Imanol Ibarrondo: ¡°Hace 2.000 a?os no hab¨ªa ni psic¨®logos ni psiquiatras ni pastillas. Hab¨ªa filosof¨ªa¡±
Lo aprendi¨® casi todo de sus lesiones como futbolista profesional. Se convirti¨® en ¡®coach¡¯ buscando su propia felicidad y ha ense?ado a deportistas, instituciones y empresas a superar sus miedos
Imanol Ibarrondo (Bilbao, 56 a?os) ten¨ªa un don para el f¨²tbol. Con 13 a?os entrenaba en Lezama cuando se le juntaron una operaci¨®n, una fractura de f¨¦mur y un parche en un ojo. Lo echaron. Eso lo liber¨® de la presi¨®n del miedo y lleg¨® a Primera Divisi¨®n, en las filas del Rayo Vallecano. Su libro La primera vez que la pegu¨¦ con la izquierda (Kolima) empieza con el suplicio que vivi¨® en el Nou Camp. ...
Imanol Ibarrondo (Bilbao, 56 a?os) ten¨ªa un don para el f¨²tbol. Con 13 a?os entrenaba en Lezama cuando se le juntaron una operaci¨®n, una fractura de f¨¦mur y un parche en un ojo. Lo echaron. Eso lo liber¨® de la presi¨®n del miedo y lleg¨® a Primera Divisi¨®n, en las filas del Rayo Vallecano. Su libro La primera vez que la pegu¨¦ con la izquierda (Kolima) empieza con el suplicio que vivi¨® en el Nou Camp. Minuto 28. Bar?a, 5; Rayo, 0. ?Cu¨¢ntos m¨¢s les iba a meter el Dream Team? Aquel partido demuestra c¨®mo Ibarrondo ha convertido la derrota de sus miedos en su profesi¨®n.
Sostiene que todos tenemos un lado oscuro y otro luminoso. Y que liderar es ayudar a que aflore el luminoso. ¡°El liderazgo de Guardiola es distinto al de Simeone o al de Del Bosque. A Guardiola no le interesa ganar, sino ganar de una forma diferente. Del Bosque es conciliador. Deja que la gente vaya haciendo, como un pastor que va detr¨¢s¡±. ¡°Anna Tarr¨¦s es como un volc¨¢n en erupci¨®n: tengo 8 medallas, necesitamos 14. Conquist¨® lo que conquist¨® en nataci¨®n sincronizada. Pero a veces el precio es muy alto y hay gente que se siente agredida¡±. Imanol Ibarrondo vive entre San Diego (Estados Unidos) y Tijuana (M¨¦xico). Esta torrencial entrevista es por Zoom.
¡°Ser futbolista es la mejor vida que existe si no fuera por los domingos¡±.
La presi¨®n te conecta con el miedo a no estar a la altura y el miedo ante un desaf¨ªo te agarrota, te impide rendir. Es biol¨®gico. Ante una situaci¨®n que la mente considera peligrosa, te pones a la defensiva.
?Messi camina por el centro del campo por miedo?
No. Messi caminando se est¨¢ colocando para recibir m¨¢s liberado. Su talento descomunal no requiere que corra tanto como otros. Aporta m¨¢s ubic¨¢ndose.
?El miedo es un c¨ªrculo vicioso?
Es como una profec¨ªa autocumplida. ¡°La voy a cagar¡±¡ y la cagas. El miedo te desconecta del presente. Por eso estar conectado a lo que hagas, leer un libro o jugar al f¨²tbol, es el ant¨ªdoto.
?Conviene escuchar los argumentos del miedo?
Somos emocionalmente analfabetos. Nos cuesta identificar, expresar y entender qu¨¦ nos dicen las emociones. Por eso reaccionamos ante ellas. El cerebro m¨¢s primario, al detectar movimiento tras un matorral, hac¨ªa que la sangre fuera a las piernas y sali¨¦ramos corriendo como si fu¨¦ramos Usain Bolt. El drama es que miles de a?os despu¨¦s el cerebro sigue escaneando peligros, reales o imaginarios, 24 horas al d¨ªa. Lo que nos permiti¨® sobrevivir, hoy es m¨¢s problema que apoyo.
