La dureza de Robles complica la estrategia de apaciguamiento de S¨¢nchez

La estrategia estaba muy clara desde primera hora de la ma?ana. En realidad, desde el domingo, cuando F¨¦lix Bola?os viaj¨® a Barcelona: La Moncloa ha optado por apaciguar a ERC y a los dem¨¢s socios indignados por el esc¨¢ndalo del presunto espionaje a m¨¢s de 60 independentistas. Por eso, Pedro S¨¢nchez ...

La estrategia estaba muy clara desde primera hora de la ma?ana. En realidad, desde el domingo, cuando F¨¦lix Bola?os viaj¨® a Barcelona: La Moncloa ha optado por apaciguar a ERC y a los dem¨¢s socios indignados por el esc¨¢ndalo del presunto espionaje a m¨¢s de 60 independentistas. Por eso, Pedro S¨¢nchez arranc¨® la ma?ana en el Congreso en un tono muy suave con el portavoz de ERC, admitiendo su comprensi¨®n y prometi¨¦ndole que actuar¨ªan con total transparencia con las cuatro v¨ªas que ofreci¨® Bola?os el domingo en Barcelona: investigaci¨®n del CNI, del defensor del pueblo, comisi¨®n de secretos oficiales y desclasificaci¨®n de documentos. Todo iba seg¨²n lo previsto. Rufi¨¢n ni siquiera fue especialmente agresivo para su estilo.

Pero entonces llegaron las preguntas a Margarita Robles, que ten¨ªa varias sobre el mismo asunto. El d¨ªa anterior, la ministra ya hab¨ªa estado muy dura en el Senado. Ella no da por bueno el informe sobre el espionaje que ha publicado The New Yorker, incluso duda de la credibilidad de la revista. Pero despu¨¦s del cruce de S¨¢nchez con Rufi¨¢n, Robles empez¨® m¨¢s suave. Sin embargo, poco a poco, sobre todo tras el cruce con el portavoz del PNV, Aitor Esteban, se fue calentando, y acab¨® en un choque abierto con los independentistas ante la evidente incomodidad de algunos miembros del Gobierno ¡ªlos de Unidas Podemos se ausentaron¡ª y diputados socialistas, sorprendidos por el enconamiento de un debate entre supuestos aliados.

Robles, se?alan en su entorno, est¨¢ absolutamente convencida de que el CNI no ha hecho nada incorrecto, y sube el tono porque cree que los independentistas est¨¢n haciendo una campa?a pol¨ªtica con un informe al que no da ninguna credibilidad. Ella, que este mi¨¦rcoles lleg¨® a decir en los pasillos del Congreso que no se ¡°dedica profesionalmente a la pol¨ªtica, al contrario que ¨¦l [por Gabriel Rufi¨¢n]¡±, porque es magistrada del Supremo, est¨¢ muy molesta con las acusaciones del independentismo al CNI, y cree que es su obligaci¨®n defenderlo, y por eso sube el tono. ¡°?Qu¨¦ tiene que hacer un Estado cuando alguien declara la independencia?¡±, argument¨® este mi¨¦rcoles en el Congreso.

Sin embargo, tanto en el Gobierno como en el PSOE, aunque no es una opini¨®n un¨¢nime ¡ªhay quien defiende que es razonable que S¨¢nchez use un tono m¨¢s amable y Robles m¨¢s duro¡ª caus¨® un importante malestar que la ministra, con su enfrentamiento abierto, complicara la estrategia de apaciguamiento de La Moncloa. De hecho, los independentistas tardaron muy poco en tomar las palabras de Robles para pedir su dimisi¨®n y de paso alimentar m¨¢s el ambiente victimista que hay en Catalu?a.

Debate interno en ERC

Poco despu¨¦s del choque en el Congreso, F¨¦lix Bola?os se reuni¨® con Gabriel Rufi¨¢n y la cita no fue bien. Las cosas ya estaban dif¨ªciles antes de la sesi¨®n de control, pero se complicaron a¨²n m¨¢s. ERC vive un debate intenso entre los que creen que hay que dejar pasar el decreto al menos con una abstenci¨®n y los que piensan que el caso del espionaje es tan grave que hay que votar no si S¨¢nchez no entrega una cabeza pol¨ªtica, la de Robles o la de la directora del CNI, Paz Esteban. Varias fuentes del Gobierno coinciden en que es muy poco probable que S¨¢nchez acceda a la petici¨®n de destituir a Robles, y mucho menos ahora que se ver¨ªa como una concesi¨®n a los independentistas, pero eso no impide que se detecte un evidente malestar con la estrategia de la ministra, aparentemente aut¨®noma, de salir al choque con los secesionistas. Robles es una independiente con muy buena valoraci¨®n en las encuestas, pero sin respaldo pol¨ªtico fuerte en el PSOE.

Estos sectores del Gobierno y del PSOE que est¨¢n molestos se?alan que el problema no es la votaci¨®n de este jueves, que se podr¨¢ salvar de una u otra manera, incluso con la abstenci¨®n del PP, sino lo que queda de legislatura. El PSOE y Unidas Podemos, se?alan varios ministros y dirigentes nacionales y regionales consultados, no puede estar un a?o y medio entero dependiendo del PP, porque eso ser¨ªa entregarle a Alberto N¨²?ez Feij¨®o el control de la agenda pol¨ªtica y vivir en un desgaste permanente. S¨¢nchez necesita rearmar su mayor¨ªa si quiere agotar la legislatura y terminar su agenda legislativa progresista. Por eso es clave reencontrarse con ERC, el PNV y otros aliados indignados por el espionaje. La estrategia de La Moncloa pasa, por tanto, por llegar hasta el final en la investigaci¨®n del esc¨¢ndalo y tratar de calmar las aguas con sus socios. Y para eso, el tono de Robles no ayuda, seg¨²n estas fuentes. La ministra, sin embargo, est¨¢ muy segura de su posici¨®n y parece dispuesta a llevarla hasta el final, seg¨²n su entorno.