El coronavirus deja a M¨¦xico sin cervezas

Hace tres semanas Mike Garc¨ªa tom¨® la que considera una decisi¨®n acertada: abastecerse de cervezas a trav¨¦s de una aplicaci¨®n que env¨ªa comida a domicilio. Este ingeniero de 30 a?os del municipio de San Pedro Garza Garc¨ªa, cercano a la industrial ciudad de Monterrey (norte de M¨¦xico), vio sorprendido c¨®mo los vecinos hac¨ªan largas filas en las tiendas de conveniencia, supermercados y gasolineras para comprar de forma desesperada cervezas. Esto despu¨¦s de que el Gobierno de M¨¦xico ...

Hace tres semanas Mike Garc¨ªa tom¨® la que considera una decisi¨®n acertada: abastecerse de cervezas a trav¨¦s de una aplicaci¨®n que env¨ªa comida a domicilio. Este ingeniero de 30 a?os del municipio de San Pedro Garza Garc¨ªa, cercano a la industrial ciudad de Monterrey (norte de M¨¦xico), vio sorprendido c¨®mo los vecinos hac¨ªan largas filas en las tiendas de conveniencia, supermercados y gasolineras para comprar de forma desesperada cervezas. Esto despu¨¦s de que el Gobierno de M¨¦xico decretara medidas de contingencia para evitar la propagaci¨®n de la covid-19, entre ellas el cierre de las f¨¢bricas cerveceras. ¡°Compras de p¨¢nico¡±, dice Garc¨ªa, que catalog¨® lo que ve¨ªa como ¡°una situaci¨®n extrema¡±. A un mes de decretada la medida ¡ªque no afecta a otros productos similares, como el tequila¡ª se puede decir que el coronavirus ha dejado a M¨¦xico sin cervezas.

En Monterrey, explica Ram¨ªrez, no es f¨¢cil hallar la bebida, un elixir para los mexicanos, quienes est¨¢n entre los mayores consumidores del mundo con 68 litros per c¨¢pita al a?o. Ram¨ªrez es un privilegiado porque todav¨ªa cuenta con reservas, pero el pa¨ªs asiste indignado a una escasez que jam¨¢s imagin¨®. Las redes sociales bullen con la etiqueta #SeAcabaronLasChelas. A Ram¨ªrez tambi¨¦n le pesa la escasez por otra situaci¨®n m¨¢s dram¨¢tica: tiene amigos cuyo trabajo era comprar y venderlas y con el cierre de las f¨¢bricas han perdido sus empleos. ¡°La cerveza no es algo que se necesite para subsistir, pero hay muchas familias que viven de esto¡±, dice.

El Gobierno estableci¨® a finales de marzo un plan de contingencia para evitar la propagaci¨®n de la pandemia, que ya ha contagiado a m¨¢s de 27.000 personas y ha dejado 2.704 muertos. Ese plan insta a la gente a quedarse en casa y a suspender todas las actividades que no se consideren esenciales, a pesar de que el 42% de sus 126 millones de habitantes vive en la pobreza y decenas de millones dependen de la econom¨ªa informal. El decreto exclu¨ªa de las actividades esenciales la producci¨®n de cerveza, lo que sorprendi¨® y alarm¨® a los productores, que vieron que en otras naciones no se tom¨® una medida similar. M¨¦xico es el primer exportador de cervezas del mundo: el a?o pasado vendi¨® 40,1 millones de hectolitros (un hectolitro equivale a cien litros), seg¨²n los c¨¢lculos de la industria. En 2018 gener¨® ingresos por 4.288 millones de d¨®lares. Sus principales mercados son Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Guatemala y Canad¨¢.

