Anitta: ¡°La extrema derecha no gan¨® en Brasil porque much¨ªsimos artistas nos unimos para denunciar la violencia¡±
La cantante brasile?a es uno de los mayores s¨ªmbolos de su pa¨ªs por su m¨²sica sin prejuicios y una voz pol¨ªticamente comprometida con los derechos sociales y contra la figura de Jair Bolsonaro. En este momento dulce de su carrera, se quita el uniforme de ¨ªdolo de masas para descubrir qu¨¦ hay detr¨¢s de una joven de origen humilde que ha logrado ser la primera mujer latinoamericana en alcanzar el n¨²mero uno en las listas globales
Mediod¨ªa en un estudio fotogr¨¢fico al norte de Madrid. Suena el timbre y entran cuatro personas con ropa deportiva, sonriendo y preguntando por el ba?o. Dejan sus abrigos y recorren el espacio hasta llegar a un burro repleto de prendas que no escatiman en fantas¨ªa: pliegues de tul blanco, lentejuelas y lazos de seda roja, transparencias y afilados tacones. Alguien bromea con la llegada anticipada de la Navidad y se escucha la voz de una mujer menuda: ¡°Parece que hoy ser¨¦ una Anitta festiva. ?Me ir¨¦ metiendo en el personaje!¡±, dice con sorna a sus amigos. Cuando aparece transformada dos horas d...
Mediod¨ªa en un estudio fotogr¨¢fico al norte de Madrid. Suena el timbre y entran cuatro personas con ropa deportiva, sonriendo y preguntando por el ba?o. Dejan sus abrigos y recorren el espacio hasta llegar a un burro repleto de prendas que no escatiman en fantas¨ªa: pliegues de tul blanco, lentejuelas y lazos de seda roja, transparencias y afilados tacones. Alguien bromea con la llegada anticipada de la Navidad y se escucha la voz de una mujer menuda: ¡°Parece que hoy ser¨¦ una Anitta festiva. ?Me ir¨¦ metiendo en el personaje!¡±, dice con sorna a sus amigos. Cuando aparece transformada dos horas despu¨¦s, hay un abismo entre Larissa de Macedo Machado (R¨ªo de Janeiro, Brasil, 29 a?os) y la mujer que posa frente al objetivo del fot¨®grafo. A cualquiera podr¨ªa sorprenderle el contraste digno de aquel programa llamado Lluvia de estrellas, pero la protagonista lleva una d¨¦cada camuflada precisamente en esas vidas paralelas. ¡°Siempre he sido una persona extremadamente t¨ªmida, as¨ª que me he hecho una imagen m¨¢s fuerte y extrovertida de cara al p¨²blico. A veces me funciona y a veces no, pero es la ¨²nica forma de llevar al d¨ªa todo esto que me ha venido¡±, zanja. ¡°Todo eso¡± que nombra es, entre otras cosas, la fama astron¨®mica que esta cantante brasile?a ha ido gan¨¢ndose desde que en 2010 subiera un v¨ªdeo a YouTube con un desodorante como micr¨®fono.
No ha sido una escalada repentina, pero el ¨²ltimo lustro ha resultado clave para que el nombre de Anitta trascienda barreras geogr¨¢ficas y ling¨¹¨ªsticas: con 24 millones de oyentes mensuales en Spotify, es la primera mujer latinoamericana en haber subido al n¨²mero uno en las listas globales con su tema Envolver. Su serie de colaboradores va de Madonna a Caetano Veloso y sus r¨¦cords, ya incontables, incluyen el premio a la mejor artista latina en los American Music Awards y una nominaci¨®n al mejor artista revelaci¨®n en los Grammy, que se entregar¨¢n el 5 de febrero de 2023 en Los ?ngeles. Y por encima de todo, los habitantes de Brasil le atribuyen un m¨¦rito m¨¢s digno a¨²n: el de ser la m¨¢xima patrona de la nueva m¨²sica hecha en aquel territorio. Y con unas cifras que hablan por s¨ª solas y una industria que parece ofrecerle finalmente el lugar que lleva 10 a?os gan¨¢ndose, De Macedo destila una modestia y una sensatez pr¨¢cticamente ins¨®litas en su gremio.
