PSOE y Podemos llevan sus ¡°deslealtades¡± al Congreso
Los socialistas reprochan a sus socios descoordinaci¨®n y los podemistas que los ministros de S¨¢nchez vayan por libre
Las deslealtades son subjetivas. Esa es la opini¨®n de miembros de la direcci¨®n de Unidas Podemos y tambi¨¦n del PSOE en el Congreso. En eso coinciden. En qui¨¦n es el mayor culpable de esos comportamientos no pactados, no. Tambi¨¦n est¨¢n de acuerdo en orillar las discrepancias puntuales y quedarse con lo relevante: las votaciones. En eso los dos socios del Gobierno de coalici¨®n no se desmarcan. ...
Las deslealtades son subjetivas. Esa es la opini¨®n de miembros de la direcci¨®n de Unidas Podemos y tambi¨¦n del PSOE en el Congreso. En eso coinciden. En qui¨¦n es el mayor culpable de esos comportamientos no pactados, no. Tambi¨¦n est¨¢n de acuerdo en orillar las discrepancias puntuales y quedarse con lo relevante: las votaciones. En eso los dos socios del Gobierno de coalici¨®n no se desmarcan. Votan juntos en casi todo. Una vez aprobado el primer proyecto de Presupuestos del Estado para 2021 de este in¨¦dito Ejecutivo las discordancias han aflorado con m¨¢s fuerza y en p¨²blico, dentro del Consejo de Ministros y, por extensi¨®n, entre sus grupos parlamentarios en las Cortes.
¡°La deslealtad siempre parece en este caso del socio menor con el mayor y las deslealtades son de los dos lados y en esta relaci¨®n siempre parece que los culpables somos nosotros y no es as¨ª¡±, explican desde la direcci¨®n del grupo que preside Pablo Iglesias. Y ponen el pen¨²ltimo ejemplo, registrado la semana pasada, con la proposici¨®n impulsada unilateralmente por el PSOE sobre la ley de igualdad de trato, un proyecto que ten¨ªa a su vez muy avanzado la ministra de Igualdad, Irene Montero, de Podemos. El PSOE rechaza esa versi¨®n y asegura que Podemos estaba avisado de que llevaban a?os trabajando en ese plan y de que hab¨ªan quedado en que su presentaci¨®n corresponder¨ªa a los grupos parlamentarios y, en concreto, para que pudiese entrar a debate en el pr¨®ximo pleno, al cupo reservado para los socialistas.
Esa evidente discrepancia, que las dos formaciones admiten, esconde otras luchas que se dilucidan en la coalici¨®n del Gobierno y que en Podemos identifican en la disputa entre la vicepresidenta Carmen Calvo e Irene Montero por ver qui¨¦n patrimonializa las pol¨ªticas feministas del Gabinete. Desde el PSOE ya se avis¨® a Montero en una anterior pol¨¦mica que a lo peor ten¨ªa problemas para llevar adelante en la C¨¢mara su proyecto emblem¨¢tico de Ley de Libertad Sexual, conocida como ley del solo s¨ª es s¨ª. Sigue pendiente.
El Congreso es, en ese sentido, un terreno de juego para mostrar la temperatura en cada momento de una relaci¨®n complicada, condenada a durar porque entre los dos grupos suman 155 esca?os, a 21 de la mayor¨ªa absoluta.
En Unidas Podemos asumen sin complejos que discuten normalmente con el PSOE, pero destacan un detalle no menor: ¡°En la pr¨¢ctica siempre votamos con ellos, ah¨ª mostramos nuestra lealtad, no nos vamos a votar con la oposici¨®n¡±. Y recuerdan lo que sucedi¨® este lunes. Estaba convocada una Diputaci¨®n Permanente para que la oposici¨®n, e incluso socios habituales del Ejecutivo, reclamasen la comparecencia de despedida y balance del ya exministro de Sanidad, Salvador Illa. El presidente de su grupo, Jaume Asens, acudi¨® a la sala de prensa, antes de ese debate, y critic¨® con dureza ¡°que el candidato Illa no dejase comparecer al ministro Illa¡± y lo repiti¨® en la sesi¨®n. Al final, Podemos vot¨® con el PSOE e impidi¨® varias comparecencias y sus consiguientes reprobaciones.
En la c¨²pula socialista remarcan que en el Congreso lo relevante son las votaciones. ¡°De vez en cuando hay disfunciones, y es normal porque somos dos grupos con ideas y culturas pol¨ªticas distintas, pero en la acci¨®n legislativa no ha habido apenas problemas¡±, se?alan en el PSOE y exhiben la buena y permanente relaci¨®n de ambos portavoces, Adriana Lastra y Pablo Echenique.
Desde Podemos precisan: ¡°Nuestras discrepancias son verbales, porque los ministros que tienen poder son los del PSOE y suelen ir por libre y a nosotros nos queda la palabra¡±. Y recuerdan que hace m¨¢s de dos meses que no se re¨²nen los grupos.
Los marcajes de ambos lados no se suelen registrar en el panel de votos. El caso m¨¢s llamativo se produjo el 1 de diciembre cuando alg¨²n miembro de Unidas Podemos acudi¨® al registro de la C¨¢mara con ERC y EH Bildu para firmar, sin conocimiento del PSOE, una enmienda a los Presupuestos para prohibir los desahucios hasta 2022. Aquel d¨ªa estuvieron a punto de pasar muchas cosas.
Desde la direcci¨®n socialista se llam¨® a Echenique para reprocharle esa acci¨®n y transmiten con estupor que ese dirigente desconoc¨ªa esa actuaci¨®n que encabez¨® Enrique Santiago, portavoz adjunto y secretario general de Izquierda Unida. En Podemos lo niegan. El PSOE s¨ª ha constatado en varias ocasiones durante este mandato que en Podemos y sus diferentes marcas y confluencias hay muchos dirigentes con poder de firma. En Podemos tildan esa visi¨®n como ¡°desleal¡± y dicen que todas sus actuaciones se coordinan a trav¨¦s de un chat de la direcci¨®n, en el que tambi¨¦n est¨¢ Iglesias. Y que siempre se comunica a Echenique cuando se van a producir comparecencias, como pas¨® el lunes con la de Asens contra Illa, aunque no su contenido.