?Cu¨¢l fue su primer miedo?
Con 13 a?os me atropell¨® un coche que iba a 90 por hora. Me empuj¨® 30 metros. Mi padre estaba conmigo. Lo primero que pens¨¦ fue: qu¨¦ verg¨¹enza.
Con 13 a?os.
Ese miedo ha estado muy presente en mi vida. Pero la vida me ha dado desaf¨ªos para crecer. Momentos de crisis en los que decides dar un paso adelante. La verg¨¹enza es una pandemia. Impide tener coraje. Tiene que ver con el miedo a llamar la atenci¨®n.
?Incluso en una era exhibicionista?
La exhibici¨®n puede ser un disfraz. Cuando vi a mi aita correr hacia m¨ª, le grit¨¦: ¡°?Estoy bien!¡±. Trabajando mi autoconocimiento he sabido que mi miedo al sufrimiento me lleva a necesitar que todos est¨¦n bien.
?Se conoce bien?
Jugando al f¨²tbol sent¨ªa que necesitaba herramientas para rendir m¨¢s. Haciendo coaching descubr¨ª algunas, como el eneagrama, que identifica tipos de personalidad y te permite autoconocerte.
Y que muchos psic¨®logos rechazan.
No busco convencer a nadie. Las evidencias de hoy son la ciencia de ma?ana. Mi naturaleza es buscar. Criticar sin conocer es soberbia. M¨¦tete, experimenta y, si no te sirve, d¨¦jalo. S¨¦ el efecto que tiene: los deportistas se ven. Aprenden a buscar su mejor versi¨®n, la que abandona el ego, que es insaciable. Por eso somos tan yonquis de los deseos. La felicidad siempre est¨¢ m¨¢s all¨¢. Conocerte te hace ser m¨¢s compasivo contigo y con los dem¨¢s.
?No era el esfuerzo lo que nos iba a hacer mejores?
Del ¡°A Dios rogando y con el mazo dando¡± a aprender a conocerse hay una reeducaci¨®n costosa. Llevamos dentro mucho adoctrinamiento: la cultura judeocristiana est¨¢ basada en el sacrificio. Cuando un jugador me dice que ha sacrificado cosas, le respondo que uno no sacrifica, sino que toma decisiones. Si utilizas la palabra ¡°sacrificio¡±, parece que la vida est¨¢ en deuda contigo. Nuestra manera de pensar condiciona totalmente c¨®mo vivimos.
¡°Vivimos desconectados de nuestra aut¨¦ntica naturaleza¡±.
¡°Personalidad¡± viene del griego y significa ¡°m¨¢scara¡±. Me interesa lo que tienes dentro, no lo que se ve. Y dentro tenemos semillas. Nacemos con un potencial inmenso. Pero se tienen que plantar en un lugar f¨¦rtil.
?Qu¨¦ le hizo verlo?
Con 32 a?os dej¨¦ el f¨²tbol; bueno, el f¨²tbol me dej¨® a m¨ª. Como no hab¨ªa sido un gran futbolista, mont¨¦ una empresa de videojuegos. Con 40 empleados, me volv¨ª a ver como cuando jugaba al f¨²tbol: sufriendo. No porque me pasara nada, porque pensaba muy mal. Me hice una pregunta: ¡°?Y si soy yo? ?Y si no es lo que pasa, sino lo que interpreto de lo que pasa?¡±. Ah¨ª empec¨¦ a buscar.
Decide dedicarse al coaching y le empiezan otros miedos: no he sido nadie como futbolista, no tengo nada que ense?ar¡
Estos pensamientos saboteadores los tenemos todos. Nos limitan. Aparecen con cualquier desaf¨ªo. Nuestra mente vive en modo ahorro de energ¨ªa. No quiere que arriesguemos porque en cualquier momento va a aparecer el le¨®n y hay que estar preparado para correr. Aprender algo nuevo implica mostrarte vulnerable.
