Las posturas ¡°enquistadas¡± del Gobierno y el PP retrasan el pacto del Poder Judicial
Socialistas y populares mantienen la buena disposici¨®n para llegar a un acuerdo, seg¨²n ambas partes, pero la negociaci¨®n va m¨¢s lenta de lo previsto y se atasca en los puntos m¨¢s delicados
La negociaci¨®n avanza m¨¢s lenta de lo previsto. El acuerdo para la renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) se est¨¢ resistiendo dos semanas despu¨¦s de la reuni¨®n de Pedro S¨¢nchez y Alberto N¨²?ez Feij¨®o en La Moncloa por algunas posiciones ¡°enquistadas¡± entre las dos partes, seg¨²n fuentes del PP. En el Gobierno insisten en que la negociaci¨®n no est¨¢ ¡°parada¡±, pero admiten que s¨ª se ha llegado a los puntos m...
La negociaci¨®n avanza m¨¢s lenta de lo previsto. El acuerdo para la renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) se est¨¢ resistiendo dos semanas despu¨¦s de la reuni¨®n de Pedro S¨¢nchez y Alberto N¨²?ez Feij¨®o en La Moncloa por algunas posiciones ¡°enquistadas¡± entre las dos partes, seg¨²n fuentes del PP. En el Gobierno insisten en que la negociaci¨®n no est¨¢ ¡°parada¡±, pero admiten que s¨ª se ha llegado a los puntos m¨¢s sensibles, y ah¨ª est¨¢ costando mucho m¨¢s avanzar. Nadie piensa de momento en que vaya a frustrarse, y las conversaciones no se han detenido, pero lo cierto es que la fumata blanca se est¨¢ retrasando. El Gobierno y el PP quer¨ªan haber tenido resuelto este asunto a mediados de la semana pasada, y no fue posible sobre todo porque est¨¢ costando aterrizar una soluci¨®n consensuada sobre el cambio de m¨¦todo de elecci¨®n de los vocales y por los perfiles de estos, para evitar los nombres que tienen un claro v¨ªnculo pol¨ªtico.
Un escollo evidente es el empe?o de Podemos en colocar en el CGPJ a la jueza Victoria Rosell, delegada del Gobierno para la violencia de g¨¦nero y exdiputada de este partido. Rosell sufri¨® las maniobras del juez Salvador Alba, que ha sido condenado a seis a?os y medio de c¨¢rcel por conspirar contra ella, una condena ratificada por el Supremo, y Podemos quiere que est¨¦ en el CGPJ como un s¨ªmbolo por esa resistencia. Pero el PP rechaza cualquier perfil muy pol¨ªtico y es casi imposible que acepte a Rosell, con lo que Unidas Podemos tendr¨¢ que plantear una alternativa o corre el riesgo de quedarse fuera de la negociaci¨®n o tensionar mucho el Gobierno. La batalla parece m¨¢s un pulso interno en Unidas Podemos que algo relacionado con el CGPJ, porque ya en 2021, en la ¨²ltima negociaci¨®n frustrada, este grupo hab¨ªa aceptado que Rosell no entrara.
Tras un par¨®n el fin de semana, los negociadores retoman los contactos este lunes y entran en la fase final. Nadie descarta que todo se acelere y se cierre en pocas horas. Las dos partes esperan el acuerdo y admiten que ¡°o se hace ahora, o no se hace¡±. La ocasi¨®n es ¨²nica, por la presi¨®n que ha generado la dimisi¨®n de Carlos Lesmes, presidente del CGPJ y del Tribunal Supremo, y ambos grupos esperan aprovecharla.
El Gobierno y el PP insisten en que esta vez es la definitiva, que quieren llegar a un acuerdo y que van a poner todo de su parte para conseguirlo. Los populares reconocen la ¡°buena disposici¨®n¡± y el ¡°esp¨ªritu constructivo¡± con los que se sigue abordando la negociaci¨®n, y en la c¨²pula del PP subrayan que por ellos no va a quedar y que si el Ejecutivo quiere, habr¨¢ consenso. Ahora bien, el diablo est¨¢ en los detalles y la ¨²ltima fase siempre es la m¨¢s delicada, porque es donde se abordan los temas m¨¢s espinosos, que suelen dejarse para el final. En estos momentos, seg¨²n fuentes del PP, hay tambi¨¦n ¡°posiciones enquistadas¡± que tienen que salvarse para poder anunciar que han sellado un acuerdo.
