El uso del bable en el Parlamento de Asturias aviva el debate en el Constitucional
La reforma del reglamento de la C¨¢mara del Principado que permite la utilizaci¨®n del asturiano en las intervenciones fue recurrida por Vox
El Constitucional ha registrado en el pleno que celebra esta semana una intensa discusi¨®n en torno a la constitucionalidad o no del libre uso del bable en el Parlamento de Asturias. El tribunal de garant¨ªas ¡ªque ya ha sostenido en el pasado enconados debates sobre cuestiones ling¨¹¨ªsticas¡ª ha analizado, muy dividido, la reciente reforma del reglamento de la C¨¢mara del Principado que permite la utilizaci¨®n del asturiano en las intervenciones. Esa reforma fue recurrida por Vox, y si bien el proyec...
El Constitucional ha registrado en el pleno que celebra esta semana una intensa discusi¨®n en torno a la constitucionalidad o no del libre uso del bable en el Parlamento de Asturias. El tribunal de garant¨ªas ¡ªque ya ha sostenido en el pasado enconados debates sobre cuestiones ling¨¹¨ªsticas¡ª ha analizado, muy dividido, la reciente reforma del reglamento de la C¨¢mara del Principado que permite la utilizaci¨®n del asturiano en las intervenciones. Esa reforma fue recurrida por Vox, y si bien el proyecto inicial de sentencia llevado al pleno del Constitucional no le cerraba el paso al nuevo reglamento, la fractura interna puesta de manifiesto entre los magistrados no permite vaticinar cu¨¢l ser¨¢ el resultado.
La deliberaci¨®n, que no ha concluido, ha permitido identificar posturas dif¨ªcilmente conciliables en el pleno del Constitucional. La m¨¢s favorable a la constitucionalidad del uso del bable en la Junta General o Parlamento del Principado entiende que en el reglamento ya se contemplaba la posibilidad de que los diputados interviniesen en asturiano. Esa facultad se extender¨ªa ahora a cualquier interviniente, incluidos los miembros del Gobierno de la comunidad aut¨®noma. Y ah¨ª es donde el recurso en discusi¨®n, que fue presentado por Vox, encuentra una grave dificultad, sobre todo para garantizar la eficacia de las labores de control del Ejecutivo, ya que no todos los diputados tienen un amplio conocimiento del bable. Este tipo de objeciones son las que comparte el segundo grupo de magistrados, renuente ante la posibilidad de que el asturiano se utilice en pie de igualdad con el castellano en la C¨¢mara auton¨®mica.
Para este segundo grupo de magistrados es fundamental el dato de que el bable no tiene car¨¢cter de lengua cooficial en Asturias. La reforma propuesta, por tanto, equivaldr¨ªa a juicio de este sector a otorgarle con este cambio el rango de una cooficialidad hasta ahora no establecida.
Esta reserva conecta, a su vez, con algunos de los argumentos del recurso en discusi¨®n. El diputado asturiano de Vox en el Congreso, Jos¨¦ Mar¨ªa Figaredo, explic¨® al presentar la impugnaci¨®n que la iniciativa se tomaba contra una disposici¨®n que permite intervenir en el Parlamento auton¨®mico indistintamente en bable o en castellano, con lo que se confiere al asturiano ¡°una oficialidad de facto¡±. Para los impulsores del recurso, por tanto, el centro del debate es que el Ejecutivo presidido por Adri¨¢n Barb¨®n ¡°quiere imponer el bable¡± no por una cuesti¨®n cultural, sino ¡°simplemente por la cuota de poder que eso supone¡±, todo lo cual lleva a una deriva ¡°regionalista y ego¨ªsta¡±.
A su vez, Adri¨¢n Barb¨®n (PSOE) ha manifestado en diversas ocasiones que su proyecto pretende que la oficialidad del asturiano sea una realidad ¡°si salen los n¨²meros¡± para llevar a cabo la correspondiente reforma del Estatuto de Autonom¨ªa. En una entrevista en Canal 10, el presidente de Asturias dijo apostar por un modelo ¡°amable¡± que sea gradual y que se construya poco a poco, generando consensos. Preguntado entonces si, una vez aprobada la oficialidad, el asturiano ser¨ªa lengua vehicular en la ense?anza, afirm¨® que ese era otro debate y que una vez reformado el Estatuto habr¨ªa que discutir c¨®mo ¡°aterrizar¡± esa oficialidad. Una primera etapa, la que se registra ahora en el Constitucional, es de incierto pron¨®stico.