Una pol¨ªtica ondulante y a contracorriente
Cada vez que ?lvarez de Toledo hablaba en una entrevista de la necesidad perentoria de un Gobierno de concentraci¨®n, al PP de Casado y Garc¨ªa Egea le sal¨ªa un sarpullido
Cada vez que Cayetana ?lvarez de Toledo hablaba en una entrevista de la necesidad perentoria de un Gobierno de concentraci¨®n en Espa?a, al PP de Pablo Casado y Teodoro Garc¨ªa Egea les sal¨ªa un sarpullido. Y no se quitaba f¨¢cil. Era lo que peor les sentaba de todos los versos libres que soltaba un personaje especial, peculiar, al que Casado acudi¨® personalmente a fichar hace algo m¨¢s de un a?o para dotar a su portavoc¨ªa en el Congreso de un nivel diferente, que quer¨ªa superior al del lodazal iletrado en que en muchas ocasiones se ha transformado la pol¨ªtica. ?lvarez de Toledo ¡ªy algunos miembro...
Cada vez que Cayetana ?lvarez de Toledo hablaba en una entrevista de la necesidad perentoria de un Gobierno de concentraci¨®n en Espa?a, al PP de Pablo Casado y Teodoro Garc¨ªa Egea les sal¨ªa un sarpullido. Y no se quitaba f¨¢cil. Era lo que peor les sentaba de todos los versos libres que soltaba un personaje especial, peculiar, al que Casado acudi¨® personalmente a fichar hace algo m¨¢s de un a?o para dotar a su portavoc¨ªa en el Congreso de un nivel diferente, que quer¨ªa superior al del lodazal iletrado en que en muchas ocasiones se ha transformado la pol¨ªtica. ?lvarez de Toledo ¡ªy algunos miembros de su particular equipo, a los que Casado se empe?¨® tambi¨¦n en rescatar personalmente, como el ahora pol¨¦mico y relevado jefe de la asesor¨ªa jur¨ªdica de las Cortes, Gabriel Elorriaga¡ª se sent¨ªa como ¡°un salm¨®n a contracorriente¡±, en el PP y en las Cortes. Una mujer independiente y sagaz contra el feminismo; un l¨¢tigo contra Carmen Calvo y Pablo Iglesias, partidaria de gobernar con el PSOE m¨¢s cl¨¢sico. Una excolaboradora de Aznar que ten¨ªa que lidiar con las invasiones de competencias de Garc¨ªa Egea.
La mayor¨ªa de los dirigentes populares reciben cada ma?ana un argumentario desde la sede central de G¨¦nova 13 con una ristra de mensajes a los que apenas les tocan las comas. A veces ni cambian la entonaci¨®n. Una entrevista en cualquier medio les provoca pavor; en EL PA?S entre susto y horror. A ?lvarez de Toledo le parec¨ªan una oportunidad y un reto intelectual, ahora un aut¨¦ntico anatema. Cuando termin¨® de grabar la charla publicada el pasado domingo, con varios desmarques contundentes sobre las tesis oficiales, pidi¨® una revisi¨®n del texto, pero solo para cuidar la redacci¨®n. Agreg¨® una ¡°reflexi¨®n bonita¡± sobre la conveniencia, luego despreciada por Casado, de dar la batalla cultural a la izquierda desde la raz¨®n y hasta se permiti¨® una correcci¨®n de sintaxis, eso s¨ª, en una de las preguntas. Era as¨ª de sobrada antes, ya en la etapa frustrada en la que colabor¨® con Rajoy; ha sido as¨ª siempre con Casado, sin enga?ar sobre sus cualidades y defectos, sin contemplaciones amistosas ni ambiciones respecto a las peligrosas cuotas de poder internas. Un miembro de la ejecutiva actual de Casado lo resum¨ªa este martes de otra manera: ¡°Con el jefe hay que empatizar siempre, no desautorizarle¡±.
La disputa recurrente durante este periodo entre el secretario general, Teodoro Garc¨ªa Egea, y ?lvarez de Toledo no ha sido por una prevalencia ideol¨®gica, tampoco una reedici¨®n de la t¨®pica contienda entre duros y blandos, moderados y agresivos, en las formas de ejecutar la oposici¨®n. No se conoce en ese sentido una aportaci¨®n relevante en el pensamiento del secretario general. No es su funci¨®n. Su tarea es tener al PP a punto, controlar y coordinar las organizaciones territoriales y los grupos, engrasar los equipos, y hacer de parapeto ante los problemas para que no lleguen al jefe. Un buen n¨²mero de barones territoriales y dirigentes relevantes del PP cuestionan esas tareas y los resultados de Garc¨ªa Egea, pero lo hacen en privado, desde el anonimato.
?lvarez de Toledo no tiene reparos en evidenciar sus diferencias en p¨²blico, se enfrent¨® al secretario general a finales de julio en un encuentro entre ambos para resolver sus diferencias y se las cant¨® luego a la cara a Casado, sin remilgos ni eufemismos. Estaba dispuesta a fajarse contra Rajoy, Casado, Egea, Feij¨®o, Moreno o Alonso por imponer su manera de entender la acci¨®n pol¨ªtica de la oposici¨®n, no por acumular cargos ni situar a sus huestes en las mejores posiciones de poder. En el Grupo Popular en el Congreso presum¨ªa de dejar intervenir a los portavoces sectoriales por su preparaci¨®n o nivel, ajena a si proced¨ªan del marianismo, sorayismo o casadismo. Sus cr¨ªticos le achacan, sin embargo, su sectarismo en favor de las tesis m¨¢s aznaristas y atlantistas de la FAES, su falta de flexibilidad para negociar nada con el PSOE, con sus socios de Podemos y con los nacionalistas, y sus problemas para asumir las directrices del mando. Ella lo que no acepta es su cercan¨ªa a Vox, s¨ª a Ciudadanos.
Casado, que fue portavoz del PP de Rajoy en la peor ¨¦poca de sus casos de corrupci¨®n y el que deb¨ªa partirse la cara por ¨¦l en los plat¨®s de televisi¨®n, ahora ya no soporta tan bien a los divergentes. Le achac¨® el lunes a ?lvarez de Toledo que cuestionase en EL PA?S su autoridad. La etiquet¨® como una indisciplinada cualquiera. ?lvarez de Toledo defiende que las opiniones discrepantes deber¨ªan ser posibles dentro de los partidos como algo necesario, obligado y natural, aunque luego sea corrosiva con los portavoces de otras formaciones que le lleven la contraria.
En su curr¨ªculo de Twitter se ha fijado un lema que es vital, literario y filos¨®fico: ¡°La vida es ondulante¡±. La frase proviene de una cita de Michel de Montaigne, a trav¨¦s de la interpretaci¨®n de Josep Pla, que pretende alertar del error de generalizar sobre la vida, los hombres y la realidad: ¡°El hombre es sin duda un tema maravillosamente in¨²til, diverso y ondulante. Resulta complicado fundamentar juicio constante y uniforme en ¨¦l¡±.