La Audiencia Nacional pone en libertad a un militar peruano investigado por genocidio
Augusto Gabilondo Garc¨ªa del Barco, de 67 a?os, fue detenido el pasado viernes en Fuengirola y se le busca por su presunta implicaci¨®n en la muerte de 60 personas en los a?os 80 en su pa¨ªs
La Polic¨ªa Nacional ha detenido en Fuengirola (M¨¢laga, 82.585 habitantes) al militar peruano Augusto Gabilondo Garc¨ªa del Barco, de 67 a?os. Sobre ¨¦l hab¨ªa abierta una orden internacional de detenci¨®n y entrega realizada por las autoridades de su pa¨ªs por un presunto delito de genocidio, seg¨²n han confirmado fuentes policiales. El hombre se hab¨ªa fugado de la justicia de Per¨², donde tiene distintas causas abiertas. La Audiencia Nacional, a trav¨¦s del magistrado del Juzgado Centra...
La Polic¨ªa Nacional ha detenido en Fuengirola (M¨¢laga, 82.585 habitantes) al militar peruano Augusto Gabilondo Garc¨ªa del Barco, de 67 a?os. Sobre ¨¦l hab¨ªa abierta una orden internacional de detenci¨®n y entrega realizada por las autoridades de su pa¨ªs por un presunto delito de genocidio, seg¨²n han confirmado fuentes policiales. El hombre se hab¨ªa fugado de la justicia de Per¨², donde tiene distintas causas abiertas. La Audiencia Nacional, a trav¨¦s del magistrado del Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 5, Santiago Pedraz, ha acordado su puesta en libertad provisional sin fianza, aunque deber¨¢ comparecer cada 15 d¨ªas en el juzgado m¨¢s cercano a su domicilio.
Garc¨ªa del Barco hab¨ªa huido de su pa¨ªs. La justicia peruana hab¨ªa intentado comunicarse con el durante varias ocasiones pero no lo hab¨ªa conseguido, as¨ª que el pasado mes de abril emiti¨® una orden de captura para su detenci¨®n e ingreso en prisi¨®n preventiva durante nueve meses. Se desconoc¨ªa su paradero hasta que el pasado viernes fue hallado por agentes de la Polic¨ªa Nacional, pertenecientes a la Comisar¨ªa Provincial de M¨¢laga, en Fuengirola, donde fue detenido. Seg¨²n ha adelantado El Confidencial, fue localizado mientras buscaba alojamiento en la Costa del Sol. Refugio habitual de fugitivos, ¨¦stos se aprovechan del anonimato de la zona, repleta de urbanizaciones desperdigadas y residentes de todas las nacionalidades. Se le buscaba por presuntos delitos de lesa humanidad debido a su presunta implicaci¨®n en el caso Huanta, donde se investiga la desaparici¨®n y homicidio de 60 personas.
Tras su detenci¨®n, el peruano fue puesto a disposici¨®n del Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 5, donde se neg¨® a aceptar la entrega en extradici¨®n simplificada, una posibilidad que recoge el acuerdo firmado por Espa?a y Per¨². El magistrado Santiago Pedraz fij¨® entonces su puesta en libertad sin fianza el mismo viernes a ¡°a la vista de las circunstancias personales, familiares y laborales concurrentes en la persona reclamada¡±, adem¨¢s de las ¡°circunstancias y relativa gravedad de la conducta por la que es reclamado¡±, seg¨²n el auto recogido por Europa Press.
Como medidas cautelares, el juez ¡ªcuya decisi¨®n est¨¢ avalada por la Fiscal¨ªa¡ª le ha retirado el pasaporte y le ha prohibido abandonar el pa¨ªs sin autorizaci¨®n previa judicial. Garc¨ªa del Barco debe igualmente estar localizable, as¨ª como acudir cada 15 d¨ªas al juzgado m¨¢s cercano a su residencia mientras se resuelve el expediente de extradici¨®n. Ser¨¢ la justicia peruana la que deba ahora encargarse de las diligencias para llevar a cabo el proceso de extradici¨®n.
