Vox choca con un clamor en el Congreso frente a su discurso ¡°xen¨®fobo y racista¡±
¡°Tener el DNI no significa ser espa?ol¡±, afirma la extrema derecha. ¡°Espa?a es un proyecto hist¨®rico que no puede estar abierto a cualquiera¡±
Vox, reci¨¦n presentada su candidatura para entrar en las instituciones, mostr¨® este martes en el Congreso hasta d¨®nde quiere llegar en su pol¨ªtica contra la inmigraci¨®n: elevar de 10 a 15 a?os el periodo de residencia en Espa?a para obtener la nacionalidad, un largo plazo que no contempla ning¨²n otro pa¨ªs de la UE; acreditar ¡°buena conducta c¨ªvica y suficiente grado de integraci¨®n¡±; presentar un certificado ...
Vox, reci¨¦n presentada su candidatura para entrar en las instituciones, mostr¨® este martes en el Congreso hasta d¨®nde quiere llegar en su pol¨ªtica contra la inmigraci¨®n: elevar de 10 a 15 a?os el periodo de residencia en Espa?a para obtener la nacionalidad, un largo plazo que no contempla ning¨²n otro pa¨ªs de la UE; acreditar ¡°buena conducta c¨ªvica y suficiente grado de integraci¨®n¡±; presentar un certificado oficial de conocimiento del idioma y otro de ausencia de antecedentes penales, y pasar un examen sobre la historia de Espa?a. Como guinda, tambi¨¦n propuso denegar los visados a los ciudadanos de todos los pa¨ªses del Magreb por negarse a acoger de vuelta a los inmigrantes irregulares expulsados de Espa?a.
Para defender ese programa, plasmado en dos propuestas llevadas al pleno del Congreso, Vox despleg¨® lo m¨¢s granado de su argumentario nacionalista. Espa?a, sentenci¨® su diputado Francisco Jos¨¦ Contreras, ¡°es un proyecto hist¨®rico que no puede estar abierto a cualquiera¡±. ¡°Ser espa?ol es mucho m¨¢s que tener un papel, tener el DNI no significa ser espa?ol¡±, abund¨®. Contreras intentaba enmendar as¨ª a la presidenta madrile?a, Isabel D¨ªaz Ayuso, quien la pasada semana polemiz¨® con Vox al recordar que los integrantes de las bandas latinas que han provocado incidentes violentos en la capital ¡°son tan espa?oles como Abascal¡±.
Vox se propone evitar que ¡°los delincuentes lleguen a ser espa?oles¡±. Porque el v¨ªnculo entre inmigraci¨®n y delincuencia resulta indiscutible, seg¨²n Contreras. Y no tiene que ver con la pobreza, sino que se trata de una ¡°cuesti¨®n cultural, de mentalidad¡±, de la actitud de gente que se ha criado en ¡°los pa¨ªses m¨¢s violentos del mundo¡±. Los espa?oles de verdad responden a otro car¨¢cter, ilustr¨® Contreras: ¡°Tambi¨¦n nosotros fuimos un tiempo pobres e ignorantes y no por eso mont¨¢bamos bandas de machetes¡±.
Contra ese discurso se levant¨® un clamor en la C¨¢mara. Contreras hab¨ªa ironizado con la ¡°xenofilia¡± del ¡°consenso progre¡±, y los supuestos part¨ªcipes de ese consenso ¡ªtodos los dem¨¢s¡ª le respondieron con una calificaci¨®n casi un¨¢nime: ¡°Racismo y xenofobia¡±. Los m¨¢s duros no fueron los dos partidos del Gobierno, ni siquiera ERC, EH Bildu o la CUP. El m¨¢s contundente, hasta el punto de recibir los elogios del diputado de Bildu Jon I?arritu, fue Miguel Guti¨¦rrez, de Ciudadanos. ¡°?No queremos ser como ustedes!¡±, repiti¨® Guti¨¦rrez en un vibrante discurso que levant¨® protestas en los esca?os de la extrema derecha cuando les espet¨®: ¡°?Son ustedes malas personas!¡±. ¡°?S¨ª, malas personas!¡±, reiter¨® ante las quejas de la bancada de Vox. ¡°Se ensa?an con los que solo buscan una vida mejor¡±. ¡°Odian al extranjero, odian al distinto, odian al pobre¡±, insisti¨®, para rematar: ¡°?Qu¨¦ pretenden?: ?dar los carnets de espa?oles en las sedes de Vox?¡±.
El PP se adhiri¨® al rechazo general, aunque en tono m¨¢s condescendiente. ¡°No se puede criminalizar a los inmigrantes¡±, reconvino la diputada Mar¨ªa Jes¨²s Moro, quien destac¨® su rechazo a una de las propuestas de la extrema derecha, la de retirar la nacionalidad a quienes hayan cometido determinados delitos. ¡°Eso es volver al C¨®digo Penal de 1944¡å, critic¨® Moro. Solo el ¨²nico diputado de Foro Asturias respald¨® las tesis de Vox, derrotadas con 285 votos en contra.
La panoplia de medidas presentadas por Vox se complet¨® con la propuesta de denegar los visados a los ciudadanos del Magreb. Para defenderla, sac¨® a su portavoz m¨¢s fogosa en estos temas, Roc¨ªo de Meer, a quien el diputado de Ciudadanos Guillermo D¨ªaz record¨® que hace d¨ªas escribi¨® en su Twitter que Espa?a se est¨¢ convirtiendo en ¡°un barre?o de ciudadanos del mundo¡±. De Meer arranc¨® un aplauso entusiasta de su grupo cuando calific¨® de ¡°aquelarre antirracista¡± las manifestaciones convocadas para el pr¨®ximo 19 de marzo en todo el mundo por el D¨ªa Internacional contra la Discriminaci¨®n Racial y a?adi¨®: ¡°Para nosotros el 19 de marzo solo es el d¨ªa de San Jos¨¦ y el D¨ªa del Padre¡±. De la respuesta del PP se encarg¨® el diputado Jos¨¦ Ortiz, quien arranc¨® con tibieza dirigi¨¦ndose al partido que quiere compartir Gobierno con los populares: ¡°Tenemos cosas que nos unen, pero tambi¨¦n que nos separan y esta es una de ellas¡±. Luego descalific¨® la propuesta: ¡°Si les retiramos los visados, ?qui¨¦n va a recoger las naranjas en Valencia, las fresas en Huelva, las aceitunas en Ja¨¦n?¡±.
Si Vox defend¨ªa que espa?ol no puede ser cualquiera, algunos de los portavoces que le dieron la r¨¦plica sirvieron de prueba viviente de que en la sede de la soberan¨ªa nacional tambi¨¦n se sientan representantes del pueblo nacidos en otros pa¨ªses. En la C¨¢mara se escuch¨® un castellano pronunciado con diferentes acentos: el senegal¨¦s del socialista Luc Andr¨¦ Diouf, el argentino de Gerardo Pisarello, de Unidas Podemos, y el brasile?o de Maria Dantas, de ERC. Pisarello fue el m¨¢s combativo de todos y record¨® a su contrincante, De Meer, que ese no es un apellido espa?ol, como tampoco los de otros dirigentes de su partido como Javier Ortega-Smith o Hermann Tertsch. ¡°?Qui¨¦n demonios cabe en esa Espa?a llena de odio que solo sabe embestir?¡±, clam¨® el diputado catal¨¢n.