La clave est¨¢ en c¨®mo encontrar una soluci¨®n que contente a las dos partes sobre el cambio de m¨¦todo de elecci¨®n de los vocales del Consejo, teniendo en cuenta que el Gobierno es contrario a reformarlo. La propuesta del PP es que el nuevo Consejo elabore un informe en un plazo de seis meses sobre c¨®mo modificar el sistema, que despu¨¦s deber¨ªa abordarse en una ponencia creada al efecto en la Comisi¨®n de Justicia del Congreso. El PP cree que el Ejecutivo no deber¨ªa tener tan dif¨ªcil aceptar esta f¨®rmula porque el nuevo Consejo ser¨¢ de mayor¨ªa progresista y, por tanto, el informe que elabore no tendr¨ªa por qu¨¦ disgustar al PSOE, pero los populares encuentran a los socialistas ¡°enrocados¡± en oponerse a un cambio de modelo. El Ejecutivo parece dispuesto a aceptar que se elabore ese informe, siempre que quede claro que no es vinculante porque la iniciativa legislativa queda en manos del Congreso. Los populares reclaman garant¨ªas de que no ser¨¢ un brindis al sol.
El Gobierno argumenta, en cambio, que reformar el sistema para que los jueces elijan en exclusiva a sus pares abocar¨ªa a que siempre dominara una mayor¨ªa conservadora en el CGPJ, porque hay muchos m¨¢s jueces conservadores que progresistas en la carrera judicial, mientras el PP contrapone que Europa demanda avances en ese sentido. Alberto N¨²?ez Feij¨®o ha modulado la posici¨®n del PP y ha dejado de reclamar una reforma legal, como hac¨ªa su predecesor Pablo Casado, pero s¨ª pide que los jueces ¡°tengan un peso determinante¡± en la elecci¨®n de los 12 vocales de los 20 que son magistrados. El nudo gordiano es encontrar un mecanismo que sirva a ambas partes para defender que su posici¨®n no ha quedado barrida por la otra. Los negociadores creen que es posible, y el modelo est¨¢ perfilado alrededor de ese informe no vinculante del CGPJ sobre una posible reforma del sistema de elecci¨®n, pero se negocia cada coma porque de lo que se firme ahora puede depender lo que pase en los pr¨®ximos a?os, sobre todo en el caso de que haya un cambio de mayor¨ªas en el Congreso que permita por ejemplo que PP y Vox puedan cambiar el sistema.
La inc¨®gnita es qui¨¦n ceder¨¢ m¨¢s en este punto. Feij¨®o ha transmitido a los suyos que no har¨¢ un pacto a cualquier precio, pero seg¨²n fuentes de la c¨²pula tambi¨¦n les ha recordado que el PP ¡°no es Gobierno¡±, lo que indica que asume que no puede imponer una reforma legal. El l¨ªder del PP tiene que resistir las presiones que le llegan por el lado derecho de su propio partido ¨Dde la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso¨D y de la prensa conservadora para que no transija m¨¢s de la cuenta.
El caso del juez Jos¨¦ Ricardo de Prada tambi¨¦n es un asunto delicado. Seg¨²n la propuesta que el PP hizo p¨²blica en el mes de julio, este magistrado, uno de los que conden¨® al PP como part¨ªcipe a t¨ªtulo lucrativo en el caso G¨¹rtel, tampoco podr¨ªa formar parte del nuevo Consejo, porque entr¨® en la terna como jurista y ahora es juez en activo. Pero algunas fuentes populares admiten que, aunque De Prada ¡°levanta muchas ampollas en el PP, no es f¨¢cil ponerle objeciones¡±. Sin embargo, este magistrado ya no parece esta vez ser una de las exigencias de Unidas Podemos, como lo era en 2021, porque el propio juez no parece especialmente interesado. En esta ocasi¨®n Podemos ha hecho bandera de Rosell, y no de De Prada.
