Pablo Casado toma nota del desapego de su sociedad civil
El presidente del PP se distancia de la patronal y la Iglesia y ahonda en su discurso duro ante la posibilidad de gobernar con Vox
Las encuestas internas del PP de esta misma semana les han confirmado que su estrategia actual es la buena, que el liderazgo de Pablo Casado est¨¢ bien considerado y consolidado, que han devorado ya al electorado y m¨¢s de 30 esca?os de Cs y que, como la legislatura la dan por finiquitada, ya solo hay que insistir ¡°...
Las encuestas internas del PP de esta misma semana les han confirmado que su estrategia actual es la buena, que el liderazgo de Pablo Casado est¨¢ bien considerado y consolidado, que han devorado ya al electorado y m¨¢s de 30 esca?os de Cs y que, como la legislatura la dan por finiquitada, ya solo hay que insistir ¡°en el mantra de que Pedro S¨¢nchez est¨¢ pol¨ªticamente muerto¡±. La posibilidad de llegar a gobernar con Vox, a escala nacional, no est¨¢ fuera del escenario.
Esta es la conclusi¨®n optimista y coincidente de media docena de dirigentes nacionales del equipo del l¨ªder popular. Casado, tras una semana clave para lo que quede de curso pol¨ªtico y despu¨¦s de los pol¨¦micos indultos a los l¨ªderes separatistas, ha roto amarras con una parte fundamental de la sociedad civil que tradicionalmente ha respaldado al PP ¡ªla Iglesia y la patronal¡ª y se ha desmarcado en p¨²blico de ella, influido por el sector m¨¢s duro del PP.
¡°Son d¨ªas para apuntar, para tener en la cabeza y no olvidar¡±, avis¨® el viernes el expresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. Lo hizo en uno de sus cursos de liderazgo, en el que como estrella invitada estaba la madrile?a Isabel D¨ªaz Ayuso y no Casado. All¨ª tom¨® nota de las posiciones que considera demasiado favorables al di¨¢logo y la distensi¨®n en Catalu?a del C¨ªrculo de Econom¨ªa, el presidente de la patronal CEOE, los empresarios catalanes y lo que denomin¨® ¡°la Conferencia Episcopal tarraconense¡±, en alusi¨®n a los 10 obispos de Catalu?a que se han decantado por facilitar la concordia.
El d¨ªa anterior, Ayuso hab¨ªa lanzado ya su advertencia al conminar a que sean los empresarios catalanes favorables a los indultos los que sufraguen los costes de este proceso y se olviden del resto de Espa?a, ¡°porque Madrid no est¨¢ para fiestas¡±. Ayuso llevar¨¢ esta propuesta a la reuni¨®n con Pedro S¨¢nchez el 9 de julio.
Casado es consciente de todas esas presiones internas, de las externas con respecto a Vox y tambi¨¦n de la peculiar situaci¨®n de la CEOE y su presidente, Antonio Garamendi. El dirigente de la patronal le ha explicado ya varias veces a Casado, en p¨²blico y en privado, el contexto de su intervenci¨®n en la que dio la ¡°bienvenida¡± a los indultos si ayudaban a ¡°normalizar¡± la recuperaci¨®n de los negocios, el empleo y la econom¨ªa en Catalu?a. Es su obsesi¨®n. Garamendi acudi¨® a las jornadas del C¨ªrculo en Barcelona y en esos dos d¨ªas escuch¨® muchas confidencias de empresarios relevantes, directivos del Ibex y de la patronal Foment del Treball, y se imbuy¨® de ese clima, sin reparar en la cantidad de asociados de la CEOE en el resto de Espa?a que mantienen posturas m¨¢s intransigentes. Tampoco imagin¨® los ataques descarnados de algunos medios de comunicaci¨®n. Pidi¨® perd¨®n, rectific¨® y matiz¨® su inicial buena disposici¨®n. Volvi¨® a conversar con Casado, que aparentemente le comprendi¨®. Pero el l¨ªder del PP se descolg¨® el lunes, ante sus grupos parlamentarios, con un discurso a¨²n m¨¢s despectivo hacia esa sociedad civil que el que propin¨® a S¨¢nchez tras escuchar su mon¨®logo en el Liceo.
