El coche el¨¦ctrico se frena por la burocracia
La necesaria modificaci¨®n legislativa pone en duda el objetivo del Gobierno de crear 100.000 puntos de recarga
¡±Estamos por detr¨¢s en veh¨ªculos el¨¦ctricos y tenemos entre tres y cuatro veces menos puntos de recarga por habitante que otros pa¨ªses europeos. Y eso est¨¢ limitando la venta¡±. La afirmaci¨®n no es de ning¨²n ejecutivo de una marca de autom¨®viles, sino de Joan Groizard, el director general del Instituto para la Diversificaci¨®n y Ahorro de la Energ¨ªa (IDAE), dependiente del Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica. Sus datos coinciden con los d...
¡±Estamos por detr¨¢s en veh¨ªculos el¨¦ctricos y tenemos entre tres y cuatro veces menos puntos de recarga por habitante que otros pa¨ªses europeos. Y eso est¨¢ limitando la venta¡±. La afirmaci¨®n no es de ning¨²n ejecutivo de una marca de autom¨®viles, sino de Joan Groizard, el director general del Instituto para la Diversificaci¨®n y Ahorro de la Energ¨ªa (IDAE), dependiente del Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica. Sus datos coinciden con los de la patronal europea de fabricantes de autom¨®viles (ACEA, en sus siglas en ingl¨¦s).
En Espa?a se venden pocos coches el¨¦ctricos, un 1,4% del total de la Uni¨®n Europea, la mitad que en pa¨ªses como el Reino Unido o Alemania, pero es que la proporci¨®n de conexiones p¨²blicas para cargar las bater¨ªas son todav¨ªa muy inferiores, con apenas el 5% de todas las que hay en toda la UE. ¡°Hace pocos a?os hab¨ªa escasa oferta comercial de coches el¨¦ctricos, pero ahora hay m¨¢s de 200 modelos \[se refiere a el¨¦ctricos puros e h¨ªbridos enchufables\], por lo que hay que impulsar la forma de conectarlos¡±, dice Arancha Garc¨ªa, directora del ¨¢rea industrial y ambiental de Anfac. La patronal espa?ola de marcas calcula que hay unos 8.500 puntos, de los que una tercera parte se concentran en Catalu?a.
Si hay algo que une a la Administraci¨®n y al sector de la automoci¨®n es el convencimiento de que sin m¨¢s puntos de recarga el veh¨ªculo el¨¦ctrico est¨¢ condenado a la excepcionalidad: el comprador todav¨ªa teme quedarse sin bater¨ªa en sus viajes. En junio, ante la presi¨®n de las patronales del motor, el Gobierno anunci¨® su compromiso de que en Espa?a se implantaran 50.000 puntos de acceso p¨²blico hasta 2023. En octubre, con los fondos europeos de reactivaci¨®n ya perfilados, dobl¨® la apuesta a 100.000. No es m¨¢s que la fracci¨®n que le corresponder¨ªa a Espa?a del objetivo comunitario de lograr un mill¨®n de puntos. Pero esas previsiones carecen de concreci¨®n. Ni c¨®mo debe evolucionar la implantaci¨®n, ni qu¨¦ potencia debe tener cada punto ni en qu¨¦ partes de Espa?a se instalar¨¢n.
Los operadores energ¨¦ticos ¡ªdesde el¨¦ctricas a petroleras¡ª han asumido planes de inversi¨®n que presumiblemente se centrar¨¢n en zonas que les ofrezcan viabilidad econ¨®mica. Pero esas ¡°ambiciosas¡± previsiones ¡ªcalificativo compartido por los consultados¡ª tienen otro problema m¨¢s all¨¢ de la indefinici¨®n del modelo: el ecosistema normativo en Espa?a no lo pone f¨¢cil.
Desde que en 2018 el Gobierno elimin¨® la figura del gestor de carga, que hac¨ªa casi imposible la instalaci¨®n de puntos de recargas en aparcamientos de centros comerciales o supermercados, apenas ha habido avances.