Per¨² reclama a Garc¨ªa del Barco por un juicio que comenz¨® el pasado mes de marzo por la desaparici¨®n forzada de 69 personas en 1984, cuando era jefe de una sede militar en Ayacucho, la regi¨®n que concentr¨® la mayor violencia del grupo terrorista Sendero Luminoso y las acciones de las fuerzas armadas. Una de esas v¨ªctimas fue Jaime Ayala Sulca, corresponsal del diario La Rep¨²blica y periodista radiof¨®nico en la provincia de Huanta (Ayacucho). En diciembre, el militar fue condenado tambi¨¦n a 15 a?os de prisi¨®n por otro caso de desaparici¨®n forzada.
De los 20 a?os de violencia en Per¨², 1983 y 1984 fueron los de mayor ferocidad en la respuesta de las Fuerzas Armadas en Ayacucho, cuando el Gobierno cedi¨® a los militares el control del orden interno en esa regi¨®n. La sentencia de diciembre contra Gabilondo, indica que en 1984 los casos de desaparici¨®n forzada se incrementaron 30% con respecto al a?o anterior, y cerca del 85% de estos episodios fueron reportados en Huanta, la provincia donde el uniformado prest¨® servicio como teniente de la Marina.
Gabilondo era jefe de destacamento de la infanter¨ªa de Marina en la base contrasubversiva de las provincias de Huanta y La Mar y fue condenado en diciembre a 20 a?os de prisi¨®n como autor directo de la desaparici¨®n forzada en 1984 de Benito Balde¨®n Ninahuanca, trabajador de la oficina de reclutamiento del Ej¨¦rcito. Sendero Luminoso empez¨® sus acciones armadas contra el Estado peruano en mayo de 1980 en Ayacucho. En 20 a?os de la violencia hubo 69.000 muertes, de ellas, el 79% personas quechua-hablantes, seg¨²n el informe final de la Comisi¨®n de la Verdad. El 29% de las v¨ªctimas fatales fueron responsabilidad de las fuerzas armadas y el 54% de la guerrilla.
¡°Es una alegr¨ªa que haya sido capturado. En el juicio (en audiencias en l¨ªnea) a los acusados no se les ve el rostro y no parece real. Ahora a esperar la extradici¨®n¡±, coment¨® a este diario Rosa Luz Pallqui, viuda del periodista Ayala. En una de las sesiones un abogado de Gabilondo dijo no conocer el paradero de su defendido.
El abogado de la familia Ayala, Juan Jos¨¦ Quispe, inform¨® que en el juicio en curso la Fiscal¨ªa acusa a Gabilondo de asesinato y desaparici¨®n forzada y ha pedido una pena de 25 a?os de prisi¨®n para el reo ausente. La viuda de Ayala tuvo que acudir a la Corte Interamericana de Derechos Humanos para que se concrete el juicio a los responsables de la desaparici¨®n de decenas de civiles en 1984 en tres localidades de la provincia de Huanta, entre ellos su esposo, porque el caso fue archivado en el fuero com¨²n. ¡°El juicio es por 69 desaparecidos que pudieron ser identificados hasta ese momento, pero son m¨¢s¡±, inform¨® por tel¨¦fono.
El periodista entr¨® el 2 de agosto de 1984 al Estadio de Huanta, que era el cuartel de la Marina, para investigar sobre la tortura y desaparici¨®n de ciudadanos, y nunca m¨¢s se supo de ¨¦l. Para la pr¨®xima semana la Fiscal¨ªa tiene prevista una segunda diligencia de exhumaci¨®n de restos en una fosa para buscarlo.
Seg¨²n la abogada defensora de derechos humanos Gloria Cano, quien defendi¨® a los familiares de Benito Balde¨®n, hasta el momento ha habido unos 20 juicios por casos de violaciones a los derechos humanos perpetrados por un n¨²mero mayor de militares durante el per¨ªodo de violencia 1980-2000. El caso de Jaime Ayala y los desaparecidos en Huanta es uno de ellos.