La sombra del veto holand¨¦s amenaza con hacer fracasar la cumbre de la recuperaci¨®n europea

Mark Rutte contra todos. Con los contactos bilaterales entre las capitales y las reuniones preparatorias en Bruselas casi concluidas, la cumbre europea de este viernes y s¨¢bado arrancar¨¢ con el primer ministro neerland¨¦s como el gran y casi ¨²nico obst¨¢culo para aprobar el fondo europeo de recuperaci¨®n contra la crisis econ¨®mica de la covid-19. Las negociaciones se cen...

Mark Rutte contra todos. Con los contactos bilaterales entre las capitales y las reuniones preparatorias en Bruselas casi concluidas, la cumbre europea de este viernes y s¨¢bado arrancar¨¢ con el primer ministro neerland¨¦s como el gran y casi ¨²nico obst¨¢culo para aprobar el fondo europeo de recuperaci¨®n contra la crisis econ¨®mica de la covid-19. Las negociaciones se centran ahora en la propuesta de consenso presentada la semana pasada por el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.

Todas las delegaciones mantienen sus pegas y matices a los n¨²meros de Michel, seg¨²n revelan las notas de la reuni¨®n de los representantes permanentes de los 27 Estados miembros en Bruselas que se celebr¨® este martes, a las que ha tenido acceso EL PA?S. Pero las fuentes diplom¨¢ticas consultadas coinciden en que todas las salvedades y demandas son superables, salvo las planteadas por los Pa¨ªses Bajos. Ese consenso del que se excluye La Haya pasar¨ªa por crear un fondo de recuperaci¨®n ¡ªaunque algo inferior a los 750.000 millones de euros propuestos por la Comisi¨®n Europea¡ª y un proyecto presupuestario para 2021-2027 de algo m¨¢s del bill¨®n de euros, 40.000 millones por debajo del proyecto presentado por la Comisi¨®n a finales de mayo.

El Gobierno de Rutte exige que los futuros desembolsos del fondo se aprueben por unanimidad de los 27 miembros del Consejo de la UE. Una condici¨®n inaceptable no solo para los principales beneficiarios del fondo, como Italia o Espa?a, sino tambi¨¦n para la inmensa mayor¨ªa de los socios.

Bruselas teme que el derecho de veto de cada pa¨ªs ponga en peligro la operatividad de un fondo que, seg¨²n la Comisi¨®n, debe inyectar en poco m¨¢s de dos a?os el 60% de sus recursos para lograr su objetivo de reactivar la econom¨ªa europea. La unanimidad expondr¨ªa al fondo al bloqueo de cualquier socio e, incluso, al chantaje para los que amenazaran con el veto para lograr concesiones en otras ¨¢reas pol¨ªticas. Un campo minado que todas las capitales, salvo La Haya, quieren evitar a toda costa.

Alemania, que ocupa este semestre la presidencia de la UE, ha propuesto como f¨®rmula de compromiso la aprobaci¨®n por mayor¨ªa cualificada de los planes nacionales de recuperaci¨®n que deber¨¢n presentar los pa¨ªses para recibir las ayudas del fondo. Y que sea la Comisi¨®n Europea la encargada de autorizar los desembolsos peri¨®dicos tras escuchar al Consejo.

Espa?a e Italia preferir¨ªan la propuesta inicial, que otorgaba casi todo el control a la Comisi¨®n. Pero fuentes diplom¨¢ticas indican que tanto el Gobierno de Pedro S¨¢nchez como el de Giuseppe Conte podr¨ªan aceptar la f¨®rmula alemana si el resto del acuerdo no se aleja de la propuesta de la Comisi¨®n.

A solo 48 horas de la cumbre, sin embargo, nadie se atreve a vaticinar el resultado de la primera cita presencial de los l¨ªderes europeos desde febrero. El propio encuentro estar¨¢ marcado por el efecto de la pandemia, que ha obligado a reducir la composici¨®n de las delegaciones de 20 miembros a siete, con el primer ministro incluido en ambos casos.

Normas de distanciamiento

Michel impondr¨¢ normas de distanciamiento social dentro del edificio Europa, sede del Consejo Europeo. No habr¨¢ estrechamiento de manos ni saludos efusivos. Y en los momentos de cercan¨ªa, los l¨ªderes deber¨¢n colocarse la pertinente mascarilla, que ser¨¢ obligatoria todo el tiempo para todo el personal de apoyo del Consejo (seguridad, mantenimiento, asistencia¡­). Todos los l¨ªderes consideraban imprescindible reunirse presencialmente para una negociaci¨®n de tanta envergadura (casi 1,8 billones en total, el mayor volumen presupuestario negociado de una tacada en historia de la UE).

