Polic¨ªas y guardias, unidos contra la reforma de la ¡®ley mordaza¡¯
Los sindicatos policiales convocan manifestaciones frente a una norma que entienden que los ¡°criminaliza¡±, ¡°desprestigia¡± y los ¡°pone en riesgo¡±
La competencia hist¨®rica entre la Polic¨ªa Nacional y la Guardia Civil solo se ha dejado de lado en los ¨²ltimos tiempos por dos motivos: la equiparaci¨®n salarial (con otros agentes y polic¨ªas auton¨®micos) y, ahora, por la reforma de Ley de Seguridad Ciudadana, popularmente conocida como ley mordaza. Agentes de pr¨¢cticamente todos los sindicatos policiales y asociaciones de la Guardia Civil acudir¨¢n juntos a las concentraciones y manifestaciones previstas ...
La competencia hist¨®rica entre la Polic¨ªa Nacional y la Guardia Civil solo se ha dejado de lado en los ¨²ltimos tiempos por dos motivos: la equiparaci¨®n salarial (con otros agentes y polic¨ªas auton¨®micos) y, ahora, por la reforma de Ley de Seguridad Ciudadana, popularmente conocida como ley mordaza. Agentes de pr¨¢cticamente todos los sindicatos policiales y asociaciones de la Guardia Civil acudir¨¢n juntos a las concentraciones y manifestaciones previstas para los pr¨®ximos 24 y 27 de noviembre en toda Espa?a, con el fin de ¡°formar un frente com¨²n contra la amenaza¡± que representa la reforma de la Ley Org¨¢nica de Protecci¨®n de la Seguridad Ciudadana que proyecta el Gobierno.
Desde que se conocieron los principales cambios acordados por los socios de Gobierno (PSOE y Unidas Podemos), comenzaron a sucederse los comunicados de protesta emitidos desde unos y otros sindicatos que entienden que se ¡°criminaliza, desprestigia y pone en riesgo a los agentes¡±.
Manifestaciones ¡°espont¨¢neas¡±. El nuevo texto legal, en contra del aprobado hace seis a?os con la mayor¨ªa absoluta del PP, suaviza la actuaci¨®n policial en las manifestaciones, permitiendo que estas sean ¡°espont¨¢neas¡± (no comunicadas). Los agentes lo ven como ¡°un peligro¡±, para los que tengan que acudir sin conocer siquiera el itinerario previsto.
Veracidad del atestado. Un asunto peliagudo, y que la polic¨ªa entiende como una ¡°criminalizaci¨®n¡±, es el de limitar la presunci¨®n de veracidad de los atestados a lo ¡°razonable¡±. ¡°Esta reforma nos desprestigia, sit¨²a a los polic¨ªas al nivel que los delincuentes cuando retira la presunci¨®n de veracidad que ten¨ªan las actas policiales¡±.
Grabaciones e im¨¢genes. La reforma contempla, con el aval del Tribunal Constitucional, que se puedan difundir im¨¢genes o grabaciones de las actuaciones policiales, algo prohibido en la norma actual. Un aspecto que los agentes consideran que les pone en riesgo a ellos y a sus familias.
Dos horas de detenci¨®n. Se limita a dos horas el tiempo de detenci¨®n de quienes se nieguen a identificarse (ahora son seis). Los agentes creen que tendr¨¢n que actuar en ¡°tiempo r¨¦cord¡±.
¡®Modo taxi¡¯. La reforma legal obliga a devolver a los detenidos al lugar donde se les arrest¨®, no a dejarles ir en comisar¨ªa. Los agentes temen convertirse en una suerte de ¡°taxistas¡±, a falta de que se sepa c¨®mo se articular¨¢ esa medida.
Representantes de los sindicatos policiales se reunieron el pasado 15 de noviembre con el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para mostrar su rechazo ante la reforma legal. Seg¨²n ellos, el ministro les asegur¨® que ¡°es un proyecto¡± susceptible ¡°introducir modificaciones¡±.