?Los pensamientos saboteadores var¨ªan seg¨²n las culturas?
En Estados Unidos se estigmatiza menos el error. Fracasar no es cometer errores, es dejar de intentarlo. En cambio en Espa?a, si te equivocas, dif¨ªcilmente te dan otra oportunidad, cuando son los errores los que nos permiten aprender. Con todo, la mayor¨ªa de los saboteadores son universales.
?Querer no es siempre poder?
Las personas que se obsesionan con el resultado se alejan de ¨¦l porque esa obsesi¨®n genera ansiedad. Quien se concentra en su rendimiento individual, d¨ªa a d¨ªa ¡ªentrenar bien hoy, comer bien hoy¡¡ª, se acerca al buen resultado.
?Lo mental en el deporte es tan importante como lo f¨ªsico?
Pregunto a los jugadores cu¨¢nta importancia dan a la mente y contestan que el 50%. Analizamos su d¨ªa: ¡°Desayuno lo que aconseja la nutricionista, trabajo el cuerpo en el gimnasio, entreno, aprendo t¨¢ctica con v¨ªdeos, me recupero en la piscina con el fisioterapeuta, siesta¡±. ?Cu¨¢nto tiempo le has dedicado a la parte mental? ?Has escuchado conversaciones que te inspiren? ?Pel¨ªculas, libros, podcasts que te abran la mente?
?C¨®mo aprender a pensar mejor?
Interpretando las cosas que te pasan con sabidur¨ªa: no para defenderte, para mejorar. Pensar serenamente en lugar de reaccionar como un ni?o malcriado e inmaduro. Te van a pasar cosas como a todos, el universo no va a satisfacer todos tus caprichos. Pero la vida te va a dar lo que necesitas para que aprendas. Si quieres aprender. Conectar con nuestra capacidad de cambiar es la esencia divina.
?Es religioso?
He ido desconectando de la religi¨®n institucionalizada y conectando con una espiritualidad laica. La palabra ¡°religi¨®n¡± viene del lat¨ªn religare, que significa ¡°volver a unir nuestra esencia divina con la parte humana¡±. Creo que somos chispa divina. Pero con la construcci¨®n de las religiones monote¨ªstas aparecen los intermediarios que separan esas dos partes. Me siento atra¨ªdo por la parte espiritual que nos conecta con el crecimiento. Requiere entender que todo lo que sucede es lo que tiene que suceder.
?Fatalismo?
Creer que uno es su cuerpo, sus resultados, su familia o su dinero es una forma inconsciente de vivir. Ponerle conciencia es darte cuenta de c¨®mo interpretas lo que te pasa.
Utiliza aforismos, leyendas y refranes para ense?ar.
Una explica que al reconocer el valor de nuestra esencia divina decidieron protegerla. No sab¨ªan si esconderla en lo alto de una cima o en lo profundo de una sima. Eligieron el interior de cada persona. ¡°A ning¨²n humano se le ocurrir¨¢ buscar ah¨ª¡±. Todos los sabios han dejado escrito que el control de nuestra vida es el control de nuestros pensamientos. Soy un apasionado de la filosof¨ªa estoica. Y siempre me pregunto qu¨¦ me dir¨ªa Marco Aurelio. ?l tuvo 13 hijos, de los que 9 murieron. Se pas¨® la vida en la guerra. Una pandemia asol¨® su imperio. Y aun as¨ª dej¨® el libro Meditaciones, que nos ayuda a vivir mejor.
¡°La calidad de tu vida depende de la calidad de tu pensamiento¡±, dec¨ªa Marco Aurelio.
Sus aforismos hay que llevarlos en el bolsillo. Cuanto m¨¢s infantil, ignorante y reactivo seas, m¨¢s sufrir¨¢s. El trabajo empieza cuando te preguntas c¨®mo estoy interpretando esta situaci¨®n, cu¨¢l est¨¢ siendo mi comportamiento. Y te haces cargo de que no es el entrenador, ni las cr¨ªticas, lo que te genera el sufrimiento, es tu interpretaci¨®n de lo que pasa. Ah¨ª empieza el espect¨¢culo.