Anitta, que eligi¨® su apodo por la protagonista de una miniserie emitida en 2001, lleg¨® a Madrid tres d¨ªas antes de esta charla. Aterriz¨® directa desde Nueva York, donde recogi¨® un galard¨®n de Wall Street Journal Magazine, para ir a los ensayos de LOS40 Music Awards, que se celebraban en el WiZink Center. ¡°Recuerdo estar ensayando y preguntarle a mi publicista por la mesa m¨¢s divertida para hacer un perreo. Se?al¨® una en concreto, donde iban a sentarse algunos directivos musicales y tambi¨¦n una mujer a la que me present¨® poco despu¨¦s. Yo entend¨ª que era una community manager de algo relacionado con Madrid, pero no le di mayor importancia. Hasta que a la ma?ana siguiente el m¨®vil de [la publicista] Mar¨ªa echaba fuego¡±, recuerda entre sorna sobre el paso suntuoso con que obsequi¨® a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, quien respondi¨® entre encantada y patidifusa. Al d¨ªa siguiente, en el programa La resistencia desarroll¨® la historia y pas¨® p¨¢gina. ¡°Aunque los espa?oles vay¨¢is a recordarme as¨ª un tiempo¡±, dice entre risas.
Tras la sesi¨®n de hoy, la cantante cenar¨¢ en el restaurante Amaz¨®nico con un pu?ado de amigos y proseguir¨¢ un periplo que pasar¨¢ por Ciudad de M¨¦xico, Los ?ngeles y Las Vegas. Y a¨²n le queda tiempo para lanzar por sorpresa un EP en portugu¨¦s. ¡°No digo que no haga falta mucha energ¨ªa para llevar esta vida, porque estar¨ªa mintiendo, pero ser¨ªa un poco absurdo que me quejara de algo con lo que llevo so?ando desde que nac¨ª¡±, razona. Ese sue?o est¨¢ bien documentado en Vai, Anitta! (2018) y Anitta: Made in Hon¨®rio (2020), ambos producidos por Netflix, que retratan a una artista capaz de hablar con igual naturalidad de su bisexualidad o de un hermano reci¨¦n descubierto. ¡°Me crie sin apenas recursos, pero rodeada de familia y amigos, as¨ª que supe muy pronto que la vida hay que exprimirla¡±, cuenta sobre su infancia en la barriada carioca de Hon¨®rio Gurgel, a 25 kil¨®metros de la playa de Ipanema. ¡°En Brasil, la educaci¨®n p¨²blica est¨¢ mucho peor que en Europa, y mis padres pudieron llevarme a una escuela privada hasta que un d¨ªa mi padre no tuvo c¨®mo seguir pagando. La ¨²nica soluci¨®n, cuando cumpl¨ª los siete a?os, era seguir como becada, y para ello hab¨ªa un concurso llamado Chica de primavera al que deb¨ªas presentarte con un conjunto reciclado¡±. Se present¨® con un modelo a base de botellas de pl¨¢stico y vasos de cart¨®n, y se alz¨® ganadora para estudiar un a?o m¨¢s. ¡°Al curso siguiente cancelaron el concurso y me toc¨® cambiar a un colegio p¨²blico, pero aquella peque?a victoria no me la quita nadie¡±, recuerda con un gui?o.
M¨¢s tarde, la cantante ya estaba estudiando Administraci¨®n, compagin¨¢ndolo con pr¨¢cticas en una empresa minera y formando a otros empleados sobre algunos aspectos de la compa?¨ªa. ¡°Supe muy pronto que ten¨ªa la opci¨®n de ganarme la vida en cualquier trabajo, porque nunca he tenido problema en hacer lo que haga falta para ayudar a mi familia, pero tambi¨¦n entend¨ª que eso implicaba no llegar a sentirme llena nunca¡±. La carambola lleg¨® en forma de fiesta, en concreto la que un programa de televisi¨®n local celebraba a unas calles de su casa. All¨ª, particip¨® en varios maratones de funk carioca ¡ªg¨¦nero gestado entre las favelas a finales de los ochenta¡ªsin dejar de cantar junto a su abuelo en la misa de los domingos. ¡°No par¨¦ hasta conocer a los promotores, y a partir de ah¨ª no hubo forma de detenerme¡±, remata.
