Formaci¨®n y empleo
La formaci¨®n a los empleados deber¨ªa estar en el centro de la estrategia de talento de todas las empresas
Hace unos d¨ªas conoc¨ªamos los datos de la EPA (Encuesta de Poblaci¨®n Activa) del segundo trimestre, que arrojaban una ca¨ªda hist¨®rica en el n¨²mero de ocupados de m¨¢s de un mill¨®n de personas. Cifra que a¨²n no refleja todo el impacto provocado por la covid-19 y que, lamentablemente, se ir¨¢ agravando en los pr¨®ximos meses. Como cab¨ªa esperar, la mayor destrucci¨®n de empleo relativo se lleva a cabo en los perfiles con niveles...
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Hace unos d¨ªas conoc¨ªamos los datos de la EPA (Encuesta de Poblaci¨®n Activa) del segundo trimestre, que arrojaban una ca¨ªda hist¨®rica en el n¨²mero de ocupados de m¨¢s de un mill¨®n de personas. Cifra que a¨²n no refleja todo el impacto provocado por la covid-19 y que, lamentablemente, se ir¨¢ agravando en los pr¨®ximos meses. Como cab¨ªa esperar, la mayor destrucci¨®n de empleo relativo se lleva a cabo en los perfiles con niveles de estudios m¨¢s bajos y en los ocupados en trabajos temporales.
En Espa?a nos enfrentamos a un mercado laboral donde las mayores tasas de paro se concentran en mayores de 45 a?os (un 47% de los parados seg¨²n el ¨²ltimo dato conocido a junio del INE) lo que, ligado a un sistema de pensiones que alarga la vida laboral hasta los 67 a?os, hace absolutamente imprescindible que los profesionales tengan que reciclarse para volver al mercado laboral e incluso para mantenerse en su puesto de trabajo.
Los conceptos anglosajones de reskilling (reciclaje de conocimientos) y upskilling (adquisici¨®n de nuevos conocimientos o competencias), cobran m¨¢s fuerza que nunca en esta coyuntura.
Las empresas se enfrentan actualmente a dos grandes retos: la digitalizaci¨®n y la sostenibilidad, ambos en el centro de la estrategia de numerosas organizaciones l¨ªderes; lo que est¨¢ generando una demanda de nuevos profesionales y una adaptaci¨®n de los recursos humanos existentes.
La formaci¨®n a los empleados deber¨ªa estar en el centro de la estrategia de talento de todas las empresas, pero la realidad es que s¨®lo el 20% de las compa?¨ªas espa?olas, seg¨²n datos del INE, invierte en formaci¨®n digital para sus empleados. Si nos fijamos en las pymes, las cifras son mucho m¨¢s dram¨¢ticas, tan s¨®lo el 4%. Datos desoladores, si tenemos en cuenta que una de las grandes debilidades de nuestro tejido empresarial es que el 75% de las empresas son pymes con menos de seis trabajadores. Si hablamos de formaci¨®n en sostenibilidad, estas cifras son a¨²n m¨¢s reducidas. Son escasas las compa?¨ªas que han incorporado esta materia de conocimiento tan amplia a las necesidades formativas de sus empleados.
Esta relaci¨®n entre formaci¨®n continua (tambi¨¦n denominada en algunos casos formaci¨®n executive) y empleo, cada vez m¨¢s relevante en la coyuntura actual, est¨¢ provocando que los pa¨ªses m¨¢s avanzados introduzcan dentro de su agenda estrat¨¦gica un cap¨ªtulo espec¨ªfico diferenciado de la educaci¨®n reglada.
Entre los pa¨ªses con mayor ¨¦xito en sus pol¨ªticas, uno de los denominadores comunes es la colaboraci¨®n p¨²blico-privada, que se concreta en el desarrollo de centros de investigaci¨®n, centros de formaci¨®n especializados y creaci¨®n de programas en colaboraci¨®n con universidades y escuelas de negocios.
M¨®nica Guardado es Socia-Directora de Afi Escuela de Finanzas