Algunas frases muy da?inas de Casado se dirigieron inequ¨ªvocamente contra los empresarios: ¡°No hay grandeza alguna en los extra?os compa?eros de cama que S¨¢nchez ha logrado para su causa, solo expresan su debilidad econ¨®mica y moral¡±, dijo.
Y despreci¨® a los asistentes al Liceo como ¡°una supuesta sociedad civil rota y d¨¦bil entregada a un Gobierno con dinero pero sin principios¡±. Casado dej¨® una sentencia que son¨® a recado: ¡°Ning¨²n lobby en b¨²squeda de fondos europeos ni ning¨²n cabildeo cortesano lograr¨¢ apartarnos de nuestro camino, porque estamos seguros de que es el mejor para los espa?oles y sabemos que van a compartirlo mayoritariamente con nosotros muy pronto. Nuestros ¨²nicos accionistas son los espa?oles, solo a ellos nos debemos, no a ning¨²n editorial ni consejo de administraci¨®n. Los que se fueron de Catalu?a para mantener su cuenta de resultados frente al independentismo no pueden pretender ahora que nos vayamos de Catalu?a para la cuenta de resultados de S¨¢nchez con el independentismo¡±.
Ese demarraje de Casado tiene una explicaci¨®n. En su entorno denuncian con gran malestar que ¡°algunos empresarios relevantes que acuden a su despacho en G¨¦nova 13 para denostar el proceso independentista y hasta para pedir ayuda con algunas medidas, en funci¨®n de puro lobby, en cuanto pueden se descuelgan en un escenario para respaldar la convivencia de S¨¢nchez¡±. Casado y su equipo les desprecian como aut¨¦nticos traidores. No se sienten nada atados a esos sectores y auguran que cuando el l¨ªder popular llegue a La Moncloa cambiar¨¢n de bando r¨¢pidamente.
Fuentes de la CEOE transmiten que Garamendi y Casado se llevan muy bien y hablan a menudo sin problemas. El presidente de la patronal tiene como mano derecha a la exministra popular F¨¢tima B¨¢?ez. Sostienen que el l¨ªder del PP ha comprendido las justificaciones de Garamendi, pero tambi¨¦n dejan caer que en este ¨²ltimo a?o con la pandemia el dirigente popular y su partido han perdido peso y trascendencia desde la oposici¨®n y que en cambio la CEOE s¨ª ha sido un interlocutor permanente y privilegiado del Gobierno, con el que han llegado a numerosos acuerdos. Se apunta ah¨ª impl¨ªcitamente al argumento de los celos y a la dificultad de aparecer que sufre la oposici¨®n en este contexto.
La tensi¨®n con la Iglesia y la Conferencia Episcopal es m¨¢s compleja. No son solo los obispos catalanes, como intent¨® despejar el problema al principio la c¨²pula popular. Esta semana se reuni¨® la comisi¨®n permanente de la Conferencia y su portavoz, Luis Arg¨¹ello, no solo respald¨® a sus compa?eros en Catalu?a sino tambi¨¦n el di¨¢logo, siempre con respeto a la justicia y la divisi¨®n de poderes. Y agreg¨® que la crisis en Catalu?a ¡°no se puede resolver solo desde el sentimiento¡±.
El PP actual de Casado es un partido liberal conservador, que en su ejecutiva tiene algunos miembros socialmente muy progresistas en temas como el aborto, la libertad sexual o la eutanasia, pero en el que los dirigentes m¨¢s influidos por la Iglesia cat¨®lica y hasta por el Opus ostentan gran poder. El propio Casado y alguna de sus colaboradoras m¨¢s cercanas han derivado en los ¨²ltimos tiempos por situaciones personales hacia posiciones m¨¢s conservadoras en lo religioso, y su n¨²mero dos, Teodoro Garc¨ªa Egea, no oculta sus buenas conexiones en Murcia con el Opus. La resistencia de Casado a todas esas influencias ha sido destemplada. Afirma que la pol¨ªtica se hace solo desde el Parlamento con los esca?os que salen de las urnas. Pero el PP dispone por ahora, y al margen de los sondeos, solo de 89. Con los 52 de Vox y los nueve de Ciudadanos llegan a 150, muy lejos para disturbar las amplias mayor¨ªas del PSOE y sus socios.