La Audiencia Nacional vuelve a imputar a Repsol, CaixaBank, Brufau y Fain¨¦ por el ¡®caso Villarejo¡¯
La Sala de lo Penal acepta el recurso de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n
La Audiencia Nacional revoluciona el caso Villarejo. La Sala de lo Penal ha admitido el recurso de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n y ha vuelto a imputar a Repsol y CaixaBank, as¨ª como al actual presidente de la petrolera, Antonio Brufau, y al expresidente del banco y exvicepresidente de la energ¨¦tica, Isidro Fain¨¦. A trav¨¦s de una resoluci¨®n dictada este mismo lunes, el tribunal revoca la decisi¨®n del juez instructor Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n, que archiv¨® la causa contra ellos el pasado 29 de julio. En estas pesquisas se investiga c¨®mo ambas compa?¨ªas contrataron a Cenyt, el grupo empresarial del comisario jubilado Jos¨¦ Manuel Villarejo, para ejecutar una supuesta operaci¨®n de espionaje en 2011 contra Luis del Rivero, entonces presidente de Sacyr y que pretend¨ªa hacerse con el control de Repsol tras un pacto con la mexicana Pemex.
El escrito de la Sala de lo Penal inflige un duro golpe a la defensa y pone en la diana a la c¨²pula de ambas compa?¨ªas. A lo largo de 45 p¨¢ginas, los magistrados repasan la instrucci¨®n y subrayan que existen ¡°indicios¡± de que la contrataci¨®n del comisario parti¨® de Brufau y que, adem¨¢s, ¡°este fue informado con detalle de los resultados¡± de las gestiones que hac¨ªa Cenyt, que incluy¨® el presunto acceso a bases de datos confidenciales. ¡°Informaci¨®n dif¨ªcilmente obtenible de no haber mediado la intervenci¨®n de funcionarios p¨²blicos¡±, destaca la resoluci¨®n de este lunes. Seg¨²n los investigadores, supuestamente Isidro Fain¨¦ tambi¨¦n estar¨ªa al tanto del encargo.
Durante su declaraci¨®n ante el juez, los dos directivos admitieron que mantuvieron una conversaci¨®n en 2011 y acordaron mover ficha ante los intentos de Del Rivero de hacerse con el control de Repsol. ¡°Le plante¨¦ a Fain¨¦ que ser¨ªa bueno que las dos ¨¢reas de inteligencia corporativa colaborasen juntas para profundizar m¨¢s en el pacto [entre Sacyr y Pemex]¡±, detall¨® Brufau. ¡°Me dijo que averiguar¨ªa sobre este tema, que ya hab¨ªa empezado. Eso fue lo que me dijo, nada m¨¢s. Yo le dije: ¡®Hablar¨¦ con mi jefe de seguridad para que hable con el tuyo¡±, remach¨® Fain¨¦. Pero ambos a?adieron que delegaron entonces en sus respectivos jefes de Seguridad, que se encuentran procesados por estos hechos, y que nunca supieron que se hab¨ªa contratado a Villarejo.
¡°A m¨ª jam¨¢s se me comunic¨® el nombre de la empresa¡±, aleg¨® el presidente de Repsol. ¡°Yo no sab¨ªa que exist¨ªa Cenyt¡±, expuso el expresidente de CaixaBank. Tambi¨¦n negaron que, en alg¨²n momento, les llegara alg¨²n dato confidencial de las v¨ªctimas.
Sin embargo, la Sala de lo Penal pone en duda sus palabras y ordena reabrir la investigaci¨®n contra ellos. Tambi¨¦n, contra las propias Repsol y CaixaBank como personas jur¨ªdicas: ¡°Hay base indiciaria suficiente para contemplar una posible exigencia de responsabilidad penal de ambas compa?¨ªas, por lo que procede realizar determinadas diligencias antes de decidir la conclusi¨®n de la instrucci¨®n respecto a ellas¡±, argumenta el tribunal en su resoluci¨®n, donde recalca que constan indicios de que no se aplicaron ¡°debidamente¡± los controles de sus respectivos ¡°planes de prevenci¨®n¡± para evitar este tipo de pr¨¢cticas il¨ªcitas.
