10 fotosPueblosDe Siurana a Cuenca: los enclaves m¨¢s vertiginosos de Espa?a Erigidos en lugares incre¨ªbles, al borde del abismo, en este dec¨¢logo de localidades esperan castillos, calles empinadas, ca?ones y miradores estratosf¨¦ricosAndr¨¦s Campos27 abr 2024 - 05:45CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinComentariosSiurana (Tarragona). Este pueblo medieval se alza con su iglesia rom¨¢nica, sus casitas de piedra y las ruinas de su castillo ¨¢rabe sobre una pe?a plana tajada a pico, al borde de un acantilado calizo de la sierra de Prades, desde donde se contemplan las paredes no menos verticales del vecino macizo del Montsant. Es un lugar dif¨ªcil de creer. Y a¨²n m¨¢s dif¨ªcil de conquistar. Se cuenta que los cristianos sudaron la gota gorda para tomar este nido de ¨¢guilas y que, cuando por fin lo lograron, le ofrecieron a la mujer del ¨²ltimo val¨ª la posibilidad de salvar la vida si abjuraba de su fe, oferta que la se?ora declin¨® arroj¨¢ndose a caballo por el precipicio. El mirador del Salt de la Reina Mora domina un panorama que corta el resuello. Se entiende por qu¨¦ Siurana atrae a tantos escaladores.Marc Venema (Alamy / CORDON PRESS)Alqu¨¦zar (Huesca). Alqu¨¦zar era ¡®al-Qasr¡¯, el alc¨¢zar, un castillo moro con un foso de m¨¢s de 300 metros de profundidad: el ca?¨®n del r¨ªo Vero. Ahora este es uno de los pueblos m¨¢s bonitos y escarpados de Espa?a; su castillo, una colegiata amurallada con un precioso claustro rom¨¢nico, el ¨²nico de Arag¨®n que se conserva enteramente pintado; y el ca?¨®n, un no parar de senderistas que lo recorren caminando por pasarelas met¨¢licas fijadas a sus paredes verticales y de barranquistas que descienden con un neopreno por los toboganes, pasillos, badinas y piscinas que el Vero ha labrado en las calizas de la sierra de Guara. Dice la leyenda que a¨²n se oyen en el ca?¨®n los alaridos de los soldados musulmanes que perdieron Alqu¨¦zar. No: son los gritos de alegr¨ªa de estos otros.Fabrizio Cortesi (Alamy / CORDON PRESS)Izn¨¢jar (C¨®rdoba). Otra fortaleza ¨¢rabe dio origen y nombre a este pueblo; derivando del sustantivo ¡®hisn¡¯ (castillo) y del adjetivo ¡®al-ashar¡¯ (alegre). La poblaci¨®n est¨¢ en un lugar extraordinario: sobre una escarpada cresta de las Sierras Subb¨¦ticas, rodeada por las aguas represadas, color mar tropical, del r¨ªo Genil, que forman el mayor embalse del sur de Espa?a. En la parte alta, junto a la iglesia y el castillo, se halla el Patio de las Comedias, una placita repleta de macetas azules desde donde se ve como Dios el pueblo blanco y el llamado ¡°lago de Andaluc¨ªa¡±. Ah¨ª al lado, en la calle Villa, se encuentra el ascensor que usan para bajar los f¨¦retros al cementerio, porque es tan empinada la ladera que, si no, no hay manera. ?Cosas veredes, Sancho!: un pueblo en el que los muertos, en lugar de subir, caen del cielo.Sir Francis Canker (GETTY IMAGES)Chulilla (Valencia). Este es un pueblo blanco de las monta?as del interior de Valencia, pintoresco a rabiar, de origen y fisonom¨ªa morunos, con calles tan empinadas y estrechas que se necesita un sem¨¢foro para evitar que se crucen dos coches en la principal, porque no caben. A pie, pues, recorreremos las callejuelas cuestudas, subiremos al que fue hisn o castillo isl¨¢mico de Xulella y nos asomaremos a las hoces del Turia, el ca?