos los empleados con mascarilla y respetando distancias de seguridad de m¨¢s de dos metros. Una imagen similar se esperaba en las otras dos plantas espa?olas de la automoci¨®n que arrancan hoy la producci¨®n tras m¨¢s de un mes de par¨¢lisis: Volkswagen (Navarra) y Mercedes (Vitoria), la avanzadilla de lo que ser¨¢ el resto de la industria en las pr¨®ximas semanas. Renault vuelve el mi¨¦rcoles y el resto de las f¨¢bricas lo har¨¢n a partir del 4 de mayo, con la ¨²nica excepci¨®n de PSA, que solo fabricar¨¢ cuando se reanuden las ventas de veh¨ªculos.

El regreso ser¨¢, en todo caso, gradual por un conjunto de factores. El m¨¢s complejo operativamente es el de mantener las condiciones del protocolo de seguridad que sellaron sindicatos y patronales, m¨¢s all¨¢ del fijado por el Gobierno y que sirvi¨® de gu¨ªa, para evitar la propagaci¨®n del coronavirus en el interior de las f¨¢bricas, donde es dif¨ªcil mantener una distancia m¨ªnima de metro y medio entre operarios.

Las marcas se comprometieron a tomar la temperatura a los empleados antes de que accedieran a las instalaciones y descartar su entrada en el caso de que registraran m¨¢s de 37,5 grados. Los procesos de limpieza en los tornos de entrada se est¨¢n intensificando y en el interior, en el caso de que no se puedan mantener las condiciones de seguridad, los empleados deben utilizar tanto mascarillas como gafas de protecci¨®n. El utillaje utilizado por la plantilla ser¨¢ desinfectado tambi¨¦n cada poco tiempo y el uso de zonas comunes ha quedado restringido. Uno de los riesgos m¨¢s costosos para una gran industria es tener que parar la producci¨®n una vez est¨¢ en marcha.

En el caso de Seat, la semana pasada la compa?¨ªa efectu¨® tests de covid-19 a unos 3.000 miembros de su plantilla, los primeros que iban a empezar a trabajar esta semana. Es una medida adicional de control firmada con el comit¨¦ de empresa que se extender¨¢ al resto de los 15.000 trabajadores de la compa?¨ªa. Otra de las obsesiones de las compa?¨ªas ha sido evitar que los trabajadores de dos turnos diferentes puedan coincidir en las instalaciones. Para ello, Volkswagen ha recortado los turnos en Navarra y ha creado una hora de margen entre uno y otro.

Pero ese tipo de medidas todav¨ªa tardar¨¢ en implementarse. De momento, las plantas han decidido retomar la actividad con un ¨²nico turno de trabajo, una forma de testar las nuevas condiciones de trabajo marcadas por la pandemia de coronavirus. En su factor¨ªa de Pamplona Volkswagen prev¨¦ parar el mi¨¦rcoles para analizar c¨®mo ha funcionado el reinicio y, de ser necesario, introducir modificaciones.

Acompasar la producci¨®n tambi¨¦n servir¨¢ a los fabricantes para poner a prueba la cadena de suministro, una de las primeras que se vio afectada por el cierre del mercado asi¨¢tico. Asimismo no hay prisa por poner la producci¨®n al cien por cien de su capacidad porque la mayor¨ªa de los concesionarios est¨¢n cerrados ¡ªla semana pasada los reabri¨® Alemania¡ª y no hay optimismo respecto a la recuperaci¨®n de las ventas en plena entrada a una crisis econ¨®mica.

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