El momento eureka.
El de la transformaci¨®n en alguien fuerte de verdad que tiene recursos para afrontar lo que venga.
?Fuerte o prepotente?
Cuestionarse c¨®mo se piensa y qu¨¦ creencias limitan a uno es el mejor regalo que nos podemos hacer. Confrontas las creencias de segunda mano, que no has elegido y est¨¢n contigo porque las llevas de serie, en tu manera de ser o de tu familia.
?El dolor es la escuela de vida?
Lo que te obliga a cambiar te hace ver. No nos da?a lo que sucede, sino lo que interpretamos de lo que sucede. Esto lo escribi¨® S¨¦neca.
?Somos lo que somos cuando lo perdemos todo?
Hay momentos en que la vida conspira para ayudarnos a hacer ese proceso de reconexi¨®n. Nos desaf¨ªa quit¨¢ndonos cosas o personas que consideramos la causa de nuestra felicidad. Sentimos apego hacia lo externo y la vida nos dice que busquemos dentro. No lo hace para putearnos. Habr¨ªa que afrontar la adversidad como una oportunidad.
?C¨®mo explic¨¢rselo a quien acaba de perder un hijo?
Jam¨¢s se lo dir¨ªa. Las tempestades requieren tiempo, pero, si las gestionas abriendo otras puertas, cuando se conviertan en una brisa ser¨¢s capaz de valorar la experiencia: no por lo que pas¨®, por la persona en la que te has convertido.
?No hay transformaci¨®n sin dolor?
Somos adictos al sufrimiento, preferimos sufrir que cambiar. Esperamos que cambie lo de fuera ¡ªmi mujer, el entrenador, mi jefe¡ª para estar bien en lugar de cambiar nuestra interpretaci¨®n de lo que ocurre, que es lo que podemos hacer. Somos bastante cocreadores de lo que nos pasa. La vida es un juego de proyecciones y espejos. No vemos el mundo como es, lo vemos como nosotros somos.
Reconoce su naturaleza ansiosa, impulsiva, impaciente. Eso no favorece la habilidad de escuchar. ?Qu¨¦ le hizo pensar que sabr¨ªa hacerlo?
Un jeque celebr¨® un fiest¨®n y llen¨® una piscina de cocodrilos. Dijo: ¡°Al que cruce la piscina le regalo mi Ferrari¡±. Vio a un tipo nadando como un rayo. Sali¨® y el jeque le pregunt¨®: ¡°?C¨®mo has podido ser tan valiente?¡±. El hombre dijo que le hab¨ªan empujado. A m¨ª me han empujado. Me aplico la diferencia entre tenaz y terco. He sido terco. He perseguido cosas sin avanzar y sufriendo. El tenaz lo intenta m¨ªnimo tres veces. Pero no m¨¢s de siete.
?Qu¨¦ hacer ante una crisis?
Hay tres respuestas. La medicaci¨®n, que aumenta un 15% anual en los pa¨ªses desarrollados y demuestra que preferimos poner parches a excavar el camino de salida. Otra es el suicidio, incrementando espectacularmente. La tercera es la transformaci¨®n. Llega cuando no te aguantas m¨¢s y el sufrimiento te hace preguntarte: ¡°A ver si soy yo¡±. Entonces hay que vivir la noche oscura del alma, como dec¨ªa San Juan de la Cruz, un proceso de transformaci¨®n donde aparece una nueva y mejor versi¨®n de ti.
Habla de Marco Aurelio en el c¨ªrculo de machotes que es un vestuario.
Ah¨ª est¨¢ el arte. Tener capacidad de conectar es saber lo que toca en cada momento. Tambi¨¦n hasta d¨®nde puedes llegar.
?El miedo de un futbolista es perder?
Tienen muchos¡
En el f¨²tbol hay pavor a declarar la homosexualidad.
Que en el f¨²tbol las personas no puedan atreverse a mostrarse como son me da mucha verg¨¹enza. Las mujeres nos est¨¢n dando ejemplo. Es una pena que alguien tenga que ser valiente para poder vivir su orientaci¨®n sexual con normalidad.
