El euro y la inflaci¨®n
El mayor riesgo de la depreciaci¨®n de la moneda es el aumento de la deuda p¨²blica
En una entrevista de televisi¨®n una periodista le pregunto a Rudi Dornsbusch, el economista que m¨¢s y mejor ha estudiado las din¨¢micas de los tipos de cambio, que pensaba que har¨ªa el d¨®lar. La respuesta fue que preguntar por la evoluci¨®n del d¨®lar es de mala educaci¨®n. Ahora que el euro ha vuelto a su paridad con el d¨®lar veinte a?os despu¨¦s es momento de volver a hablar de tipos de cambio. La mayor parte de las transacciones diarias en el mercado de divisas corresponde...
En una entrevista de televisi¨®n una periodista le pregunto a Rudi Dornsbusch, el economista que m¨¢s y mejor ha estudiado las din¨¢micas de los tipos de cambio, que pensaba que har¨ªa el d¨®lar. La respuesta fue que preguntar por la evoluci¨®n del d¨®lar es de mala educaci¨®n. Ahora que el euro ha vuelto a su paridad con el d¨®lar veinte a?os despu¨¦s es momento de volver a hablar de tipos de cambio. La mayor parte de las transacciones diarias en el mercado de divisas corresponden a flujos financieros y la relaci¨®n entre tipos de inter¨¦s y tipos de cambio es total.
Los bancos centrales usan los tipos de inter¨¦s a corto plazo para implementar su pol¨ªtica monetaria y el tipo de cambio se ajusta para que haya equilibrio monetario en el mundo en cada instante, las 24 horas del d¨ªa y los 365 d¨ªas del a?o. Los bancos centrales solo son independientes de las decisiones pol¨ªticas para financiar los d¨¦ficits p¨²blicos y no provocar hiperinflaciones, como ha sucedido en Venezuela. Pero solo tienen el monopolio de prestar dinero a muy corto plazo. Los tipos de inter¨¦s de largo plazo y los tipos de cambio se fijan libremente en los mercados financieros con millones de transacciones cada d¨ªa.
Una depreciaci¨®n del tipo de cambio abarata tus exportaciones, encarece tus importaciones, mejora tu saldo exterior y aumentan tu PIB y el empleo. Pero tambi¨¦n aumenta la inflaci¨®n, especialmente en una crisis de materias primas energ¨¦ticas que cotizan en d¨®lares en los mercados internacionales. Si la Fed sigue subiendo los tipos de inter¨¦s para contener la inflaci¨®n, el BCE se ver¨¢ obligado a subirlos, o el euro seguir¨¢ depreci¨¢ndose y aumentar¨¢ m¨¢s la inflaci¨®n.
Hace un a?o, cuando comenz¨® la crisis del gas, el euro cotizaba por encima de 1,2 con el d¨®lar. Hoy est¨¢ probando la paridad y, si la rompe, puede seguir cayendo hasta 0,9. El mayor riesgo del mayor aumento previsto de los tipos de inter¨¦s ser¨ªa el impacto sobre la deuda p¨²blica, especialmente sobre las primas de riesgo de los pa¨ªses m¨¢s endeudados. Por eso el BCE se ha visto forzado a anunciar un mecanismo de intervenci¨®n que les permita minimizar la volatilidad en las primas de riesgo, con el menor aumento del dinero en circulaci¨®n para no generar m¨¢s inflaci¨®n.
Otro riesgo de la intensa depreciaci¨®n del euro son quiebras empresariales en el sector energ¨¦tico. Alemania ya ha tenido que nacionalizar Uniper para evitar el colapso de su sistema de gas. El ¨²nico escenario que podr¨ªa frenar esta din¨¢mica de inflaci¨®n e inestabilidad cambiaria y financiera ser¨ªa un alto el fuego en Ucrania y normalizar la llegada de gas ruso a Europa, especialmente a Alemania.
Si la guerra contin¨²a, el escenario es susceptible de empeorar. Normalizar las expectativas de inflaci¨®n llevar¨¢ tiempo, pero la prioridad ahora es evitar otra crisis financiera global como en 2008.