Bildu asume sin contestaci¨®n su giro de 180 grados
La coalici¨®n asume que tiene que tragar la financiaci¨®n de la Casa del Rey o de la Guardia Civil para convertirse en un actor influyente
Ni pintadas, ni bronca ni contestaci¨®n interna. La izquierda abertzale est¨¢ encajando en Euskadi sin demasiadas estridencias el nuevo papel que sus diputados est¨¢n jugando en Madrid. Su posici¨®n favorable a aprobar las cuentas del Estado que, adem¨¢s de las partidas que han propuesto para evitar desahucios o incentivar a varios sect...
Ni pintadas, ni bronca ni contestaci¨®n interna. La izquierda abertzale est¨¢ encajando en Euskadi sin demasiadas estridencias el nuevo papel que sus diputados est¨¢n jugando en Madrid. Su posici¨®n favorable a aprobar las cuentas del Estado que, adem¨¢s de las partidas que han propuesto para evitar desahucios o incentivar a varios sectores econ¨®micos, tambi¨¦n servir¨¢ para financiar la Casa del Rey, la permanencia de la Guardia Civil en Euskadi, o para continuar las obras del demonizado tren de alta velocidad, no est¨¢ generando una oleada de contradicciones en el seno de la coalici¨®n. Un giro de 180 grados en pragmatismo, no as¨ª en torno a los m¨ªnimos ¨¦ticos que exige el resto de partidos, que los herederos de Herri Batasuna han dado desde que Sortu fuera legalizada en 2012 y se integrara en Bildu.
¡°De haber, habr¨¢ cr¨ªticas y debate cuando se someta a la militancia el s¨ª a los Presupuestos del Estado, como hubo cuando se consult¨® los de Navarra, pero en EH Bildu sabemos que la partida es otra¡±, aseguran fuentes oficiales del partido. La Mesa Pol¨ªtica de la formaci¨®n se reunir¨¢ de forma ordinaria este lunes en su sede de Donostia para elaborar la propuesta a sus bases en torno a las cuentas del Estado. Sin embargo, de momento, frente a las cr¨ªticas internas y externas que ha provocado el acuerdo con Bildu en el PSOE, y entre el PSOE y Podemos, los seguidores de Otegi han acabado por aceptar que para ganar hay que ser influyentes, tambi¨¦n en Madrid y eso supone dejarse pelos en la gatera.
Pero eso no quiere decir que sus bases no necesiten una partitura interna para digerirlos. La secuencia de mensajes tras el anuncio del coordinador general de EH Bildu de apoyarlos, es elocuente. Otegi anunci¨® el pasado 11 de noviembre que Bildu votar¨ªa s¨ª a los Presupuestos Generales del Estado. Tan solo 24 horas despu¨¦s, el secretario general de Sortu, la primera fuerza de la coalici¨®n, Arkaitz Rodr¨ªguez, declar¨® en un rifirrafe con una parlamentaria del PNV en el Parlamento vasco: ¡°Nosotros vamos a Madrid a tumbar ese r¨¦gimen¡±.
En un mensaje en clave interna, Rodr¨ªguez dej¨® claro para su parroquia el terreno de juego y, de paso, marc¨® distancias con el partido de Andoni Ortuzar: ¡°Vosotras hab¨¦is ido y vais a Madrid a mendigar TAV (Tren de Alta Velocidad) y vacaciones fiscales. Nosotros vamos a Madrid a arrancar derechos sociales y laborales. Vosotros hab¨¦is ido a Madrid durante d¨¦cadas a sostener el r¨¦gimen en beneficio de unos poquitos de los vuestros, nosotros vamos a Madrid a tumbar definitivamente ese r¨¦gimen en beneficio de las mayor¨ªas y de los pueblos¡±.
Sortu ya se deshizo de su disidencia. La decisi¨®n de incorporarse en 2012 a la coalici¨®n EH Bildu con Eusko Alkartasuna, Alternatiba y al principio, tambi¨¦n Aralar, -que despu¨¦s de disolvi¨®- hizo que en torno a un 15% o 20% de la militancia se agrupara en torno a ATA -siglas de amnist¨ªa y libertad en euskera- al no aceptar la voluntad mayoritaria de usar exclusivamente las v¨ªas pol¨ªticas y tampoco la de diluir en la coalici¨®n parte de su pasado, incluidas las reclamaciones tradicionales de amnist¨ªa para el colectivo de presos.
Y desde entonces ha iniciado una carrera en la que ha avanzado m¨¢s en pragmatismo que en romper con su pasado. Sigue sin sumarse al suelo ¨¦tico exigible a todos los partidos que el Parlamento vasco ratific¨® con los votos del PNV, PSE y PP en 2013 y que se basaba en reconocer ¡°la injusticia de la violencia¡±, del da?o causado y la dignidad de las v¨ªctimas. Aunque ha dado pasos en esa direcci¨®n, el reconocimiento de que matar estuvo mal, es todav¨ªa uno de sus d¨¦ficits. EH Bildu ha criticado incluso con dureza los ataques a la casa de la secretaria general del PSE, Idoia Mendia o el m¨¢s reciente a la tienda de la madre del l¨ªder de Vox Santiago Abascal en Amurrio (?lava), pero en ese proceso todav¨ªa sigue sin condenar la violencia y no alza la voz contra los homenajes en la v¨ªa p¨²blica a los presos de ETA que abandonan la c¨¢rcel.
La voluntad de ser un actor pol¨ªtico en los parlamentos en los que est¨¢n es una decisi¨®n org¨¢nica inapelable. La aprobaci¨®n de los Presupuestos, si finalmente se produce, ser¨¢ el final de un proceso que en el caso del Congreso de los Diputados comenz¨® con la moci¨®n de censura a Rajoy, continu¨® con el apoyo a los denominados viernes sociales en los que el Consejo de Ministros aprobaba decretos de marcado car¨¢cter social, y se ha extendido tambi¨¦n a Navarra con la aprobaci¨®n de sus propios presupuestos. Una acci¨®n pol¨ªtica que a punto estuvo hace dos a?os de fraguar en un apoyo a los Presupuestos del PNV y del PSE en Euskadi, pero al final se frustr¨®.
En ese proceso de b¨²squeda de mayor¨ªas para lograr sus objetivos se enmarca la alianza estrat¨¦gica firmada con Esquerra Republicana de Catalu?a, que le otorga adem¨¢s un componente simb¨®lico de alianza entre dos comunidades con lazos hist¨®ricos. En la conferencia pol¨ªtica del pasado 19 de septiembre, el propio Arkaitz Rodr¨ªguez explic¨® a sus fieles que ¡°la soberan¨ªa est¨¢ ligada a la democracia, a la justicia, a la libertad y al bienestar¡±. Han asumido sin estridencias que es compatible el discurso de la construcci¨®n social y del logro de beneficios sociales para quienes sufren las consecuencias de la crisis, con el de ¡°tumbar el r¨¦gimen¡±. Ahora hace falta que lo entienda el electorado.