Un Rey Baltasar pintado de negro, siempre, pero nunca gay

El rey Baltasar de nuestra infancia sol¨ªa ser un simple se?or de raza blanco embetunado, oriundo de la localidad pero bien repintado de negro para parecerse al mago africano que lleg¨® al portal de Bel¨¦n junto con Melchor y Gaspar cuando naci¨® Jesucristo. Ocurri¨® durante d¨¦cadas, sobre todo cuando la inmigraci¨®n no se hab¨ªa extendido en Espa?a y apenas hab¨ªa negros, y nadie mont¨® ninguna gresca por semejante farsa ni aunque se notara. Ni aunque los pajes, magos o lanzadores de caramelos desde una carroza de la cabalgata se parecieran al alcalde, al concejal o a los chavales m¨¢s grandes del pueblo. Que se parec¨ªan y que se notaba, vaya que s¨ª.

Como espa?oles de bien y portadores de esta tradici¨®n tan noble y singular que a partir de ahora habr¨¢ que fijar a sangre y fuego en el programa electoral de los partidos, siempre los padres se las arreglaban para explicar a los ni?os por qu¨¦ el 6 de enero hab¨ªa Reyes Magos simult¨¢neos en la pantalla de televisi¨®n, en El Corte Ingl¨¦s, en el colegio, en el barrio, en el pueblo de los abuelos y adem¨¢s en la estafeta de correos reales del centro comercial donde los ni?os hab¨ªan depositado la carta. Y todo se complicaba cuando adem¨¢s hab¨ªa que compatibilizar la tradici¨®n espa?ola con el trineo de renos de Pap¨¢ Noel, que en las pel¨ªculas americanas era Santa Claus, o con las befanas para los emparentados con Italia, el Ti¨® de Nadal o Tronco de Navidad que defeca regalos para los ni?os catalanes, el Olentzero para los vascos, el Esteru para los c¨¢ntabros o el Apalpador para los gallegos. La explicaci¨®n siempre fue tan inveros¨ªmil como efectiva, funcionaba, porque la magia, es lo que tiene. Que a todos les hab¨ªa dado por venir a regalarnos cosas en Navidad y que, l¨®gicamente, a veces necesitaban ayudantes, en fin, vaya preguntas.

Pero ha tenido que gobernar Manuela Carmena en la capital de Espa?a o Ada Colau en Barcelona para que los disfraces y el sexo de los Reyes Magos se conviertan en esc¨¢ndalo y noticia de primera p¨¢gina para una especie de puritanos de la moral real y custodios de la tradici¨®n tal y como nos la hemos cre¨ªdo. Bueno, un momento: ?Tradici¨®n? ?Nos escandalizamos de que un rey mago sea mujer pero no de que un negro sea en realidad un blanco pintado?

En esta ocasi¨®n, despu¨¦s del esc¨¢ndalo de los trajes reales modelo cortina de ducha que emplearon sus Majestades en Madrid en 2016 y que tanto amargaron la Navidad a los defensores del modelo capa aterciopelada como Cayetana ?lvarez de Toledo, y de la extensi¨®n de reinas magas en 2017, la noticia ha saltado porque una de las decenas de cabalgatas que se celebran en los distritos, la de Vallecas, va a incluir una carroza por la igualdad del colectivo LGTBI y la diversidad. Y ha ardido Troya. Que habr¨¢ una drag queen, una cabaretera y una cantante de hip hop, han dicho. El acab¨®se. Y que en Barcelona el Bel¨¦n es conceptual. ?Un esc¨¢ndalo! ?Hasta d¨®nde vamos a llegar con la nueva pol¨ªtica! Al menos, a una carcajada general, pero de quienes a¨²n se lo toman en serio.