Fallece a los 81 a?os el expresidente de Cantabria Juan Hormaechea
El exmandatario fue condenado en 1994 a seis a?os de prisi¨®n y 14 de inhabilitaci¨®n por un delito de malversaci¨®n de caudales p¨²blicos y otro de prevaricaci¨®n
El expresidente de Cantabria Juan Hormaechea ha fallecido este martes a los 81 a?os. Hormaechea, que estaba retirado de la pol¨ªtica desde finales de los a?os noventa, fue presidente de Cantabria durante dos legislaturas, entre 1987 y 1990, cuando fue investido como independiente en las listas de la entonces Alianza Popular, y entre 1991 y 1995, al frente de su propia formaci¨®n pol¨ªtica, la Uni¨®n para el Progreso de Cantabria.
Nacido en la capital c¨¢ntabra el 5 de junio de 1939, y abogado de profesi¨®n, Juan Hormaechea pertenece a...
El expresidente de Cantabria Juan Hormaechea ha fallecido este martes a los 81 a?os. Hormaechea, que estaba retirado de la pol¨ªtica desde finales de los a?os noventa, fue presidente de Cantabria durante dos legislaturas, entre 1987 y 1990, cuando fue investido como independiente en las listas de la entonces Alianza Popular, y entre 1991 y 1995, al frente de su propia formaci¨®n pol¨ªtica, la Uni¨®n para el Progreso de Cantabria.
Nacido en la capital c¨¢ntabra el 5 de junio de 1939, y abogado de profesi¨®n, Juan Hormaechea pertenece a esa estirpe de pol¨ªticos populistas c¨¢ntabros que, con un punto de megaloman¨ªa, han sabido conectar, cada uno en su momento, con las dos almas de la comunidad: la urbana de Santander, con sus resabios se?oriales, y la rural de los pueblos ganaderos del interior. Hormaechea, que entr¨® en el Ayuntamiento en las postrimer¨ªas del franquismo, fue el alcalde que, entre 1977 y 1987, puso los cimientos urban¨ªsticos del actual Santander, con la recuperaci¨®n de la pen¨ªnsula de la Magdalena, que la ciudad hab¨ªa cedido al rey Alfonso XIII para sus veraneos, y que, adem¨¢s de parque p¨²blico, ha sido la sede de los cursos de verano de la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo.
Sus ¨¦xitos en la conservadora Santander, primero con la UCD y posteriormente como independiente en la Coalici¨®n Popular, le llevaron a ocupar, en 1987, la presidencia del Gobierno de Cantabria. All¨ª, su gusto por los proyectos grandiosos se acentu¨®: suya es la idea de adquirir en Canad¨¢ por un mill¨®n de d¨®lares un toro semental, Sult¨¢n, para mejorar la caba?a ganadera c¨¢ntabra ¨Dalgo de lo que el entonces vicepresidente socialista Alfonso Guerra sacaba verdadera punta en sus m¨ªtines en Santander¨D, al tiempo que acomet¨ªa el asfaltado y hormigonado de los accesos a las peque?as poblaciones del interior.
Sin embargo, su gran proyecto, muy cuestionado en su momento, fue la conversi¨®n de unas antiguas minas de hierro al otro lado de la bah¨ªa de Santander en el parque de la naturaleza de Cab¨¢rceno. Este inmenso zool¨®gico al aire libre, muy deficitario en sus inicios y uno de los grandes imanes tur¨ªsticos de la regi¨®n, fue objeto de grandes burlas, especialmente del actual presidente, Miguel ?ngel Revilla, que ha acabado reconociendo el legado y la visi¨®n de Hormaechea ¨Dcon quien tuvo grandes agarradas dial¨¦cticas en el Parlamento regional¨D en este aspecto.
