Junts salva a S¨¢nchez mientras Podemos tumba el aumento del subsidio de desempleo de D¨ªaz
Puigdemont ordena a los suyos no votar para evitar una derrota dura del PSOE, pero el grupo de Belarra consuma su guerra con Sumar y une su ¡°no¡± al del PP y Vox y exige un nuevo decreto
Una vez m¨¢s, la baraka de Pedro S¨¢nchez hizo su aparici¨®n cuando todo parec¨ªa perdido. Fue una de las jornadas m¨¢s rocambolescas que se recuerdan en el Parlamento, y deja un importante desgaste para la mayor¨ªa, pero de nuevo el presidente se salv¨® por la m¨ªnima y lo exhibi¨® como un ¨¦xito, con todos sus diputados aplaudi¨¦ndole. En el ¨²ltimo momento, despu¨¦s de hacer un discurso que apuntaba hacia el no, Junts decidi¨® salvar los decretos del Gobierno ¡ªque inclu¨ªan el llamado escudo social, la revalorizaci¨®n de las pensiones o el transporte gratuito para j¨®venes, menores y desempleados¡ª con un mo...
Una vez m¨¢s, la baraka de Pedro S¨¢nchez hizo su aparici¨®n cuando todo parec¨ªa perdido. Fue una de las jornadas m¨¢s rocambolescas que se recuerdan en el Parlamento, y deja un importante desgaste para la mayor¨ªa, pero de nuevo el presidente se salv¨® por la m¨ªnima y lo exhibi¨® como un ¨¦xito, con todos sus diputados aplaudi¨¦ndole. En el ¨²ltimo momento, despu¨¦s de hacer un discurso que apuntaba hacia el no, Junts decidi¨® salvar los decretos del Gobierno ¡ªque inclu¨ªan el llamado escudo social, la revalorizaci¨®n de las pensiones o el transporte gratuito para j¨®venes, menores y desempleados¡ª con un movimiento muy at¨ªpico y que mantuvieron en secreto varias horas: sus siete diputados no votaron, algo que funcion¨® como una abstenci¨®n y permiti¨® que saliera adelante el primer decreto por 172 a 171, un solo voto. Sin embargo, pese a que Junts mantuvo esta estrategia en las cuatro votaciones que hab¨ªa este mi¨¦rcoles, el ¡°no¡± de Podemos se sum¨® al del PP, Vox y UPN para tumbar el segundo decreto ¡ª176 noes frente a 167 s¨ªes¡ª, el que defendi¨® Yolanda D¨ªaz, l¨ªder de Sumar y enemiga declarada de la formaci¨®n de Ione Belarra, que supon¨ªa un gran aumento del subsidio de desempleo, de 480 euros a 570 en los primeros seis meses y a 540 euros los seis siguientes (y sea compatible con los primeros 150 d¨ªas de trabajo).
Podemos consum¨® as¨ª el golpe a D¨ªaz en la primera votaci¨®n en la que tuvo ocasi¨®n, mientras apoyaba los dem¨¢s decretos despu¨¦s de una negociaci¨®n con los socialistas. La p¨¦sima relaci¨®n entre Sumar y Podemos despu¨¦s de que los de Belarra no lograran ning¨²n ministerio tuvo as¨ª su primera consecuencia con efectos pr¨¢cticos sobre m¨¢s de 700.000 perceptores del subsidio, que de momento no ver¨¢n aumentada su cuant¨ªa. Podemos exige que se vuelva a presentar el decreto sin la reducci¨®n de la cotizaci¨®n de los perceptores de m¨¢s de 52 a?os, que seg¨²n Trabajo se ha hecho para evitar que, con la subida del salario m¨ªnimo, se cotice m¨¢s estando sin empleo que con ¨¦l, un sinsentido. ¡°Es una grav¨ªsima irresponsabilidad, han votado con la derecha y la extrema derecha¡±, dijo D¨ªaz en Onda Cero sobre Podemos. S¨¢nchez pidi¨® a los de Belarra que valoren su decisi¨®n de tumbar un decreto que seg¨²n ¨¦l implica mejoras claras en el subsidio y apunt¨® que el Gobierno sacar¨¢ esta medida adelante en las Cortes en cuanto pueda, aunque no dio fechas.
