S¨¢nchez lleg¨® a levantarse de la cumbre para forzar un desbloqueo frente a la resistencia alemana
Tras horas de tensi¨®n, Espa?a y Portugal logran una salida para que la Comisi¨®n Europea les apruebe una propuesta con un tope al precio del gas para bajar la factura el¨¦ctrica
Pedro S¨¢nchez, un pol¨ªtico con un claro perfil europe¨ªsta, nunca hab¨ªa llegado tan lejos en una cumbre de la UE. Pero esta vez la situaci¨®n era tan complicada que el presidente lleg¨® incluso a levantarse de su silla y a salir de la sala ante las evidentes dificultades de llegar a un acuerdo que permita que el precio de la luz baje de forma significativa en Espa?a, sobre todo por las resistencias de Alemania. En...
Pedro S¨¢nchez, un pol¨ªtico con un claro perfil europe¨ªsta, nunca hab¨ªa llegado tan lejos en una cumbre de la UE. Pero esta vez la situaci¨®n era tan complicada que el presidente lleg¨® incluso a levantarse de su silla y a salir de la sala ante las evidentes dificultades de llegar a un acuerdo que permita que el precio de la luz baje de forma significativa en Espa?a, sobre todo por las resistencias de Alemania. En un momento de la reuni¨®n en Bruselas, despu¨¦s de m¨¢s de cuatro horas de debate, en medio de una tensi¨®n importante y con ausencia de avances, seg¨²n varias fuentes comunitarias, S¨¢nchez ley¨® un tuit de un periodista de France24, Dave Keating, en el que se se?alaba que el presidente espa?ol estaba amenazando con vetar las conclusiones.
Indignado por que se estuviera filtrando informaci¨®n de la cita y se le acusara de amenazar con un veto, S¨¢nchez explic¨® su malestar y se levant¨® de la sala, seg¨²n estas fuentes. Todo indica que ese movimiento fue decisivo para el resultado final, que permitir¨¢ a Espa?a plantear una excepci¨®n ib¨¦rica y una propuesta para poner un tope al precio del gas que se usa para generar electricidad en la Pen¨ªnsula.
En ese momento en que S¨¢nchez se levant¨® y se fue de la sala, Charles Michel, que dirig¨ªa la reuni¨®n como presidente del Consejo, decidi¨® hacer un par¨®n t¨¦cnico para calmar los ¨¢nimos y discutir las propuestas. La reuni¨®n se retom¨® una media hora despu¨¦s, con S¨¢nchez de nuevo en la mesa, en medio de una negociaci¨®n muy compleja, porque cada pa¨ªs reclamaba cosas diferentes y hab¨ªa unas resistencias muy fuertes de Alemania y otros Estados, como Holanda, a tocar de ninguna manera el mercado el¨¦ctrico com¨²n.
Despu¨¦s de horas de tensi¨®n, Espa?a y Portugal lograron esta soluci¨®n satisfactoria, y S¨¢nchez y Ant¨®nio Costa han decidido presentarla de forma conjunta en una rueda de prensa en la sala que habitualmente ocupa Espa?a. Mientras Scholz, en una sala contigua, reconoc¨ªa que S¨¢nchez y Costa, hab¨ªan ¡°defendido de forma exitosa los intereses de sus pa¨ªses¡±, una forma de reconocer la dureza negociadora de sus socios, ellos bromeaban cuando les preguntaron por esa tensi¨®n interna. ¡°Lo que pasa en el Consejo queda en el Consejo¡±, se rio S¨¢nchez mientras le preguntaban por el episodio de su salida de la sala. Pero de alguna manera lo reconoci¨®. ¡°Han sido muchas horas de debates muy intensos, pero se public¨® algo que no era cierto. Ni el Gobierno de Espa?a ni yo mismo hab¨ªa planteado ning¨²n veto, no era real esa filtraci¨®n¡±, se?al¨® en clara referencia al tuit del periodista de France24. ¡°Yo soy testigo [de que no se plante¨® el veto]¡±, le aval¨® Costa.
S¨¢nchez ha tenido un gran protagonismo en la cumbre, seg¨²n coinciden varias delegaciones, porque Espa?a se jugaba mucho, ya que es el pa¨ªs que m¨¢s protestas est¨¢ sufriendo y el ¨²nico donde ha habido una dur¨ªsima huelga de transportistas que el Gobierno confiaba en resolver este mismo viernes. La cita, que tendr¨ªa que haber concluido a las 14.00, se retras¨® hasta las 19.20, con varios parones para que las delegaciones intercambiaran documentos para llegar a un acuerdo que sirviera para todos, de lo contrario cualquier pa¨ªs podr¨ªa haberlo vetado.
Las negociaciones han sido intensas entre los equipos antes de llegar a la cumbre y durante la cita, con la intervenci¨®n del sherpa espa?ol, Manuel de La Rocha, que est¨¢ en Bruselas con S¨¢nchez, pero tambi¨¦n con el trabajo desde Madrid de las vicepresidentas Teresa Ribera, la especialista en la materia, y Nadia Calvi?o, con buenas conexiones en Bruselas. Entre todos ellos y el propio S¨¢nchez han multiplicado las llamadas en los ¨²ltimos d¨ªas para intentar esta excepci¨®n ib¨¦rica. Pero la clave estuvo en el debate entre los l¨ªderes, donde se tom¨® la decisi¨®n pol¨ªtica.
