Draghi apuesta por flexibilizar la pol¨ªtica de Competencia para que las empresas europeas ganen tama?o
El expresidente del BCE plantea eliminar obst¨¢culos para que las empresas de la UE puedan innovar en sectores que requieren grandes recursos
La brecha tecnol¨®gica que se ha abierto entre Europa y sus dos grandes competidores, Estados Unidos y China, obsesiona a Mario Draghi. Est¨¢ presente en buena parte de las 328 p¨¢ginas del informe que el expresidente del BCE ha preparado para impulsar la productividad en la UE y la competitividad de las empresas. Incluso aparece en el cap¨ªtulo dedicado a la pol¨ªtica de Competencia, defiende el italiano que el poderoso depar...
La brecha tecnol¨®gica que se ha abierto entre Europa y sus dos grandes competidores, Estados Unidos y China, obsesiona a Mario Draghi. Est¨¢ presente en buena parte de las 328 p¨¢ginas del informe que el expresidente del BCE ha preparado para impulsar la productividad en la UE y la competitividad de las empresas. Incluso aparece en el cap¨ªtulo dedicado a la pol¨ªtica de Competencia, defiende el italiano que el poderoso departamento bruselense que autoriza (o no) las grandes fusiones entre empresas o analiza sus pr¨¢cticas comerciales flexibilice su acci¨®n teniendo muy presente el vector tecnol¨®gico porque ¡°la econom¨ªa se ha orientado hacia sectores intensivos en innovaci¨®n, [...] en los que tanto la escala como la innovaci¨®n son fundamentales para competir, m¨¢s que los precios bajos¡±. Se trata, viene a decir el documento, que a la hora analizar operaciones corporativas, por ejemplo, se aplique una pol¨ªtica m¨¢s flexible que permita a las compa?¨ªas europeas competir en un mercado que, en muchos casos, no es siquiera europeo, sino global.
Admite el informe Competitividad de la UE: mirando hacia el futuro que no se trata de que las empresas ganen tama?o por ganar y que, de esta forma, coarten la competencia, lo que tiene consecuencias nefastas para los consumidores y trabajadores: precios m¨¢s altos, menos oferta de productos e, incluso, control de sueldos en determinados sectores. Por eso, el propio texto apunta en el cap¨ªtulo dedicado a esta pol¨ªtica que ¡°la innovaci¨®n no puede utilizarse para justificar una mayor concentraci¨®n por parte de empresas ya dominantes o en casos en los que la concentraci¨®n plantee un riesgo significativo de afianzar una posici¨®n dominante, perjudicando en ¨²ltima instancia a la competencia efectiva¡±. Pero s¨ª que pide a las ¡°autoridades m¨¢s visi¨®n de futuro y ser m¨¢s ¨¢giles¡±.
Cuando reclama velocidad y mirada hacia delante, Draghi vuelve a poner el foco en la tecnolog¨ªa: ¡°La innovaci¨®n en este sector es r¨¢pida, las evaluaciones de las fusiones en ¨¦l deben valorar c¨®mo afectar¨¢ la concentraci¨®n propuesta al futuro potencial de innovaci¨®n, a pesar de su incertidumbre. Esta evaluaci¨®n es m¨¢s compleja que la simple evaluaci¨®n del efecto sobre los precios de una fusi¨®n¡±. No se trata de cambiar las leyes, sino de que ¡°el aparato regulador est¨¦ en sinton¨ªa con la evoluci¨®n del pensamiento econ¨®mico de la era digital¡±, detalla el documento citando al Nobel de Econom¨ªa Jean Tirole, premio que recibi¨® por sus an¨¢lisis de los mercados y su regulaci¨®n.
Este planteamiento tiene el objetivo de permitir que las empresas de la UE puedan ganar tama?os en sectores como la Inteligencia Artificial, la computaci¨®n cu¨¢ntica, el almacenaje de datos en la nube, en la fabricaci¨®n de semiconductores, la defensa o las telecomunicaciones. En cada uno de los cap¨ªtulos dedicados a ellos, el informe utiliza el eufemismo con el que suele hablarse de ganar tama?o: consolidaci¨®n. No recurre a ella en otros como la energ¨ªa o la fabricaci¨®n de autom¨®viles.
La pol¨ªtica de Competencia es una de las grandes ¨¢reas de la Comisi¨®n Europea. El control de las grandes fusiones, de las pol¨ªticas comerciales de las grandes empresas o de las ayudas de Estado m¨¢s sustanciosas es una tarea casi exclusiva del Ejecutivo de la Uni¨®n. De ah¨ª que puesto de comisario o comisaria de Competencia sea uno de los m¨¢s jugosos del Colegio de Comisarios. Eso precisamente es una de las cuestiones abiertas en estas semanas en la que se est¨¢n distribuyendo las carteras de la pr¨®xima Comisi¨®n y para el puesto suena con mucha fuera la ministra espa?ola de Transici¨®n Ecol¨®gica y vicepresidenta tercera, Teresa Ribera.
Si finalmente fuera ella, a buen seguro recibir¨¢ presiones desde muchos frentes, entre ellos desde Berl¨ªn y Par¨ªs. Los ejecutivos de los dos pa¨ªses de la UE han sido muy cr¨ªticos en el pasado con la pol¨ªtica de Competencia de Bruselas y con su titular actual, la danesa Margrethe Vestager. Su veto a la fusi¨®n de Siemens y Alstom desat¨® la ira de Alemania y Francia que apostaban con fuerza por la operaci¨®n para crear lo que se llama un campe¨®n europeo que compitiera en el mercado global, es decir, una empresa muy dominante en el mercado de la UE que gracias a esto tuviera m¨²sculo financiero para pelear comercialmente a escala mundial.
Pero las demandas de flexibilizaci¨®n que lanza Draghi en su informe no apuntan a una relajaci¨®n indiscriminada. Se encaminan a eliminar obst¨¢culos para que las compa?¨ªas europeas ganen tama?o en aquellos sectores en los que los recursos que requiere la innovaci¨®n y la investigaci¨®n sean tan elevados que acaban constituyendo una barrera de entrada. El documento cita Airbus como ejemplo en que se justifica la concentraci¨®n ¡°por la necesidad de poner en com¨²n recursos para cubrir grandes costes fijos y alcanzar la escala necesaria para competir a escala mundial¡±. Tambi¨¦n puede ser el caso de adquisiciones de empresas punteras tecnol¨®gicamente que, por su tama?o, pudieran tener dificultades para llegar a un mercado global.