La c¨²pula judicial, a la espera del acuerdo entre PSOE y PP para frenar la deriva del Consejo
El Supremo rechaza suspender por la v¨ªa urgente la designaci¨®n de Rafael Mozo como presidente suplente del CGPJ
Las ceremonias de toma de posesi¨®n de magistrados y fiscales del Tribunal Supremo son actos tan reglados y ceremoniosos que parecen de otro tiempo. Cuando minutos antes se abren las puertas del sal¨®n de plenos del alto tribunal, decenas de togas negras se van desplegando por la sala: en el centro del estrado, el presidente, escoltado por la sala de gobierno; a los lados, una representaci¨®n de magistrados del Supremo y de la Fiscal¨ªa; en el centro, el secretario de gobierno. El protagonista espera fuera a que quienes ejercen de padrinos (dos magistrados o fiscales del Supremo) reciban el permiso del presidente para salir de la sala y acompa?arle dentro para jurar o prometer el cargo. Apenas hay margen para la improvisaci¨®n. Pero este martes, las tomas de posesi¨®n de Ana Garc¨ªa Le¨®n, nombrada fiscal jefa de la Secretar¨ªa T¨¦cnica de la Fiscal¨ªa General del Estado, y de Dolores Delgado, nueva fiscal de Sala de la Fiscal¨ªa Togada del Supremo, han hecho visible el caos en el que anda sumida la c¨²pula del Poder Judicial.
El presidente en funciones del Supremo, Francisco Mar¨ªn Cast¨¢n, ha ocupado el sitio que hasta ahora correspond¨ªa a Carlos Lesmes, quien dimiti¨® la semana pasada. La Sala de Gobierno, los magistrados del alto tribunal y los representantes de la Fiscal¨ªa se han sentado, como siempre, en los sitios reservados para ellos haciendo una especie de letra u. Y en medio, cerca de la presidencia, pero fuera del estrado, un sill¨®n parec¨ªa saltarse el protocolo. Era el asiento reservado para Rafael Mozo, presidente suplente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), un cargo tan inusual como la escenograf¨ªa que ha acompa?ado su estreno despu¨¦s de que el pleno del ¨®rgano de gobierno de los jueces lo designara el jueves para sustituir a Lesmes al frente de ese ¨®rgano en contra del criterio del gabinete jur¨ªdico, que se?al¨® que Mar¨ªn Cast¨¢n deb¨ªa relevar al presidente dimitido tanto en el Supremo como en el CGPJ.
La designaci¨®n de Mozo salv¨® el martes el primer examen al que se enfrentaba a ra¨ªz del recurso planteado por el vocal Wenceslao Olea (el ¨²nico que vot¨® en contra del acuerdo para aupar al vocal m¨¢s antiguo a presidente suplente) y por el secretario general del ¨®rgano, Jos¨¦ Luis de Benito. Ambos hab¨ªan pedido a la Sala de lo Contencioso-administrativo del Supremo que revocara por la v¨ªa urgente esa elecci¨®n, pero el tribunal ha descartado esta posibilidad porque considera que no se dan los criterios para aceptar la suspensi¨®n cautelar¨ªsima (sin escuchar a la otra parte), lo que implica que se mantenga vigente, de momento, el pacto suscrito por la mayor¨ªa de vocales del CGPJ.
El tribunal ha abierto una pieza de medidas cautelares en la que se escuchar¨¢ al Consejo antes de decidir si se suspende la designaci¨®n hasta que se decida sobre el fondo del asunto (la legalidad o no de la elecci¨®n de Mozo como sustituto de Lesmes en el CGPJ). Fuentes jur¨ªdicas se?alan que, no obstante, si antes de que se decida sobre las cautelares el PSOE y el PP llegan a un acuerdo para renovar el ¨®rgano, lo previsible es que el recurso pierda efecto y no llegue a deliberarse. Es en lo que conf¨ªan tanto magistrados del Supremo consultados como los vocales del Consejo: que esta vez no surja ninguna condici¨®n ni impedimento en el ¨²ltimo momento y en los pr¨®ximos d¨ªas se anuncie un acuerdo para renovar el CGPJ.
Jueces que han estado presentes en el acto en el que por primera vez se ha visualizado la bicefalia que preside la c¨²pula judicial se?alan que el ambiente ha sido ¡°cordial¡± y que el protocolo se ha intentado adaptar a las circunstancias ¡°con naturalidad¡±. Pero la situaci¨®n, advierten, es de ¡°extrema gravedad¡± y la soluci¨®n a la que se ha llegado est¨¢ pensada para el corto plazo. No solo la elecci¨®n de Mozo como presidente suplente del CGPJ, sino tambi¨¦n la designaci¨®n de forma autom¨¢tica de Mar¨ªn Cast¨¢n al frente del alto tribunal. ¡°Un presidente del Supremo tiene que ser elegido por el Consejo, eso es lo que dice la ley. Pero en este caso no es as¨ª. Nada es normal y no debe prolongarse m¨¢s¡±, advierte un magistrado del ¨®rgano judicial.
La designaci¨®n de Mozo ha cerrado el debate en el CGPJ sobre qui¨¦n deb¨ªa ponerse al frente, pero aunque la decisi¨®n se acordara con una amplia mayor¨ªa (16 votos a uno), la realidad es que hay tres miembros del Consejo (Olea, De Benito y la vocal Mar Cabrejas, que abandon¨® el pleno sin votar) que la consideran ¡°ilegal¡±, lo que, admiten miembros del ¨®rgano, a?ade tensi¨®n sobre la instituci¨®n.
Las presidencias suplentes son la ¨²ltima consecuencia, por ahora, del retraso de casi cuatro a?os en la renovaci¨®n del ¨®rgano de gobierno de los jueces. Magistrados del Supremo aseguran que para el funcionamiento normal del tribunal afectan m¨¢s las vacantes que se han producido como consecuencia de la reforma legal de 2021, que impide al Consejo hacer nombramientos discrecionales mientras est¨¦ en funciones. Ya son 15 las plazas vac¨ªas y en los pr¨®ximos d¨ªas se sumar¨¢ la de la presidenta de la Sala Cuarta (Social), Mar¨ªa Luisa Segoviano, que entra en situaci¨®n de jubilaci¨®n forzosa al cumplir 72 a?os. La sala que tiene la ¨²ltima palabra en material laboral se quedar¨¢ solo con ocho magistrados (deber¨ªa tener 12 m¨¢s el presidente).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.