La Ley de Memoria Democr¨¢tica sale adelante tras un tempestuoso debate
La derecha agita a las v¨ªctimas del terrorismo por el pacto con Bildu y la izquierda la acusa de sembrar mentiras sobre el contenido del texto
En el Congreso de los Diputados se pueden escuchar cosas extraordinarias, cosas como que ETA todav¨ªa existe o que la democracia espa?ola es ¡°un hijo bastardo de la dictadura fascista¡±. Lo primero lo asegur¨® el diputado regionalista navarro Carlos Garc¨ªa Adanero. Lo segundo lo sostuvo el parlamentario de Junts per Catalunya Josep Pag¨¨s. Los dos hablaban de lo mismo, de la Ley de Memoria Democr¨¢tica, que este jueves ...
En el Congreso de los Diputados se pueden escuchar cosas extraordinarias, cosas como que ETA todav¨ªa existe o que la democracia espa?ola es ¡°un hijo bastardo de la dictadura fascista¡±. Lo primero lo asegur¨® el diputado regionalista navarro Carlos Garc¨ªa Adanero. Lo segundo lo sostuvo el parlamentario de Junts per Catalunya Josep Pag¨¨s. Los dos hablaban de lo mismo, de la Ley de Memoria Democr¨¢tica, que este jueves ha salido adelante en el Congreso tras un debate repleto de excitaci¨®n y ataques brutales en una direcci¨®n y otra, con el voto en contra de toda la derecha y la abstenci¨®n de ERC.
A¨²n hubo muchas m¨¢s cosas extraordinarias que escuchar en la tarde parlamentaria. Por ejemplo, que Franco erigi¨® el Valle de los Ca¨ªdos como gesto de ¡°hermanamiento postrero de las v¨ªctimas de ambos bandos¡±, seg¨²n revel¨® el diputado de Vox Francisco Jos¨¦ Contreras. O que si en la Transici¨®n el PSOE y el PCE hubiesen estado dirigidos por sus actuales l¨ªderes, Pedro S¨¢nchez y Enrique Santiago, ¡°habr¨ªa habido otra guerra civil¡±, seg¨²n el ejercicio de pol¨ªtica ficci¨®n del portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal.
El debate ve¨ªa cargando de tensi¨®n por el esc¨¢ndalo suscitado en la derecha tras el anuncio de que EH Bildu apoyar¨ªa la ley. El PP volvi¨® a movilizar a las v¨ªctimas del terrorismo, que acudieron este jueves al Congreso a reunirse con el l¨ªder del partido, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, un gesto que irrit¨® al PSOE. Para defender su posici¨®n en el pleno, los populares eligieron al diputado Jaime Mateu, quien empez¨® su intervenci¨®n recordando que su padre y un hermano suyo fueron asesinados por ETA.
Mateu bautiz¨® el nuevo texto como ¡°ley Bildu o ley de memoria totalitaria¡±, porque su tesis, como la del resto de la derecha, es que ha sido redactada por ¡°el brazo pol¨ªtico de una organizaci¨®n terrorista¡±. El diputado de Ciudadanos Guillermo D¨ªaz estir¨® m¨¢s el argumento. Aludi¨® al caso de Fabio, un ni?o de dos a?os asesinado en un atentado, y sentenci¨®: ¡°Los miembros de la banda que lo mat¨® redactan hoy la ley de memoria democr¨¢tica¡±. Y a¨²n complet¨®: ¡°Ustedes escriben pancartas con sangre ajena¡±.
El ambiente se encendi¨® cuando subi¨® a la tribuna Contreras, de Vox, cargado de fotograf¨ªas de personas asesinadas por elementos izquierdistas en la Guerra Civil. Antes que ¨¦l, Carolina Telechea, de ERC, hab¨ªa evocado el recuerdo de Salvador Puig Antich, joven anarquista ejecutado a garrote vil en 1974. Contreras sali¨® al quite al llegar su turno: ¡°Se le ha olvidado decir que Puig Antich fue ejecutado no por ser anarquista, sino por matar a un polic¨ªa. Se llamaba Francisco Anguas y ten¨ªa 24 a?os¡±. Los diputados de ERC y algunos de Unidas Podemos se levantaron de inmediato y abandonaron el hemiciclo en silencio. Se quedaron sin o¨ªr c¨®mo Contreras ensalzaba la campa?a de propaganda que lanz¨® la dictadura de Franco para conmemorar sus primeros ¡°25 a?os de paz¡±, un gesto ¡°conciliador¡±, seg¨²n el diputado, que tambi¨¦n elogi¨® los esfuerzos conciliadores del PCE de Santiago Carrillo. El discurso entusiasm¨® en las filas de Vox, cuyo l¨ªder, Santiago Abascal, se acerc¨® al esca?o de Contreras para felicitarle.
Las ovaciones iban y ven¨ªan de un lado al otro del hemiciclo. En el izquierdo, ??igo Errej¨®n logr¨® enardecer a media C¨¢mara en poco m¨¢s de dos minutos. Primero emplaz¨® a la derecha: ¡°Tengan la honestidad pol¨ªtica y c¨ªvica de decir lo que opinan sobre esta ley, sin esconderse y sin instrumentalizar a otras v¨ªctimas¡±. Y luego defendi¨® su necesidad con los tonos m¨¢s emotivos: ¡°Esta no es una ley sobre dolores del pasado, es una ley sobre dolores que suceden hoy, todos los d¨ªas, sobre el dolor de quienes no tienen a d¨®nde ir a recordar a sus familiares porque est¨¢n enterrados en una cuneta¡±. Toda la izquierda le aplaudi¨® a rabiar, como har¨ªa despu¨¦s ante otra encendida intervenci¨®n de Enrique Santiago, quien acab¨® agitando las manos en direcci¨®n a la bancada del PP: ¡°?D¨ªganlo conmigo: yo condeno las violaciones de los derechos humanos en la dictadura franquista!¡±.
La derecha se opuso a la ley porque asegura que entierra el esp¨ªritu de la Transici¨®n, y el independentismo catal¨¢n no la apoy¨® por lo contrario: porque consagra, en palabras de Telechea, un cambio de r¨¦gimen que ¡°legaliz¨® el fascismo en lugar de derrotarlo¡±. ERC ped¨ªa la derogaci¨®n de la amnist¨ªa de 1977, rechazada por el PSOE, y se abstuvo. EH Bildu, en cambio, decidi¨® apoyarla al conseguir que se incluya la indagaci¨®n de posibles abusos de derechos humanos hasta 1983. Su diputada Bel Pozueta tambi¨¦n se encar¨® con la derecha, que, seg¨²n ella, ¡°anhela¡± la dictadura.
Todos los portavoces de la izquierda insistieron en acusar a los detractores de la ley de verter falsedades sobre su contenido. A desmentirlas se dedic¨® el ministro de la Presidencia, F¨¦lix Bola?os, quien ley¨® varias partes del texto, sobre todo las que defienden los logros de la Transici¨®n y del proceso constitucional. ¡°Esto es lo que dice la ley, no lo que dicen que dice¡±, fue repitiendo Bola?os como una muletilla hasta concluir: ¡°La verdad prevalecer¨¢ y las mentiras se olvidar¨¢n muy pronto¡±. El texto recibi¨® 173 votos favorables, 159 en contra ¨DPP, Vox, Ciudadanos y Junts¨D y 14 abstenciones, entre ellas las de ERC. Cuando se conoci¨® el resultado, los esca?os del Gobierno se volvieron a aplaudir hacia la tribuna de invitados, donde representantes de v¨ªctimas del franquismo hab¨ªan asistido al debate en un respetuoso silencioso.