La clave de la negociaci¨®n, seg¨²n diversas fuentes, estaba en las resistencias de Alemania a tocar nada de la legislaci¨®n europea. Espa?a quer¨ªa buscar una excepci¨®n a trav¨¦s del art¨ªculo 122 del tratado de funcionamiento de la UE. Pero Alemania y Holanda lo rechazaban de plano. ¡°Eso romper¨ªa el mercado europeo¡±, insist¨ªan los alemanes. No quer¨ªa ninguna excepci¨®n.
El jueves de madrugada las delegaciones negociaron hasta muy tarde, sin los l¨ªderes, para encontrar una salida. Pero no hab¨ªa manera. Espa?a ten¨ªa el respaldo de la Comisi¨®n Europea, pero Scholz, pese a ser de la misma familia pol¨ªtica de S¨¢nchez, no ced¨ªa. El presidente apel¨® entonces el viernes a un discurso pol¨ªtico y le traslad¨® a sus colegas la situaci¨®n ¡°dram¨¢tica¡± que vive Espa?a, con sectores enteros que est¨¢n parando o amenazan con hacerlo por los precios de la energ¨ªa.
S¨¢nchez, que siempre ha apoyado las posiciones europe¨ªstas y nunca ha puesto obst¨¢culos nacionales, apel¨® a esa tradici¨®n para pedir ahora ayuda. Las medidas que estaban proponiendo los dem¨¢s, incluido el de aumentar las reservas de gas que ped¨ªan varios, como Alemania, pod¨ªan perjudicar a Espa?a, porque pueden aumentar el precio. Espa?a no necesita reservas porque es de los que m¨¢s regasificadoras tiene.
S¨¢nchez les explic¨® que aceptaba todas las iniciativas que ayudan a Alemania pero a cambio necesitaba la especificidad ib¨¦rica para resolver su problema. Finalmente los t¨¦cnicos encontraron una salida: no hay cambio de legislaci¨®n, pero s¨ª se permitir¨¢ a Espa?a solucionar el problema con ayudas p¨²blicas para compensar el l¨ªmite al precio del gas para generar electricidad. Aunque S¨¢nchez insisti¨®: ¡°no van a ser ayudas p¨²blicas a las empresas de gas¡±. El Gobierno trabaja en una f¨®rmula para que esas compensaciones surjan del propio sistema.
El acuerdo fue complej¨ªsimo porque Espa?a necesitaba garant¨ªas de que la Comisi¨®n Europea le va a aceptar la propuesta que les plantee. Por eso hubo que hablar no solo con ?rsula von der Leyen, presente en las discusiones y fundamental, sino tambi¨¦n con la comisaria de Competencia, Margrette Vestager. Medio gobierno espa?ol estaba pendiente de los detalles de este acuerdo, en especial Ribera, que segu¨ªa la negociaci¨®n con detalle desde Madrid.
S¨¢nchez no pod¨ªa volver con las manos vac¨ªas a Espa?a ante la enorme presi¨®n social que existe en el pa¨ªs. Como cualquier primer ministro de la UE, el presidente ten¨ªa en sus manos una herramienta dr¨¢stica: vetar las conclusiones y negarse a asumir un acuerdo si no se abr¨ªa una puerta para resolver el problema. Pero es algo que hay que usar con mucha cautela y sobre todo es muy dif¨ªcil hacerlo en solitario o solo con Portugal, por eso el presidente ha buscado alianzas en los ¨²ltimos d¨ªas.
Italia apoyaba a Espa?a, que a cambio respaldaba peticiones italianas para pactar compras conjuntas de gas como plantea la Comisi¨®n Europea con un precio m¨¢ximo para importaci¨®n y con un sistema de almacenamiento conjunto en la UE. Francia pod¨ªa girar la balanza, pero lo m¨¢s dif¨ªcil era vencer las resistencias alemanas. Algunos en Bruselas recordaban el momento en 2012 en el que Mario Monti y Mariano Rajoy se plantaron ante Angela Merkel y pararon la cumbre para exigir medidas contra el ahogamiento financiero de las econom¨ªas del sur en aquellos d¨ªas dominados por la llamada pol¨ªtica de austeridad.
El presidente espa?ol argument¨® ante los dem¨¢s l¨ªderes que la UE no se puede quedar quieta mientras Espa?a y otros muchos pa¨ªses sufren una crisis econ¨®mica fuerte con sectores que est¨¢n parando porque no pueden soportar el aumento del precio de la energ¨ªa. La discusi¨®n, por tanto, m¨¢s all¨¢ del debate t¨¦cnico, fue claramente pol¨ªtica. S¨¢nchez intentaba convencer a los dem¨¢s dirigentes de que la UE necesita lanzar un mensaje: que es capaz de resolver este problema y cuida a sus ciudadanos en un momento muy delicado. Y finalmente lo logr¨®.