Anna Diamantopoulou: ¡°La elecci¨®n de Joe Biden renovar¨¢ el multilateralismo¡±

La socialista griega Anna Diamantopoulou es el ejemplo de pol¨ªtica forjada de abajo arriba. Ingeniera de formaci¨®n, a los 26 a?os se convirti¨® en una de las alcaldesas m¨¢s precoces de su pa¨ªs al asumir el mando de Kastoria, un municipio de casi 50.000 habitantes. Desde entonces, todo ha sido subir, como muestra un curr¨ªculo tan kilom¨¦trico como su apellido. Fue diputada, ministra en dos ocasiones y comisaria europea de Empleo y Asuntos Sociales. Desde 2013 preside Diktio, un think tank fundado por ella misma. Por si le faltaba alg¨²n nivel de poder que probar, a sus 61 a?os concurre a la...

La socialista griega Anna Diamantopoulou es el ejemplo de pol¨ªtica forjada de abajo arriba. Ingeniera de formaci¨®n, a los 26 a?os se convirti¨® en una de las alcaldesas m¨¢s precoces de su pa¨ªs al asumir el mando de Kastoria, un municipio de casi 50.000 habitantes. Desde entonces, todo ha sido subir, como muestra un curr¨ªculo tan kilom¨¦trico como su apellido. Fue diputada, ministra en dos ocasiones y comisaria europea de Empleo y Asuntos Sociales. Desde 2013 preside Diktio, un think tank fundado por ella misma. Por si le faltaba alg¨²n nivel de poder que probar, a sus 61 a?os concurre a la secretar¨ªa general de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®micos (OCDE), una carrera en la que no parte como favorita ¡ªesa posici¨®n recae en la sueca Cecilia Malmstr?m¡ª, pero que todav¨ªa est¨¢ abierta.

¡°He pasado dos tercios de mi carrera en cargos p¨²blicos y un tercio en el mundo de la investigaci¨®n y la academia, tengo una visi¨®n panor¨¢mica¡±, afirma a este diario defendiendo su idoneidad para el puesto, al que tambi¨¦n aspiran el exbanquero suizo Philipp Hildebrand, el dan¨¦s Ulrik V Knudsen, y el exministro de Finanzas australiano Mathias Cormann.

?Qu¨¦ har¨¢ si resulta elegida? ¡°En la declaraci¨®n que present¨¦ a la OCDE puse el ¨¦nfasis en la inclusividad: eso significa acabar con las desigualdades entre Estados, sociedades, generaciones y sexos¡±, explica. La OCDE no tiene competencias para imponer reglas, pero su poder reside en lograr amplios consensos globales en asuntos tan delicados como la fiscalidad. La propuesta de una tasa Google a las tecnol¨®gicas es uno de los temas candentes de esa agenda. ¡°Las normas fiscales tradicionales ya no satisfacen las necesidades de una econom¨ªa digital globalizada. Debe introducirse una nueva arquitectura fiscal, basada en un principio s¨®lido: los beneficios se gravan donde se crea el valor¡±, apunta.

En la agenda tambi¨¦n est¨¢n los nuevos impuestos contra las emisiones contaminantes. ¡°Es muy probable que unos sistemas impositivos sobre la energ¨ªa bien dise?ados animen a ciudadanos e inversores a favorecer las fuentes de energ¨ªa limpias en lugar de las contaminantes¡±, opina.

Diamantopoulou se describe como una reformista audaz y una tejedora de acuerdos, algo fundamental para comandar la OCDE, y en lo que la instituci¨®n no siempre se ha mostrado efectiva. La pol¨ªtica griega cita como prueba su papel en las complejas conversaciones de ampliaci¨®n de la Uni¨®n Europea al Este, donde negoci¨® con gobiernos y multinacionales de los pa¨ªses entrantes.

Su intenci¨®n es llevar los est¨¢ndares de la OCDE a 2.500 millones de personas m¨¢s en los pr¨®ximos cinco a?os, sobre todo en el sudeste asi¨¢tico y Am¨¦rica Latina. ¡°La OCDE es un emisor de normas mundiales. Perseguir¨¦ mucho m¨¢s compromiso con programas como la convenci¨®n contra el soborno y las directrices sobre empresas multinacionales¡±, anuncia.

Ante los trastornos geopol¨ªticos, los fen¨®menos meteorol¨®gicos extremos o la transformaci¨®n digital, considera que no valen soluciones individuales. ¡°Ning¨²n pa¨ªs es tan poderoso como para valerse por s¨ª mismo. Por eso el multilateralismo importa m¨¢s que nunca. La institucionalizaci¨®n de la pol¨ªtica despu¨¦s de la Segunda Guerra Mundial ha sido un gran logro. Sin embargo, el mundo necesita un nuevo impulso multilateral y un patr¨®n de cooperaci¨®n internacional m¨¢s sofisticado. Creo que la elecci¨®n de Joe Biden marca exactamente el comienzo de esta renovaci¨®n del multilateralismo que tanto necesita el mundo¡±.

La dirigente percibe una nueva sinton¨ªa entre la UE y EE UU. ¡°Lo que considero de mayor importancia es una relaci¨®n transatl¨¢ntica revitalizada, especialmente cuando se trata de nuevas formas de cooperaci¨®n sobre el cambio clim¨¢tico y la esfera digital. Creo firmemente que Estados Unidos volver¨¢ a su papel habitual de garante del multilateralismo. Joe Biden est¨¢ comprometido con revivir alianzas y revertir¨¢ la pol¨ªtica exterior de Trump¡±.

La hora de la verdad se acerca para saber qui¨¦n dirigir¨¢ la organizaci¨®n. Este viernes se producir¨¢ una nueva criba, y a comienzos de marzo se conocer¨¢ el nombre definitivo de la persona que se har¨¢ cargo de la instituci¨®n a partir de junio. Con Kristalina Georgieva al frente del FMI, Christine Lagarde del BCE y Ursula von der Leyen de la Comisi¨®n Europea, algunas de las mayores palancas de poder mundial est¨¢n en manos de un pu?ado de mujeres. La OCDE nunca ha tenido a una de ellas a los mandos. ¡°Supondr¨ªa romper otro techo de cristal¡±; se?ala Diamantopoulou. ¡°La selecci¨®n de una mujer como jefa de una organizaci¨®n internacional tan importante inspirar¨¢ a mujeres y ni?as a romper barreras y conquistar hitos en sus propias vidas¡±, estima.

La lucha contra la discriminaci¨®n de g¨¦nero ha sido una constante en su carrera. Durante su paso por Bruselas, entre 1999 y 2004, alent¨® cambios legislativos contra la discriminaci¨®n sexual, y mantuvo un tira y afloja con la industria aseguradora porque estas cobraban m¨¢s a las mujeres por su seguro m¨¦dico ante el riesgo que puede suponer un embarazo. Adem¨¢s, desvel¨® haber sufrido acoso sexual a los 19 a?os, cuando trabajaba a tiempo parcial para pagarse los estudios.