La Fiscal¨ªa sostiene que su recurso contra el tercer grado de los presos del ¡®proc¨¦s¡¯ suspende la aplicaci¨®n de la semilibertad
Los tribunales discrepan sobre si la impugnaci¨®n del ministerio p¨²blico al cambio de grado frena la medida
La propuesta acordada este jueves por las juntas de tratamiento de las c¨¢rceles en las que cumplen condena los presos del proc¨¦s tiene que ser ratificada por el Servicio de Clasificaci¨®n de la Generalitat. Ser¨¢ entonces cuando la concesi¨®n del ...
La propuesta acordada este jueves por las juntas de tratamiento de las c¨¢rceles en las que cumplen condena los presos del proc¨¦s tiene que ser ratificada por el Servicio de Clasificaci¨®n de la Generalitat. Ser¨¢ entonces cuando la concesi¨®n del tercer grado ser¨¢ oficial, pero se abrir¨¢ previsiblemente otro debate: si los l¨ªderes independentistas empiezan a disfrutar de forma inmediata de su semilibertad o si, por el contrario, un recurso de la Fiscal¨ªa suspende la ejecuci¨®n hasta que se pronuncie el juez de Vigilancia Penitenciaria y, en ¨²ltima instancia, el Supremo.
Fuentes de la Fiscal¨ªa aseguran que, si la Generalitat ratifica el tercer grado, el ministerio p¨²blico recurrir¨¢. Estas fuentes consideran que la semilibertad de los l¨ªderes secesionistas es ¡°un fraude¡±, por lo que la Fiscal¨ªa intentar¨¢ frenarla. Primero, ante el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria, y si esta no la revoca, ante el Tribunal Supremo, que tiene la ¨²ltima palabra por ser el que juzg¨® y sentenci¨® a Oriol Junqueras y sus compa?eros.
La Fiscal¨ªa sostiene, adem¨¢s, que los presos tienen que seguir en segundo grado hasta que se agote el recorrido judicial, mientras que las defensas sostienen lo contrario. La clave est¨¢ en la interpretaci¨®n que se d¨¦ al apartado cinco de la disposici¨®n adicional quinta de la Ley Org¨¢nica del Poder Judicial (LOPJ), que establece que cuando el fiscal recurra en apelaci¨®n el cambio de grado de un penado ese recurso tendr¨¢ ¡°efecto suspensivo que impedir¨¢ la puesta en libertad del condenado¡± si se dan dos requisitos: que la decisi¨®n que se recurre implique la ¡°excarcelaci¨®n¡± del interno y que se trate de delitos graves.
Se considera delito grave a partir de condenas de cinco a?os de c¨¢rcel, por lo que este requisito se cumple en los nueve presos. Pero hay discrepancias jur¨ªdicas sobre si el tercer grado es ¡°excarcelaci¨®n¡±. ¡°Algunas Audiencias provinciales interpretan que cualquier tercer grado es excarcelaci¨®n por lo que el recurso del fiscal siempre suspende la ejecuci¨®n, pero otras sostienen que solo se da este requisito cuando aplica el art¨ªculo 86.4 del Reglamento Penitenciario, que permite mandar al preso en casa con un dispositivo de control telem¨¢tico, o cuando el tercer grado se va a cumplir en un centro extrapenitenciario¡±, afirma Carlos Garc¨ªa Casta?o, abogado experto en derecho penitenciario.
Otro aspecto que se presta a interpretaci¨®n es si, d¨¢ndose estos dos requisitos, el recurso del fiscal a la resoluci¨®n de la Generalitat de conceder el tercer grado genera suspensi¨®n, ya que el literal de la ley solo contempla esta medida para los recursos de apelaci¨®n a decisiones judiciales. ¡°Literalmente dice eso, pero no tiene mucho sentido que si se va a recurrir y el recurso suspende el tercer grado se les aplique antes. Lo habitual es que se suspenda, pero hay margen para la interpretaci¨®n¡±, afirma el abogado. En estas posibilidades de interpretaci¨®n entrar¨ªan que los presos no obtuvieran la semilibertad hasta que el Supremo decida (opci¨®n m¨¢s improbable porque depende del Govern); que la obtengan de forma inmediata cuando la Generalitat la ratifique, pero se revoque cuando el ministerio p¨²blico recurra ante el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria; o que incluso tras ese recurso sigan en tercer grado y este solo se suspenda con el recurso en apelaci¨®n ante el Supremo.