El gran salto ocurri¨® en 2013, cuando el sencillo Show das poderosas subi¨® al olimpo de las listas nacionales y comenz¨® a sonar en radios europeas. La de R¨ªo se dio cuenta de que deb¨ªa lanzar m¨²sica en otros idiomas para dar el salto al mercado internacional. ¡°Mi discogr¨¢fica me trajo a Madrid para un evento y no entend¨ª a nadie, la traductora que me pusieron en las entrevistas era una t¨ªa supert¨ªmida y no se atrev¨ªa a hablar, y aqu¨ª estaba yo, en una escena surrealista sin saber comunicarme. A mi vuelta, empec¨¦ con clases de espa?ol¡±, cuenta. Se aplic¨® tan sobradamente que lanz¨® temas en castellano junto a Maluma o J Balvin, con quien hizo de Downtown un ¨¦xito mundial que ya supera los 1.200 millones de reproducciones entre YouTube y Spotify. Un ejemplo del vigor que desprende su discograf¨ªa y que constata su rol a la hora de exportar Brasil a la m¨²sica global: ¡°Hab¨ªa mucha gente empe?ada en recordarme que ning¨²n artista brasile?o hab¨ªa llegado a ser conocido en todo el mundo. Carmen Miranda fue la primera y ¨²nica mujer en conseguirlo, y por supuesto que la bossa nova de Tom Jobim, Caetano Veloso y Vin¨ªcius de Moraes es un legado incre¨ªble para nosotros. Pero en cuanto al mercado pop, ese siempre ha sido terreno vetado¡±, explica. Tampoco le supuso un gran obst¨¢culo: comenz¨® a componer y producir pensando en el mercado latino, al que lleg¨® por la v¨ªa inevitable del reguet¨®n. ¡°Puedes salir por Brasil y que en una discoteca te pinchen dos canciones de reguet¨®n en toda la noche, no es un g¨¦nero con el que hayamos crecido ni que hayamos interiorizado tanto como otros pa¨ªses de Sudam¨¦rica. Tienes que reventar mucho en todo el mundo para sonar all¨ª, somos una burbuja con lo bueno y lo malo¡±, sonr¨ªe, recordando que tanto a J Balvin como a Maluma les hicieron falta m¨²ltiples visitas al pa¨ªs ¡ªla mayor¨ªa con ella como anfitriona¡ª para que su m¨²sica calara entre la poblaci¨®n.
Recostada en el sof¨¢ del estudio, Anitta menciona m¨¢s veces el nombre de sus perros o sus hermanos que las cifras de un ¨¦xito que marear¨ªan a cualquiera. Su discograf¨ªa suma cinco ¨¢lbumes y otras cinco decenas de sencillos; en su ¨²ltimo LP, Versions of Me ¡ªcuya portada alude a su transformaci¨®n a trav¨¦s de la cirug¨ªa est¨¦tica, que nunca ha tenido reparos en describir¡ª, incluye letras en ingl¨¦s, portugu¨¦s, espa?ol, italiano y franc¨¦s. Y si hay artistas que emplean varios a?os en lanzar nuevos temas al mercado, el ritmo de producci¨®n de la carioca es vertiginoso. ¡°Si tengo una idea, la empiezo a montar y a partir de ah¨ª suelo llamar o escribir a quienes creo que me pueden ayudar a llevarla a cabo¡±, cuenta. Hay canciones que le han llevado menos de un d¨ªa en tener esbozadas, como fue el caso de Envolver. La bosquej¨® durante unas vacaciones con familiares y amigos en un hotel de Rep¨²blica Dominicana, y en apenas unas horas estaba lista para que el productor Subelo NEO le hincara el diente. ¡°No me gusta dormirme en los laureles¡±, bromea al respecto.