La arriesgada y complicada convocatoria se espera que despeje el camino hacia un acuerdo que la mayor¨ªa de las delegaciones consideran urgente. Pero la posici¨®n de Rutte, y su delicada situaci¨®n pol¨ªtica interna, colocan a la cumbre extraordinaria bajo una gran incertidumbre. El posible acuerdo incluir¨ªa una decisi¨®n sobre los llamados recursos propios (las fuentes de financiaci¨®n del presupuesto comunitario) que requerir¨ªa la ratificaci¨®n parlamentaria nacional. Una condici¨®n que obliga a buscar un acuerdo aceptable para todos y, en particular para el primer ministro holand¨¦s, cuya fragilidad parlamentaria podr¨ªa costarle muy cara pol¨ªticamente si regresa con un acuerdo demasiado generoso o ambicioso.

Fuentes del Consejo indican que el margen de maniobra de Rutte marcar¨¢ el desenlace del pr¨®ximo s¨¢bado, fecha prevista para el final de la cumbre. Si el holand¨¦s se aferra a la unanimidad para aprobar los desembolsos, el acuerdo parece imposible y tal vez ni siquiera merezca la pena convocar una segunda cumbre para intentarlo. En cambio, si La Haya ofrece un resquicio para el consenso, el hist¨®rico pacto podr¨ªa cerrarse esta misma semana o en una segunda reuni¨®n extraordinaria antes de final de mes.

Grietas entre los ¡®frugales'

Rutte llega, en principio, escoltado por el apoyo de otros tres pa¨ªses: Suecia, Austria y Dinamarca, con los que forma el grupo autodenominado como los cuatro frugales. En una posici¨®n cercana se sit¨²a tambi¨¦n Finlandia. Pero las negociaciones previas muestran que los intereses de esos pa¨ªses presentan ciertas divergencias y que la ¨²nica posici¨®n insalvable de momento es la defendida por La Haya.

Finlandia, el pa¨ªs m¨¢s abierto al consenso, podr¨ªa conformarse con una rebaja en el montante total del fondo y un reequilibrio en la proporci¨®n entre pr¨¦stamos (un tercio) y subsidios (dos tercios). Los frugales aliados de Rutte tambi¨¦n se muestran abiertos a un acuerdo sobre el fondo y el presupuesto. Suecia, Austria y Dinamarca podr¨ªan conformarse con una rebaja de la partida del fondo destinada a subsidios, cifrada en 500.000 millones de euros; con un marco presupuestario por debajo del periodo actual (2014-2020) y con unos cheques de descuento en su contribuci¨®n.

La propuesta de Michel ya recoge concesiones en todos esos terrenos, salvo en el volumen del fondo. El presidente del Consejo rebaj¨® en unos 20.000 millones de euros el marco presupuestario propuesto por la Comisi¨®n y ofreci¨® unos cheques para los cuatro frugales que sumar¨ªan unos 2.800 millones de euros anuales. Alemania, de paso, tambi¨¦n se beneficiar¨ªa de un cheque de 3.600 millones en su calidad de mayor contribuyente.

Fuentes comunitarias reconocen que durante la cumbre que arranca el viernes todav¨ªa ser¨¢ necesario hacer nuevas concesiones. La m¨¢s significativa y simb¨®lica ser¨¢ la rebaja de los 750.000 millones del fondo. El tajo afectar¨¢ a las partes consideradas menos imprescindibles. La mayor parte de las delegaciones quieren salvar a toda costa la llamada Facilidad de Recuperaci¨®n y Resiliencia, la joya de la corona con sus 310.000 millones de euros en subsidios a fondo perdido. El eslab¨®n d¨¦bil, en cambio, es la partida de 26.000 millones de euros destinada a la recapitalizaci¨®n de empresas en dificultades, que parece destinada a engrosar la lista de proyectos frustrados de la Comisi¨®n.

La rebaja de otras partidas podr¨ªa dejar el fondo en unos 710.000 millones, aunque la tijera de los frugales aspira a visualizar a¨²n m¨¢s la poda con una cifra que empiece por seis. La mayor¨ªa de las delegaciones parecen resignadas siempre y cuando se mantenga un porcentaje mayor de subsidios que de cr¨¦ditos.