¡°Hoy en d¨ªa es complicado instalar puntos de recarga p¨²blicos, los tr¨¢mites son laboriosos y no homog¨¦neos por territorios¡±, explica Elena Bern¨¢rdez, directora de electromovilidad de Endesa, que se?ala que la tramitaci¨®n necesaria puede llegar a paralizar durante un a?o la activaci¨®n de un nuevo punto de recarga. La tramitaci¨®n de hacerlo al lado de una carretera (para estaciones de servicios) sigue siendo pesad¨ªsimo. Y var¨ªa en funci¨®n del municipio. A¨²n se debe desarrollar la obligaci¨®n para que aparcamientos comunitarios, tanto residenciales como de oficinas, tengan un n¨²mero m¨ªnimo de conexiones el¨¦ctricas. Y los puntos de gran potencia, los que se utilizan para recargas r¨¢pidas, soportan costes fijos de cerca de 5.000 euros pese a que no se utilicen, lo que complica todav¨ªa m¨¢s rentabilizarlos en zonas de escaso uso.
Groizard considera que muchos de esos cambios normativos estar¨¢n listos el pr¨®ximo a?o. Las bonificaciones a la infraestructura de recarga r¨¢pida deber¨ªan estar listas en abril y la Ley de Cambio Clim¨¢tico, que deber¨ªa aprobarse durante el primer semestre, obligar¨¢ a las gasolineras con mayores ventas a tener puntos de recarga. Asimismo, el Ministerio de Transportes trabaja en agilizar los tr¨¢mites para puntos en carreteras y unas modificaciones en el C¨®digo de Edificaci¨®n obligar¨¢n a partir de 2023 a ofrecer puntos de recarga en aparcamientos de nuevas promociones.
Pero los potenciales usuarios se encuentran con otro problema: la falta de un registro que permita geolocalizar los puntos de recarga y, sobre todo, una plataforma compartida de pago que no obligue a ser usuario de cada una de las plataformas que permiten utilizar los puntos de recarga p¨²blica.
Supercargadores en proporci¨®n a las gasolineras
Aedive, la asociaci¨®n que aglutina a operadores de todo tipo vinculados con el veh¨ªculo el¨¦ctrico, considera primordial concretar qu¨¦ tipo de cargadores se ponen en marcha para asegurar la buena marcha de los coches el¨¦ctricos. As¨ª, por ejemplo, en el caso de los cargadores r¨¢pidos y ultrarr¨¢pidos, que ser¨ªan los que deber¨ªan permitir una carga r¨¢pida en v¨ªas de alta capacidad, efect¨²a un c¨¢lculo por equivalencia a los surtidores de gasolina existentes en Espa?a. ¡°Hay un parque automovil¨ªstico de en torno a 30 millones de veh¨ªculos t¨¦rmicos en Espa?a, a los que dan servicio unas 11.600 estaciones de servicio y unos 70.000 surtidores, equivalentes a puntos de carga¡±, explica Arturo P¨¦rez de Luc¨ªa, su director. Seg¨²n esos c¨¢lculos, considera que ¡°para cinco millones de veh¨ªculos el¨¦ctricos¡± previstos en 2030 ser¨¢ necesario tener 9.000 puntos de recarga r¨¢pidos y ultrarr¨¢pidos, adem¨¢s de otros puntos de recarga de oportunidad (los que se vinculan a aparcamientos en centros comerciales, restaurantes o centros de trabajo) y los vinculados, que son los que ser¨¢n la base de la carga, en los propios domicilios (aunque hoy un 70% de los autom¨®viles duermen en la calle).
Groizard considera que se debe responder a una ratio de un cargador lento por cada diez veh¨ªculos y uno r¨¢pido por cada 20, aunque esos c¨¢lculos no los ha llevado el Gobierno, por el momento, a ninguna planificaci¨®n. Y tampoco hay un presupuesto espec¨ªfico para puntos de recarga, m¨¢s all¨¢ de los 1.100 millones de euros que se prev¨¦n para el conjunto de la movilidad el¨¦ctrica. El director general del IDAE considera que, pese a la falta de normativas aprobadas, los operadores avanzar¨¢n en las inversiones para aprovechar el tir¨®n de los fondos europeos.