A pesar de las dificultades, todas las fuentes coinciden en que hay voluntad real de acuerdo y es altamente probable que el pacto salga. ¡°Si la negociaci¨®n se ha mantenido hasta ahora es porque habr¨¢ acuerdo. A estas alturas, si no sale, las dos partes quedar¨ªan fatal¡±, analiza un dirigente del PP. ¡°El Gobierno quedar¨ªa mal con Europa y el PP aparecer¨ªa como que sigue bloqueando, a ninguno de los dos les interesa que no salga¡±. Desde el Gobierno tambi¨¦n transmiten que ser¨ªa un fiasco absoluto que no se cerrara esta vez y creen que la dimisi¨®n de Lesmes ha puesto al PP contra las cuerdas y por eso es muy dif¨ªcil que esta vez no vaya adelante. Al mismo tiempo, ya van cuatro a?os de par¨¢lisis y el delicad¨ªsimo pacto del CGPJ ha fracasado antes unas cuantas veces. En los pr¨®ximos d¨ªas se resolver¨¢ todo.
Feij¨®o se acerca a Ayuso
En la negociaci¨®n para renovar el Consejo General del Poder Judicial, el l¨ªder del PP tiene la presi¨®n en casa. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha aprovechado que Alberto N¨²?ez Feij¨®o negocia con el Gobierno un pacto sobre este asunto para presionarle en contra de un acuerdo que la derecha m¨¢s beligerante con el Ejecutivo rechaza. En el equipo de Feij¨®o son conscientes de que Ayuso juega sus cartas para erigirse en la representante de la posici¨®n m¨¢s cr¨ªtica de la derecha, pero el l¨ªder popular hace de tripas coraz¨®n y este lunes compartir¨¢ acto con ella. Clausuran la segunda convenci¨®n sectorial del PP, centrada en los j¨®venes, que el partido celebra en Madrid.
Feij¨®o y Ayuso pronunciar¨¢n sendos discursos en el acto, que ser¨¢n mirados con lupa por si revelan o no diferencias. La presidenta madrile?a se ha encargado de subrayar en los ¨²ltimos d¨ªas que tiene reticencias sobre que el PP firme un acuerdo con el Gobierno para renovar el CGPJ. ¡°Solo hay algo m¨¢s peligroso y da?ino que un Tezanos [Jos¨¦ F¨¦liz Tezanos, presidente del CIS] que arremete contra el necesario l¨ªder de la oposici¨®n y fabrica mensajes todos los d¨ªas contra ¨¦l para que lo repliquen los ministros sin pudor alguno y es llenar el Poder Judicial de Tezanos disfrazados de jueces¡±, dijo el jueves mientras las conversaciones continuaban. Unos d¨ªas antes, hab¨ªa advertido del ¡°peligro¡± en el que a su juicio se encuentra la independencia judicial. ¡°La verdad procesal no puede confundirse con el resultado de las urnas ni las componendas postelectorales¡±, alert¨® Ayuso de forma cr¨ªptica sugiriendo que desaprueba pactar los miembros del consejo con el PSOE.
De momento, Feij¨®o reacciona a ese tipo de provocaciones de la l¨ªder madrile?a con indiferencia y evita cualquier confrontaci¨®n con ella. Al contrario, despu¨¦s de esos mensajes que Ayuso ha lanzado mientras el l¨ªder del PP afronta la delicada negociaci¨®n del CGPJ, Feij¨®o compartir¨¢ un acto de partido con ella mano a mano. La convenci¨®n est¨¢ pensada sobre un asunto que nada tiene que ver con el Poder Judicial, la juventud, pero ser¨¢ ocasi¨®n tambi¨¦n para testar sus diferencias ideol¨®gicas. La l¨ªder madrile?a se ha manifestado a favor de permitir a las menores de edad el aborto sin consentimiento paterno, mientras el presidente del PP defiende que este sea obligatorio.