Pedro S¨¢nchez busca razones para animar a su partido y al electorado

Gesti¨®n. Medidas para las cada vez m¨¢s amplias capas sociales tocadas por la inflaci¨®n. Iniciativas ¡°como pa¨ªs¡± ante la UE para la multiplicidad de crisis derivadas de la guerra en Ucrania. Y voluntad de dar pasos para converger con la parte del independentismo catal¨¢n que haya apartado de su hoja de ruta las medidas unilaterales. Este es el camino que ha emprendido Pedro S¨¢nchez hasta llegar a diciembre de 2023, cuando tocan las elecciones generales. El probl...

Gesti¨®n. Medidas para las cada vez m¨¢s amplias capas sociales tocadas por la inflaci¨®n. Iniciativas ¡°como pa¨ªs¡± ante la UE para la multiplicidad de crisis derivadas de la guerra en Ucrania. Y voluntad de dar pasos para converger con la parte del independentismo catal¨¢n que haya apartado de su hoja de ruta las medidas unilaterales. Este es el camino que ha emprendido Pedro S¨¢nchez hasta llegar a diciembre de 2023, cuando tocan las elecciones generales. El problema radica en que los dif¨ªciles equilibrios y malabarismos legislativos y jur¨ªdicos que ha iniciado tienen que ser aceptados no solo por su potencial electorado (y el de sus socios), sino tambi¨¦n por el PSOE.

Las denuncias de la oposici¨®n no alterar¨¢n la agenda de S¨¢nchez. Tras ser tildado de ¡°aprendiz de dictador¡±, acusado de llevar a Espa?a hacia una dictadura y de ser es un presidente ileg¨ªtimo, la reacci¨®n de S¨¢nchez se ha alejado de respuestas dram¨¢ticas. La hip¨¦rbole solo le ha sugerido respuestas ir¨®nicas, con envoltorio humor¨ªstico.

No pasar¨¢n desapercibidas las confesiones que hizo ayer en Barcelona, donde S¨¢nchez mostr¨® las razones por las que ha tomado decisiones que han llevado la zozobra a su partido y han desconcertado a parte del electorado. La miscel¨¢nea de iniciativas legislativas, alejadas del procedimiento ortodoxo aunque formalmente aceptadas (con enmiendas que modifican delitos en el C¨®digo Penal), tienen para ¨¦l su raz¨®n de ser. Junto a Jaume Collboni, candidato al Ayuntamiento de Barcelona; el primer secretario del PSC, Salvador Illa, ganador de las ¨²ltimas elecciones en Catalu?a (con quien forj¨® lazos afectivos y pol¨ªticos fuertes cuando era ministro de Sanidad, durante la pandemia), y su amigo Miquel Iceta, ministro de Cultura, reconoci¨® lo que el PSC ya sabe: que la decisi¨®n de favorecer a los condenados del proc¨¦s, y mejorar la vida a los que a¨²n no ha sido juzgados, obedece a la necesidad de concordia dentro y fuera de Catalu?a.

Nadie le obliga; ERC no le fuerza. En ¨¢mbitos socialistas de primer nivel se sostiene que S¨¢nchez no est¨¢ amarrado por los republicanos. Hubiera podido continuar el a?o de legislatura que resta sin el apoyo del partido que lidera Oriol Junqueras. ¡°Hemos tomado una decisi¨®n pol¨ªtica de primer nivel, para sacar a Catalu?a de la crispaci¨®n y el enfrentamiento. Las decisiones que tenemos que tomar son arriesgadas. Lo s¨¦, pero hay que hacerlo para aportar concordia y unidad entre todos territorios¡±, confes¨® ayer. No hay ambages: busca entendimiento con el independentismo que no quiere la ruptura.

Para ello, el Gobierno ha adoptado y va a seguir tomando medidas arriesgadas. ¡°Si hoy trabajamos por la concordia es para que no vuelvan a producirse esos d¨ªas tristes y aciagos¡±, en referencia a la declaraci¨®n unilateral de independencia y al refer¨¦ndum ilegal del 1-O. En esta senda no estar¨¢n parte de quienes estuvieron en esas acciones fuera de la legalidad. Junts per Catalunya desprecia todas las acciones legislativas del PSOE, dado que su reconocimiento ser¨ªa tanto como aceptar que algo no hicieron bien. No va con ellos ni la supresi¨®n del delito de sedici¨®n ni la rebaja de penas por malversaci¨®n, medidas que han puesto a S¨¢nchez al pie de los caballos dentro y fuera de su partido.

Seguir¨¢ adelante con la reforma de la malversaci¨®n, pero sin atender la literalidad de la enmienda de ERC. La distinci¨®n de los republicanos entre si hay lucro personal y beneficio de terceros se queda muy corta para el Gobierno. La enmienda a la enmienda, en la que se ha trabajado este fin de semana, persigue un equilibrio jur¨ªdico, pero tambi¨¦n que los socialistas de toda Espa?a, sobre todo los cargos p¨²blicos, presidentes auton¨®micos, alcaldes, y cuadros socialistas, no tengan que bajar la cabeza. La oposici¨®n conservadora, sea cual sea el resultado legal, ha grabado a fuego que S¨¢nchez despenaliza a los corruptos.

El PP denunciar¨¢ en Europa que el Gobierno se aleja de los valores democr¨¢ticos al anunciar el cambio legal para que se levante el bloqueo para la renovaci¨®n del Poder Judicial. En el Ejecutivo no muestran especial preocupaci¨®n ante este nuevo anuncio del partido de Alberto N¨²?ez Feij¨®o. El l¨ªder socialista a¨²n se recreaba ayer del resultado de la reuni¨®n celebrada en Alicante dos d¨ªas antes con los presidentes de Francia, Emmanuel Macron; Portugal, Ant¨®nio Costa, y el vicepresidente italiano, Antonio Tajani, junto a la presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen. Uno tras otro deleitaron el o¨ªdo de S¨¢nchez en esta cumbre euromediterr¨¢nea con la tuber¨ªa que unir¨¢ Barcelona con Marsella para transportar hidr¨®geno; un corredor verde de energ¨ªa que puede convertir a Espa?a en referente energ¨¦tico europeo. Y ahora s¨ª, el Gobierno va a tomar medidas para contener los precios, con la misma filosof¨ªa que pretendi¨® la vicepresidenta tercera, Yolanda D¨ªaz.

Estas son las bazas de Pedro S¨¢nchez, rodeadas de enormes dificultades, como la desuni¨®n de la izquierda a la izquierda del PSOE, que puede hacer del todo imposible una mayor¨ªa de izquierda tras las pr¨®ximas elecciones. Y con Feij¨®o reclamando elecciones anticipadas y proclamas de que Espa?a va camino de una dictadura. En su entorno se?alan que estas acusaciones no son serias ni en Espa?a ni en ning¨²n lugar de Europa.