Junto a estos grandes proyectos, Hormaechea se hizo conocido en toda Espa?a en los primeros a?os noventa por su car¨¢cter pol¨¦mico. En octubre de 1990, el presidente de Cantabria, ya por entonces distanciado del Partido Popular, mantuvo una conversaci¨®n en un pub de El Sardinero a altas horas de la madrugada con un grupo de periodistas. En la charla, Hormaechea se refiri¨® al entonces reci¨¦n estrenado l¨ªder del PP, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, como ¡°charlot¨ªn¡±, y dijo que no se fiaba de ¨¦l ¡°porque solo se acuesta con su esposa¡±. Tambi¨¦n lanz¨® insultos contra el fundador del partido, Manuel Fraga, y profiri¨® comentarios despectivos y machistas contra la dirigente popular Isabel Tocino, que posteriormente ser¨ªa ministra de Medio Ambiente. Quienes estuvieron aquella noche en aquel pub de la calle Panam¨¢ ¨DEl Proyector¨D cuentan que Hormaechea cant¨®, brazo en alto, el himno falangista Monta?as Nevadas.
Aquella noche fue el inicio de su largo declive pol¨ªtico. El PP, harto de sus salidas de tono, apoy¨® una moci¨®n de censura que, en diciembre de 1990, llevar¨ªa a la presidencia durante seis meses al socialista Jaime Blanco, recientemente fallecido. Hormaechea fund¨® entonces la Uni¨®n para el Progreso de Cantabria (UPCA), una formaci¨®n personalista con la que gan¨® las elecciones con mayor¨ªa simple y volvi¨® a la presidencia en julio de 1991 gracias al apoyo del PP, al que dej¨® pr¨¢cticamente laminado con su marcha.
Pese a recuperar la presidencia, los tribunales pondr¨ªan fin a su carrera pol¨ªtica. En 1994, tras un largo y muy bronco proceso, el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria lo conden¨® junto a varios miembros de su primer gobierno a seis a?os de c¨¢rcel y 14 de inhabilitaci¨®n por prevaricaci¨®n y malversaci¨®n de fondos. Hormaechea se convirti¨® en el primer presidente auton¨®mico condenado por corrupci¨®n por la adjudicaci¨®n a un amigo de la fabricaci¨®n de los carteles que anunciaban las obras del Gobierno auton¨®mico en los 102 municipios de Cantabria y por una serie de anuncios con dinero p¨²blico en prensa y radio en el a?o 1989, una corruptela que palidece con las que conoci¨® Espa?a en las d¨¦cadas siguientes. Hormaechea evit¨® la c¨¢rcel gracias a un indulto total. Hoy, algunos de esos grandes carteles sirven a los ganaderos de los pueblos como puerta de sus cuadras.
En 1995, volvi¨® a presentarse, pero un d¨ªa antes de las elecciones tuvo que retirarse despu¨¦s de que el Supremo ratificara otra condena por injurias por llamar ¡°baboso¡± y ¡°enano¡± a un representante vecinal durante una discusi¨®n por el parque de Cab¨¢rceno. Su partido, la UPCA, sali¨® del poder, y en 1999 no obtuvo siquiera representaci¨®n.
Con el paso de los a?os la figura de Hormaechea se difumin¨®. Sin embargo, pese a su quebrada salud, en los ¨²ltimos a?os todav¨ªa dio alguna peque?a charla en alg¨²n pueblo de Cantabria. La representaci¨®n pol¨ªtica de Cantabria, tras varios a?os de gobiernos del PP, qued¨® en manos de uno de sus principales enemigos, el regionalista Miguel ?ngel Revilla. Este ha reconocido su pesar por el fallecimiento de Hormaechea y ha admitido que mantuvieron una relaci¨®n pol¨ªtica ¡°terrible¡±.
Revilla asegura que de igual manera que ¨¦l y otros dos diputados de la C¨¢mara c¨¢ntabra presentaron la querella que conden¨® al exmandatario auton¨®mico, ¨¦l tambi¨¦n le solicit¨® al expresidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, el indulto ante los problemas de salud del condenado.
¡°Era un hombre autoritario, no hac¨ªa prisioneros¡±, recuerda el l¨ªder del Partido Regionalista de Cantabria, que destaca que en los ¨²ltimos a?os guardaron buena relaci¨®n tras su ¡°dura¡± convivencia pol¨ªtica. ¡°No le guardo ning¨²n rencor de aquellas batallas, hizo cosas muy importantes para Cantabria, como fomentar el parque de la naturaleza de Cab¨¢rceno, aunque tiene la losa de una manera de gobernar con consecuencias judiciales duras¡±, explica Revilla.