Guerra fr¨ªa en la derecha tras la moci¨®n
Vox dispara la hostilidad con el PP mientras Cs se distancia de los populares al percibir juego sucio
Un mes despu¨¦s de la batalla de la moci¨®n de censura, un nuevo escenario se ha abierto paso en el bloque de la derecha: una guerra fr¨ªa de efectos impredecibles. Tras la convulsi¨®n por la ruptura del PP con Vox y el giro centrista de Pablo Casado, los tres actores a la derecha del PSOE ¡ªPP, Vox y Ciudadan...
Un mes despu¨¦s de la batalla de la moci¨®n de censura, un nuevo escenario se ha abierto paso en el bloque de la derecha: una guerra fr¨ªa de efectos impredecibles. Tras la convulsi¨®n por la ruptura del PP con Vox y el giro centrista de Pablo Casado, los tres actores a la derecha del PSOE ¡ªPP, Vox y Ciudadanos¡ª libran una pugna algo m¨¢s soterrada, pero cargada de tensi¨®n y hostilidad. El golpe en la mesa de Casado ha enfurecido a Vox y ha tensionado a Ciudadanos, obligado a reaccionar para defender su espacio en el centro. Las consecuencias son ataques cruzados y juego sucio en una contienda que no est¨¢ ni mucho menos resuelta: los expertos en demoscopia siguen detectando una alt¨ªsima volatilidad e indecisi¨®n en el electorado conservador, confuso por la pelea entre sus l¨ªderes.
El PP ha recibido esta semana un misil de Vox en forma de bronca en el Parlamento que eclips¨® su iniciativa parlamentaria destinada a erosionar al Gobierno. Los populares presentaban una reforma legislativa para evitar el estado de alarma, pero el enfrentamiento desluci¨® su propuesta, y solo se habl¨® de que la derecha se divid¨ªa, peleada.
¡°Se retrat¨® ¨¦l solo: a falta de argumentos, profiri¨® insultos¡±, se quejan en el PP del diputado de Vox Jose Mar¨ªa S¨¢nchez, que lanz¨® duras invectivas a la portavoz parlamentaria, Cuca Gamarra, a la que dijo que ten¨ªa que ¡°volver a la facultad¡± y hab¨ªa presentado ¡°un conjunto de tonter¨ªas¡±. La bancada del PP herv¨ªa cuando ella le contest¨® entre aplausos que era un ¡°machista¡±.
El caso es un ejemplo de que la tensi¨®n se ha disparado entre el partido de Abascal y el de Casado. ¡°La creciente hostilidad quiz¨¢ tiene que ver con la decreciente presencia de Vox en los medios de comunicaci¨®n¡±, analiza un miembro del comit¨¦ de direcci¨®n del PP. ¡°La moci¨®n ha mermado su capacidad de influencia medi¨¢tica. Y se ha visto lo f¨²til que era una iniciativa que al final reforz¨® al Gobierno¡±, apostilla. La estrategia del PP es no entrar en las provocaciones de Vox, pero s¨ª seguir marcando sus diferencias. ¡°Hemos estado muchos a?os sin contestar a los ataques de Vox, pero no perdemos de vista a qui¨¦n tenemos que hacer oposici¨®n, que es a S¨¢nchez¡±, apunta otro dirigente popular.
No solo es Vox, tambi¨¦n Cs se distancia de sus socios de Gobiernos auton¨®micos. Con formas respetuosas, el portavoz de Cs Edmundo Bal dijo que al Tribunal Constitucional ¡°no le durar¨ªa ni cinco segundos¡± la propuesta del PP de un plan b jur¨ªdico para evitar el estado de alarma, del que el partido de Arrimadas discrepa porque cree que solo este instrumento constitucional permite restringir derechos fundamentales. En Cs reconocen que el ¡°juego sucio¡± de los populares ¡ªcon los fichajes de Albert Rivera y su mano derecha, Jos¨¦ Manuel Villegas, que colaborar¨¢n profesionalmente con el PP¡ª les da m¨¢s libertad para marcar distancias ¡°sin tantos miramientos¡±. Arrimadas desconf¨ªa del giro de Casado. ¡°Es una operaci¨®n de marketing¡±, dicen en su entorno. En el partido ironizan parafraseando al socialista Alfonso Guerra sobre los reiterados giros centristas del PP: ¡°?De d¨®nde vendr¨¢ el PP, que lleva tantos a?os viajando al centro?¡±.
Arrimadas conf¨ªa en que se visualice que Cs es el verdadero centro liberal y el PP el partido conservador, cuando lleguen los debates sobre temas morales como la eutanasia o el aborto, en los que Cs es favorable al avance en derechos civiles. En el partido se?alan adem¨¢s que el PP de momento solo ha hecho un giro ¡°ret¨®rico¡± porque no ha cambiado su actitud ante los acuerdos con el Gobierno: esta semana los populares han vuelto a descartar el pacto para renovar el Consejo del Poder Judicial por el posible apoyo de Bildu a los Presupuestos. ¡°El PP puede estar promocionando un espacio central del que luego lo mismo no se beneficia¡±, apunta un colaborador de Arrimadas, que reconoce, no obstante, que si Casado va en serio y da pasos s¨ª que puede hacer ¡°sufrir¡± a Cs.
La ventaja del PP ante la hostilidad de Vox es que Abascal no tiene margen para boicotear los Gobiernos auton¨®micos, como evidencia que esta semana ha aprobado los Presupuestos andaluces. Arrimadas, por su parte, parece haber perdido su apuesta por un pacto con el Gobierno para las cuentas p¨²blicas. Casado sale m¨¢s fuerte de la moci¨®n, pero los expertos advierten de que la derecha sigue siendo ¡°ac¨¦fala¡±, como la describe el investigador de Metroscopia Jos¨¦ Pablo Ferr¨¢ndiz, porque ¡°ninguno de los tres l¨ªderes es aprobado por el conjunto del electorado conservador¡±. Metroscopia detecta un ligero trasvase de Vox al PP, pero al mismo tiempo que Abascal ¡°tiene un suelo s¨®lido y no est¨¢ por debajo de su resultado del 10 de noviembre¡±. El director de Gad3, Narciso Michavila, observa ¡°mucha indecisi¨®n¡±. ¡°No veremos el impacto de la moci¨®n hasta los resultados de las elecciones catalanas¡±, analiza.
El pen¨²ltimo cap¨ªtulo de esa guerra fr¨ªa se librar¨¢ en Catalu?a, donde el reciente bar¨®metro del Centro de Estudios de la Generalitat apunta a una fuerte irrupci¨®n de Vox en empate con el PP, mientras Cs cae a menos de la mitad de sus esca?os. En este clima de vientos g¨¦lidos, Casado y Arrimadas a¨²n tienen que decidir cu¨¢l ser¨¢ la f¨®rmula con la que concurrir¨¢n a las urnas.