?Ha intentado hablarlo?
No. Y ser¨ªa un tema que abrir¨ªa la mente y mejorar¨ªa la confianza entre ellos. Pero tambi¨¦n es verdad que no son un grupo de machotes, como dice. Cuando hablan p¨²blicamente se protegen. Cada vez que tocan la pelota, millones de personas opinan sobre ellos. La cr¨ªtica permanente hace que respondan con lugares comunes. Intentamos que puedan ser comprensivos y compasivos con sus compa?eros y consigo mismos.
?C¨®mo no endiosarse ayudando a los dem¨¢s?
¡°Entusiasmo¡± viene de la palabra griega enthousiasm¨®s, que significa ¡°que lleva un dios dentro¡±. Y en mi eneatipo, 7 transmisor, la gran virtud es el entusiasmo. Es decir, yo vivo como si llevara un dios dentro. Lo que le pedir¨ªa a todo el mundo es que se endiosara un poquito m¨¢s. ?C¨®mo ser¨ªa si la gente se atreviera a vivir entusiasmada?
El mundo de los negocios se ha apoderado del concepto liderar.
Estoy de acuerdo. Pero liderar es ayudar a alguien a ser mejor de lo que est¨¢ siendo. Todos hemos ayudado alguna vez. En Latinoam¨¦rica existe el patr¨®n, que quiere obediencia. El l¨ªder, en cambio, genera compromiso. El compromiso no se reclama ni se exige. Es un regalo que la gente te hace cuando eres digno de su confianza.
?Qu¨¦ es el ¨¦xito?
En el deporte es ganar. Pero, si lo buscamos desesperadamente, perdemos cosas. Para m¨ª el ¨¦xito es transformarse en la persona, o el equipo, que merece ganar.
?Qu¨¦ le dio credibilidad para que la selecci¨®n mexicana, la Real Sociedad o el Comit¨¦ Ol¨ªmpico confiaran en usted?
Me form¨¦ como coach con los que consider¨¦ los mejores y las mejores escuelas, pero no soy un coach ortodoxo. Hablo m¨¢s que escucho. Profundizo en el autoconocimiento trabajando con muchas herramientas como la morfopsicolog¨ªa, que es la cara, nuestro mapa del tesoro.
?Y la gente que se opera la cara?
Los que se ponen una nariz m¨¢s peque?a modifican su car¨¢cter. Dentro de unos a?os veremos si la morfopsicolog¨ªa tiene o no mucho de ciencia. La psicolog¨ªa cognitiva-conductual, que es la que m¨¢s reconocimiento cient¨ªfico tiene, es 100% filosof¨ªa estoica. Hace 2.000 a?os no hab¨ªa ni psic¨®logos ni psiquiatras ni pastillas. Hab¨ªa filosof¨ªa y daba recursos para pensar bien, interpretar con sabidur¨ªa y mantener la serenidad en busca de una vida feliz y con sentido.
?Siempre acierta?
Nick Faldo dec¨ªa que solo los buenos quieren mejorar. Por eso son buenos. Yo creo que todos somos buenos, pero no todos a la vez. Hay que respetar el momento en que cada uno puede llegar a conectar consigo mismo.
?Ese conocimiento le ha servido para educar a sus hijas?
Lo que he entendido con ellas es que no las puedo hacer responsables de mi felicidad. No les puedo hacer ese chantaje emocional. Les dije: ¡°Quiero que os vaya muy bien¡±. Ellas dec¨ªan: ¡°Claro, nos quieres¡±. Pero no es as¨ª. No quiero que sufran porque, si sufren ellas, sufro yo. Lo que buscamos es nuestra felicidad. Somos as¨ª de ego¨ªstas.
?Qui¨¦n se dice que quiere ser?
Una estrella fugaz que alumbra prop¨®sitos. Mi trabajo es hacer despegar un cohete, pero cuando est¨¢ en ¨®rbita no me llames para arreglar un tornillo. Ya estar¨¦ en otra cosa.