¨®n de paredes anaranjadas de roca caliza de 80 metros que sirve de foso a este fant¨¢stico lugar. Si queremos andar m¨¢s, haremos la ruta de los Pantaneros, el camino que segu¨ªan hace medio siglo desde Chulilla los obreros de la presa de Loriguilla, cruzando el r¨ªo enca?onado a trav¨¦s de puentes colgantes de madera que recuerdan a los del Himalaya.Peter D Noyce (Alamy / CORDON PRESS)Albarrac¨ªn (Teruel). Tres castillos y dos murallas, una de ellas largu¨ªsima. Abajo, el foso curvo y profundo del r¨ªo Guadalaviar. Arriba, el castillo m¨¢s alto, la torre califal del Andador, del siglo X. Y a media altura, junto al Portal de Molina, la casa de la Julianeta, que data del siglo XIV pero parece mucho m¨¢s moderna, de la ¨¦poca cubista, por su perspectiva caprichosa: tan ladeada est¨¢ que parece que va a derrumbarse. No solo la casa de la Julianeta: todo Albarrac¨ªn se inclina porque es una pura cuesta, no apta para circular en coche ni para andar con tacones. Avisados quedan.StockPhotoAstur / Alamy / CORDON PRESSArcos de la Frontera (C¨¢diz). En la plaza del Cabildo, en lo m¨¢s alto del promontorio rocoso en que se asienta este pueblo blanco gaditano, asombra a propios y extra?os el Balc¨®n de la Pe?a Nueva, desde donde se ve la espalda de los p¨¢jaros, el Guadalete serpenteando cien metros m¨¢s abajo y, al fondo, la sierra de Grazalema. Lo que no asombra a nadie, viendo semejante panorama, es que esta villa fuera no solo un alc¨¢zar andalus¨ª, sino una taifa, un reino aparte.Jose Miguel S¨¢nchez (Alamy / CORDON PRESS)Castellfollit de la Roca (Girona). Los franceses derribaron el castillo en 1691, pero el pueblo sigue en lo alto de una roca espeluznante, infernal, surgida de las entra?as de la tierra hace 200.000 a?os, cuando la Zona Volc¨¢nica de La Garrotxa estaba en plena ebullici¨®n. Dos coladas de lava superpuestas formaron este acantilado de 50 metros de altura: un precipicio de columnas bas¨¢lticas que semeja un ¨®rgano de viento de gigantes. Pueblo y risco multiplican por dos su belleza al espejarse en las aguas del r¨ªo Fluvi¨¤. As¨ª se ven desde la pasarela-mirador de Castellfollit de la Roca. No tiene p¨¦rdida.JackF (GETTY IMAGES)Ronda (M¨¢laga). Rilke, al que no dijeron nada otros famosos lugares de Andaluc¨ªa, flip¨® con Ronda: ¡°La localidad muy espa?ola encaramada del modo m¨¢s fant¨¢stico y grandioso a una monta?a y reunida sobre dos enormes verticales moles de roca que corta el angosto y profundo tajo¡±. Era y es ¡°la ciudad so?ada¡±. Parada obligada al atardecer en el mirador de Aldehuela para ver c¨®mo el ¨²ltimo sol enhebra el puente Nuevo, el gigante de 98 metros de altura que salva de tres zancadas el tajo excavado por el r¨ªo Guadalev¨ªn. Tampoco hay malas vistas al amanecer, sobrevolando Ronda en un globo de Glovento Sur.Eloi Omella (GETTY IMAGES)Fr¨ªas (Burgos). Tampoco es un pueblo, aunque lo parece, y tambi¨¦n tiene Casas Colgadas. Fr¨ªas, ciudad medieval del norte de la provincia de Burgos y la ciudad m¨¢s peque?a de Espa?a, hace equilibrios sobre el afilado cerro de la Muela, con su castillo del siglo XII en lo m¨¢s alto y sus 267 vecinos acurrucados en casas de roca tob¨¢cea y entramado de madera que se api?an a lo largo de angostas costanillas o cuelgan directamente sobre el abismo. Desde el mirador que hay a la entrada de Fr¨ªas, viniendo de Tobera, todas las fotos salen bien, hasta las que se disparan sin querer.Prisma / Dukas / Universal Images Group / Getty ImagesCuenca. No es un pueblecito, vale, pero no hay otro lugar en Espa?a m¨¢s bellamente plantado al borde del abismo que esta ciudad milenaria, con sus Casas Colgadas sobre la hoz del Hu¨¦car y sus Rascacielos del J¨²car, todo construido sin usar una gr¨²a, un l¨¢ser, un arquitecto. Para admirar este castillo de naipes medieval, nada como recorrer el sendero perif¨¦rico de las Hoces de Cuenca (SL-CU 10), que traza un c¨ªrculo de cuatro kil¨®metros alrededor del casco hist¨®rico, subiendo primero por el ca?¨®n del r¨ªo Hu¨¦car y bajando despu¨¦s por el del J¨²car. Se?alizado con letreros y marcas de pintura blanca y verde, arranca en el Auditorio, donde hay un aparcamiento. Se tardan dos horas y media en completar la caminata.Luis Martinez (Design Pics Editorial / Universal Images Group / Getty Images)