En cuanto al car¨¢cter salvaje que muchos le atribuyen, no tiene reparos en aceptarse como alguien con las ideas claras, aunque sus opiniones suelan levantar tantos adeptos como detractores. Tanto que es de sobra conocida su aversi¨®n por el ultraderechista Jair Bolsonaro, y no tiene problema en debatir con pol¨ªticos sobre asuntos sociales. As¨ª ocurri¨® durante la pandemia, cuando la cantante convoc¨® a sus entonces 50 millones de seguidores en Instagram (hoy ya supera los 63) a un debate en directo con el diputado socialista Felipe Carreras sobre una medida legal que planteaba un recorte a los derechos de autor de los artistas. ¡°Muchos pensar¨¢n que defender los valores en los que creo me convierte en una mujer pol¨¦mica, pero es algo tan sencillo como no ser hip¨®crita y alzar la voz cuando sea necesario¡±, replica ella. Anitta celebr¨® la victoria de Lula da Silva en las elecciones presidenciales del 30 de octubre, pero no sin resaltar que la ventaja con Bolsonaro fue m¨ªnima: apenas 1,8 puntos los separaron. ¡°Creo que la extrema derecha no gan¨® porque much¨ªsimos artistas nos unimos para denunciar la violencia y la injusticia que sufre Brasil, y aun as¨ª nos quedamos apenas dos millones de votos por encima. Cuando tienes una sociedad tan dividida, es cuando algunos se aprovechan de ese descontento para ganar votos. El pueblo no gana estando dividido, y menos en un pa¨ªs como el m¨ªo que supera los 200 millones de habitantes. Las redes sociales nos dicen a qu¨¦ tenemos que pertenecer, pero el riesgo que eso conlleva es no saber qui¨¦nes somos individualmente¡±, zanja.
La revista estadounidense Forbes acaba de incluirla en su lista de los 30 menores de 30 a?os m¨¢s influyentes del mundo, y una encuesta del peri¨®dico O Globo, uno de los m¨¢s le¨ªdos en Brasil, la ha situado como hipot¨¦tica tercera fuerza pol¨ªtica en ese pa¨ªs sudamericano. Aunque es algo que le han pedido en m¨²ltiples foros, descarta meterse en pol¨ªtica de forma m¨¢s oficial, pero no deja de volcarse en causas que as¨ª lo valgan: son incontables las ocasiones en las que ha hablado en p¨²blico de la deforestaci¨®n del Amazonas (la destrucci¨®n de la selva tropical m¨¢s grande del mundo alcanz¨® su mayor nivel durante el mandato de Bolsonaro), en mayo de este a?o compr¨® acciones minoritarias en una empresa de carne vegetal y es una de las productoras ejecutivas de Eu, un documental sobre la actriz Ludmila Dayer que pone el foco en la salud mental y en trastornos como la ansiedad y la depresi¨®n. ¡°Normalmente, esas son las cosas que de verdad me importan cuando me quito el vestido de un espect¨¢culo y vuelvo a ser yo, fuera del personaje¡±. Puede que hasta el a?o pasado el tiempo para sacudirse ese rol brillara por su ausencia, pero a punto de cumplir los 30 a?os ¡ªlo har¨¢ el 30 de marzo¡ª, Anitta promete que eso ha cambiado dr¨¢sticamente. Aunque solo en la semana pr¨®xima a esta entrevista habr¨¢ recogido una estatuilla en los American Music Awards, aparecido en una campa?a para la firma de lujo italiana Dolce & Gabbana y viajado a Jap¨®n en compa?¨ªa de su amiga y compa?era Lele Pons, Larissa de Macedo Machado promete que sus ambiciones han virado. ¡°Durante estos a?os he llegado a estar meses trabajando sin un d¨ªa de descanso, pero hace tiempo que he aprendido a parar y salir del personaje. En los ¨²ltimos 50 d¨ªas, habr¨¦ hecho dos o tres jornadas completas de trabajo, y aunque me esperan unas semanas intensas, no quiero volver a los niveles de antes. Este ha sido un a?o de desaf¨ªos, pero tambi¨¦n de victoria y reconocimiento¡±, cuenta con ojos empa?ados y tono enigm¨¢tico. No quiere desarrollar m¨¢s su respuesta ni dar m¨¢s detalles sobre el reto al que se enfrenta, pero a?ade: ¡°Ahora mismo estoy en mitad de un desaf¨ªo, pero s¨¦ que voy a superarlo. Despu¨¦s de todo, eso es lo que llevo haciendo toda mi vida¡±.