El Gobierno recomienda a los familiares de Diego Bello buscar abogados en Filipinas
El joven coru?¨¦s fue asesinado el pasado enero por la polic¨ªa de Siargao, quien le acus¨® de traficar con drogas
No hay fin al caso de Diego Bello el joven espa?ol asesinado el 8 de enero por la polic¨ªa de Siargao (Filipinas), delante de la puerta de su casa, donde viv¨ªa con su novia, Jinnah. A trav¨¦s de una respuesta parlamentaria a la diputada de Ciudadanos Marta Mart¨ªn Llaguno, el Gobierno reitera a la familia del joven ¡°la necesidad de que esta contrate un abogado en Filipinas para que lleve el caso¡±. En su respuesta, del pasado 20 de noviembre, el Ejecutivo, a trav¨¦s del Ministerio de Asuntos Exterio...
No hay fin al caso de Diego Bello el joven espa?ol asesinado el 8 de enero por la polic¨ªa de Siargao (Filipinas), delante de la puerta de su casa, donde viv¨ªa con su novia, Jinnah. A trav¨¦s de una respuesta parlamentaria a la diputada de Ciudadanos Marta Mart¨ªn Llaguno, el Gobierno reitera a la familia del joven ¡°la necesidad de que esta contrate un abogado en Filipinas para que lleve el caso¡±. En su respuesta, del pasado 20 de noviembre, el Ejecutivo, a trav¨¦s del Ministerio de Asuntos Exteriores, asegura haber mantenido intensos contactos con la Fundaci¨®n Abogac¨ªa Espa?ola y haber recomendado a la familia Bello varios abogados filipinos y ONG especializadas en materia de Derechos Humanos para asesorar e impulsar un proceso penal.
La diputada pregunt¨® al Gobierno sobre las gestiones que ha realizado con el Ejecutivo filipino para esclarecer las causas reales del asesinato de Bello y qu¨¦ acciones lleva a cabo para que la lucha contra las drogas en el pa¨ªs asi¨¢tico no ponga en peligro los derechos humanos. En su respuesta, el Ejecutivo afirma que tanto el Consulado como la Embajada en Manila han mantenido contactos estrechos con la Comisi¨®n de Derechos Humanos (CHR) de Filipinas y que la Embajada espa?ola ha solicitado de manera reiterada nuevas revisiones a la investigaci¨®n del caso, seg¨²n relata la misiva. ¡°Espa?a es socio de cooperaci¨®n de Filipinas, y de manera muy especial en el proceso de reforma de la justicia y de mejora del acceso a esta en ese pa¨ªs¡±, se lee en la respuesta.
Marta Mart¨ªn, portavoz de Asuntos Exteriores de Ciudadanos en el Congreso, considera que la respuesta del Gobierno ha sido tard¨ªa. La diputada ha afirmado a EL PA?S, que el Ejecutivo tiene que combinar las acciones diplom¨¢ticas pero, al mismo tiempo, posicionarse a favor de la investigaci¨®n para el esclarecer los hechos. En este sentido, la comisi¨®n de Asuntos Exteriores del Congreso ha aprobado este lunes por unanimidad instar al Gobierno de Filipinas a promover una investigaci¨®n imparcial. Una medida, esta, que Mart¨ªn considera ¡°fundamental¡± para determinar la identidad de los responsables del crimen.
El caso de Diego Bello es una herida abierta. El coru?¨¦s, de 32 a?os, se mud¨® de su ciudad, A Coru?a, a la isla de Siargao, en Filipinas, a finales de 2017, tras viajar por todo el mundo. En la provincia General Luna abri¨® el White House Hostel, un alojamiento para surfistas. En este lugar tan lejano de su casa, Bello logr¨® el sue?o de su vida: abrir una tienda de surf, su gran pasi¨®n, y un restaurante con discoteca y local de tatuajes con dos socios espa?oles. Tambi¨¦n ten¨ªa previsto inaugurar un spa. Sin embargo, la madrugada del 8 de enero, unos disparos acabaron con su vida, mientras volv¨ªa a casa despu¨¦s de una noche de trabajo.
El informe policial recogido por la CHR, explica que la actuaci¨®n que llev¨® al asesinato del espa?ol formaba parte de una operaci¨®n antidrogas enmarcada en una guerra contra el narcotr¨¢fico anunciada por el presidente Rodrigo Duterte nada m¨¢s llegar al poder en junio de 2016. Una lucha que ya puso en alerta a la comunidad internacional por permitir ejecuciones sumarias por parte de las fuerzas de seguridad, y que preocupa a nivel nacional. Seg¨²n una encuesta recogida en 2019 por Europa Press, el 78% de los filipinos teme morir en la lucha contra la droga.
Durante las investigaciones sobre el crimen, los altos cargos de Siargao y de la regi¨®n General Luna consideraban a Bello como ¡°el traficante n¨²mero uno¡± de la regi¨®n. No obstante, tanto sus socios como su entorno familiar descartaron la idea de que el joven estuviera implicado en la venta de coca¨ªna, tal y como confirm¨® el informe toxicol¨®gico realizado al cuerpo del espa?ol a su llegada a Madrid. Adem¨¢s, Bello no figuraba en el Archivo Antidroga del Distrito ni era sospechoso. Los agentes filipinos tambi¨¦n afirmaron que actuaron en defensa propia. Sin embargo, la misma CHR pone en duda la versi¨®n del cuerpo policial.
Ante lo que parece ser un caso por abuso policial, m¨¢s de once meses despu¨¦s la muerte de Diego Bello queda sin responsables, mientras su familia sigue pidiendo justicia. ¡°No vamos a parar. No tenemos nada mejor que hacer en la vida que hacer justicia con Diego¡±, dijo Bruno Bello, poco despu¨¦s de la muerte de su hermano.