Las empresas cerveceras acataron la orden y pararon la producci¨®n de una industria que genera 55.000 empleos directos y 650.000 indirectos, en una larga cadena de valor que adem¨¢s de los productores y los obreros de las plantas incluye a los agricultores de cebada y l¨²pulos, la distribuci¨®n y los puntos de venta. Aunque el Gobierno no ha aclarado por qu¨¦ no se ha permitido la reapertura de una industria tan importante, los fabricantes mantienen contacto con las autoridades para que se les permita reiniciar la producci¨®n, afirmando que cuentan con todas las medidas higi¨¦nicas y de protecci¨®n para evitar la propagaci¨®n de la covid-19. Mientras la cerveza escasea, en cualquier tienda mexicana se pueden comprar cigarrillos, una gran variedad de vinos y licores y refrescos, a pesar de que cada a?o mueren 40.000 personas por enfermedades asociadas al consumo de bebidas azucaradas, seg¨²n el Instituto Nacional de Salud P¨²blica (INSP).

¡°Acatamos a pesar de ser una industria muy segura¡±, explica Karla Siqueiros, directora general de Cerveceros de M¨¦xico. ¡°Otros pa¨ªses que, como nosotros, est¨¢n pasando por una emergencia similar, no pararon la producci¨®n. Estamos parados desde el 5 de abril. Y estamos en espera. Somos una parte esencial de la agroindustria, porque representamos el 25% de las exportaciones del sector¡±.

Siqueiros dice que, para no afectar a los productores de cebada ¡ªingrediente esencial de la cerveza¡ª, las cervecer¨ªas ya compraron la producci¨®n oto?o-invierno, pero ese sector tambi¨¦n ha estado en la incertidumbre, porque dependen de la fabricaci¨®n. En M¨¦xico son 5.000 familias agricultoras beneficiadas directamente por la compra que hacen los cerveceros. ¡°Entramos en comunicaci¨®n con diversas autoridades y no tenemos respuesta. Estamos viendo que el impacto se ve reflejado en el ingreso de las personas de la cadena de valores. Para las tienditas, la venta representa hasta 40% de sus ingresos totales. Por eso lo importante es cuidar esa cadena de valor. Esperamos ser considerados como una industria esencial¡±, a?ade Siqueiros.

En M¨¦xico hay 1,2 millones de tiendas de abarrotes, negocios familiares que son el contacto directo con los consumidores en los barrios y zonas rurales. De ellas dependen al menos cinco millones de mexicanos, seg¨²n los c¨¢lculos de la Alianza Nacional de Peque?os Comerciantes, un organismo que agrupa a 85.000 negocios de este tipo. Su presidente, Cuauht¨¦moc Rivera, explica que muchos de sus socios est¨¢n desesperados, porque la venta de cervezas se traduce en la parte m¨¢s fuerte de sus ingresos. ¡°Estamos en crisis¡±, dice Rivera. ¡°Ese decreto [del Gobierno] nunca ha aclarado a ciencia cierta qu¨¦ es esencial y que no. La gente demanda el producto, por lo que le pedimos a las autoridades que debemos garantizar el abastecimiento: abastecemos el 50% de la demanda nacional. Esto lo ¨²nico que aumenta es la especulaci¨®n, porque antes una lata de cerveza costaba entre 10 y 12 pesos [unos 50 centavos de d¨®lar], pero ahora que no hay la pueden llegar a vender hasta en 35 pesos en promedio [1.40 d¨®lares]¡±, explica Rivera.

Para este comerciante ¡ªque rememora los tiempos de Al Capone cuando el alcohol estaba prohibido en Estados Unidos¡ª, las medidas del Gobierno est¨¢n ¡°condenadas al fracaso¡±. Afirma que no se explica cu¨¢l fue el criterio tomado por las autoridades. ¡°Si fue un criterio moralista, las consecuencias son muy graves. El aislamiento es muy duro. La cerveza es una bebida de moderaci¨®n y m¨¢s cuando las consumes en solitario. Ayuda a la gente a llevar la cuarentena¡±. Una opini¨®n que comparte Mike Ram¨ªrez, el joven ingeniero del norte de M¨¦xico, a quien todav¨ªa le quedan ¡°chelas¡± tras abastecerse antes de la escasez. ¡°Me gusta la cerveza y al estar encerrado [beberlas] es una forma de distracci¨®n¡±, afirma.

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