Economistas digitales
Vivimos un nuevo paradigma en la econom¨ªa, donde el conocimiento se descentraliza hacia ¨¢mbitos que no provienen de la tradici¨®n financiera
Desde hace d¨¦cadas, el sistema econ¨®mico y financiero ha hecho un uso muy intensivo de herramientas y soluciones tecnol¨®gicas para facilitar su desarrollo, comprensi¨®n y gesti¨®n. Sin embargo, no ha sido hasta los ¨²ltimos a?os cuando se ha intensificado la digitalizaci¨®n econ¨®mica, que viene a transformar la forma en que la econom¨ªa, las finanzas y la tecnolog¨ªa se han relacionado tradicionalmente.
En febrero, Tesla anunciaba al supervisor burs¨¢til de EE UU (SEC) ...
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Desde hace d¨¦cadas, el sistema econ¨®mico y financiero ha hecho un uso muy intensivo de herramientas y soluciones tecnol¨®gicas para facilitar su desarrollo, comprensi¨®n y gesti¨®n. Sin embargo, no ha sido hasta los ¨²ltimos a?os cuando se ha intensificado la digitalizaci¨®n econ¨®mica, que viene a transformar la forma en que la econom¨ªa, las finanzas y la tecnolog¨ªa se han relacionado tradicionalmente.
En febrero, Tesla anunciaba al supervisor burs¨¢til de EE UU (SEC) la compra de 1.500 millones de d¨®lares en bitcoins. La inversi¨®n de una parte importante del efectivo de las compa?¨ªas en criptodivisas ha sido com¨²n en muchas otras grandes organizaciones (Microstrategy, Square, Nvidia, Paypal o AMD), casi todas ellas tecnol¨®gicas. Comprender el funcionamiento de bitcoin (y atisbar su evoluci¨®n futura) requiere, adem¨¢s de una visi¨®n economicista, de otra tecnol¨®gica, en la medida en que, a diferencia de otros activos, el subyacente de bitcoin es puramente digital.
En este punto, el mercado de los NFT (tokens no fungibles), que se desarrolla bajo los est¨¢ndares de la red Ethereum, va un paso m¨¢s all¨¢. A diferencia de los bitcoins, intercambiables y equivalentes entre s¨ª, los NFT son ¨²nicos y limitados. Esta cualidad les permite asociarse a activos digitales, crear escasez y, te¨®ricamente, generar valor permitiendo que los compradores adquieran certificados de propiedad de dichos activos. La reciente subasta del NFT del primer tuit (¡°just setting up my twttr¡±) del consejero delegado de Twitter por 2,5 millones de d¨®lares o la venta del NFT asociado a la obra digital The First 5000 Days del artista Beeple por casi 70 millones, han centrado el debate sobre una posible burbuja en torno al valor real de este tipo de activos.
Otro asunto a debate est¨¢ siendo la ¡°democratizaci¨®n de las finanzas¡±, con el auge de las plataformas electr¨®nicas de intermediaci¨®n como RobinHood o Interactive Broker. El caso GameStop, en el que un grupo de inversores minoristas, organizados a trav¨¦s de un foro de inversores no profesionales, puso en jaque a fondos institucionales de inversi¨®n en corto, ha sido el ejemplo de c¨®mo el desarrollo tecnol¨®gico introduce nuevos jugadores en el epicentro de las finanzas. Tras ello, los flujos de inversores minoristas cobran una relevancia inaudita hasta ahora.
Estos tres ejemplos son un reflejo de que vivimos un nuevo paradigma en la econom¨ªa y las finanzas. Los polos de conocimiento y capacidades econ¨®mico-financieras se est¨¢n descentralizando, en muchos casos hacia ¨¢mbitos o actores que no provienen, en absoluto, de la tradici¨®n financiera. Irremisiblemente, la capacitaci¨®n tecnol¨®gica y digital est¨¢ dejando de ser instrumental, para convertirse en uno m¨¢s de los pilares de conocimiento que se exigir¨¢ a los jugadores y analistas de este nuevo ecosistema.
Borja Foncillas y Javier Pino, son profesores de Afi Escuela de Finanzas