Entre las pruebas esgrimidas para reabrir esta causa, el tribunal hace hincapi¨¦ en el documento denominado Charla-2.11.11, que detalla el contenido de una reuni¨®n mantenida el 2 de noviembre de 2011 en un restaurante entre Villarejo y los jefes de Seguridad de la petrolera y el banco, Rafael Araujo (Repsol) y Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ranca?o (CaixaBank). Una especie de ¡°acta de reuni¨®n¡±, en palabras del juez instructor, al que la Fiscal¨ªa y la Polic¨ªa conceden verosimilitud; y donde se plasma el presunto conocimiento directo de Fain¨¦ y Brufau del encargo de espionaje. ¡°R [en referencia a Rafael Araujo] dice que BRU [Brufau] le ha llamado desde Cannes para preguntar si hay ya alg¨²n dato de inter¨¦s, a lo que le ha contestado que estaba en ello (eso al menos da a entender)¡±, recoge la ¡°charla¡± interceptada a la trama. Tambi¨¦n se lee: ¡°BRU le ha preguntado qu¨¦ era lo que sab¨ªa del trabajo encomendado¡±; ¡°Ambos, BRU y FAI, [Fain¨¦], intercambian datos y han hablado de la conveniencia de ir juntos en este asunto¡±; y ¡°MA [Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ranca?o] insiste en ¡®determinar el per¨ªmetro¡¯ porque por la tarde ten¨ªa que despachar con su ¡®se?orito¡¯, posiblemente por referencia a FAI¡±.
Las pesquisas contra la energ¨¦tica y el banco constituyen la l¨ªnea de investigaci¨®n n¨²mero 21 del macrosumario del caso Villarejo. El comisario bautiz¨® este encargo como Proyecto Wine y, seg¨²n la instrucci¨®n, cobr¨® 413.600 euros de Repsol y CaixaBank entre 2011 y 2014. Pero Garc¨ªa-Castell¨®n, tras desimputar a ambas compa?¨ªas y a sus dos m¨¢ximos directivos, descarg¨® toda la responsabilidad en los jefes de Seguridad de las dos empresas. Seg¨²n el juez, estos ¡°dispon¨ªan de amplios m¨¢rgenes de contrataci¨®n, de decisi¨®n y de orden de pagos¡±, por lo que ning¨²n otro alto ejecutivo de ambas ¡°tom¨® parte en las negociaciones con el Grupo Cenyt, ni particip¨® en las reuniones, ni dio ¨®rdenes de que se llevasen a cabo tales investigaciones¡±.
Tras el dictamen de la Audiencia Nacional, Repsol manifest¨® la ¡°absoluta correcci¨®n¡± con la que, a su juicio, se ha actuado por parte de la compa?¨ªa, sus consejeros y empleados en este asunto. Seg¨²n la empresa, ello queda acreditado en las conclusiones del juez instructor, que archiv¨® la causa el pasado julio. La compa?¨ªa dijo reafirmarse en ¡°su compromiso de plena colaboraci¨®n¡± con la justicia. Fuentes de Caixabank sostuvieron que la entidad ¡°va a seguir colaborando para facilitar cualquier informaci¨®n o declaraci¨®n adicional, tal y como est¨¢ pidiendo la Sala¡±. ¡°Tenemos la convicci¨®n de que estas diligencias llevar¨¢n a que se dicte una nueva resoluci¨®n de sobreseimiento¡±, han a?adido.
Irregularidades detectadas en las empresas
A la hora de volver a imputar a Repsol y CaixaBank como personas jurídicas, el tribunal enumera toda una batería de irregularidades detectadas en la investigación. Los magistrados explican que, entre otros aspectos, la energética fraccionó en tres encargos la contratación de Villarejo en 2011 y 2012, "lo que permitió que fuera aprobada por Araujo sin intervención de otros niveles"; o que "la descripción de los servicios en las facturas no corresponde a los realmente prestados". En el caso del banco, los jueces inciden en que, por ejemplo, el contrato con Cenyt fue "verbal" y no consta ningún documento de "que los servicios jurídicos autorizasen esa contratación verbal".