Junts decidi¨® al final no votar, seg¨²n un comunicado oficial de esta formaci¨®n, porque el PSOE se ha comprometido con ellos a traspasar a Catalu?a las competencias en inmigraci¨®n a trav¨¦s de una ley, la publicaci¨®n inmediata de las llamadas balanzas fiscales y la supresi¨®n del art¨ªculo 43 bis de la ley de enjuiciamiento civil que iba en el primer decreto, el ¨®mnibus, que seg¨²n la interpretaci¨®n de Junts ¡°pon¨ªa en peligro la ley de amnist¨ªa¡±. Adem¨¢s, Junts ha logrado el compromiso de que el IVA del aceite ser¨¢ del 0% y tambi¨¦n una reforma de la ley de sociedades de capital ¡°para revertir el decreto del PP de 2017 para que las empresas puedan volver a Catalu?a¡±, dice el texto, que no menciona sanciones. Adem¨¢s se multiplicar¨¢n por cinco el presupuesto para la digitalizaci¨®n de la justicia. Fuentes del PSOE confirman estos extremos, salvo el que se?ala que ¡°el Estado asumir¨¢ la totalidad del coste de las bonificaciones del precio del transporte p¨²blico¡±. Se asumir¨¢, aseguran estas fuentes, el 30%, como en todas las autonom¨ªas. Pero el resto de concesiones, mucho m¨¢s amplias de las que se hab¨ªan discutido p¨²blicamente, s¨ª son las negociadas, seg¨²n los socialistas.
S¨¢nchez obvi¨® estas concesiones, se concentr¨® en el resultado y carg¨® contra el PP: ¡°Ya dije que para revalorizar las pensiones buscar¨ªa votos debajo de las piedras. El PP dijo que estaba a favor de revalorizar las pensiones y ha vuelto a votar en contra. Esta oposici¨®n tiene que preguntarse para qu¨¦ est¨¢ en pol¨ªtica. ?Para ilegalizar partidos pol¨ªticos?¡±, dijo visiblemente satisfecho, como si nada hubiera pasado.
Pero durante el d¨ªa la angustia del Gobierno fue evidente y la tarde estuvo llena de sorpresas. La votaci¨®n esta vez no ha sido presencial, porque la sesi¨®n no es el Congreso, que est¨¢ de obras, sino en el Senado. Y por eso era completamente telem¨¢tica, algo que suele producir errores, como sucedi¨® con la votaci¨®n de la reforma laboral, que sali¨® adelante milagrosamente ¡ªde nuevo la baraka de S¨¢nchez¡ª por un error del diputado del PP Alberto Casero. Esta vez el error vino del otro lado, y de nuevo gracias a la fortuna del Gobierno, no tuvo las consecuencias dram¨¢ticas que supuso para el PP de Pablo Casado. Algunos populares a¨²n creen que ah¨ª empez¨® el hundimiento del l¨ªder del PP, que acabar¨ªa dimitiendo solo un mes despu¨¦s. Esta vez, de nuevo, la mayor¨ªa progresista tuvo suerte y el error del diputado de Sumar Gerardo Pisarello, que no vot¨® a partir del tercer decreto en discusi¨®n, provoc¨® un empate que implicaba repetir la votaci¨®n.
Si hubiera habido dos errores as¨ª, se habr¨ªa perdido la votaci¨®n y no habr¨ªa soluci¨®n. Pero el empate abr¨ªa la puerta a resolver la situaci¨®n. El PP y Vox intentaron complicar la vida al Gobierno y pidieron r¨¢pidamente que la repetici¨®n se hiciera a mano alzada, para ver si alguien fallaba, incluido el presidente, que estaba en La Moncloa. Pero la presidenta del Congreso, la socialista Francina Armengol, decidi¨® r¨¢pidamente conceder una hora de tiempo para que todo el mundo, incluido el presidente, tuviera tiempo para llegar. Y S¨¢nchez sali¨® a toda prisa desde La Moncloa y se present¨® inmediatamente en el Senado: era inimaginable que se perdiera la votaci¨®n por su culpa. Con la repetici¨®n, ya no hubo errores, y Junts s¨ª particip¨® en la votaci¨®n para abstenerse, por lo que volvi¨® el 172-171 y el Ejecutivo sac¨® as¨ª el otro decreto, el del escudo social, y otras dos votaciones. De hecho, el movimiento del PP ayud¨® a S¨¢nchez, que no solo tuvo un aplauso y pudo vender la imagen de ¨¦xito despu¨¦s de una jornada ag¨®nica, sino que adem¨¢s, al entrar Junts al hemiciclo ¡ªesta vez s¨ª vot¨® presencialmente¡ª apoy¨® el techo de gasto y hubo una votaci¨®n de 179 esca?os a favor del Gobierno como colof¨®n de la jornada.
Tobog¨¢n de emociones
El d¨ªa fue una especie de tobog¨¢n permanente de emociones tanto en el Gobierno como en la oposici¨®n. Desde primera hora de la ma?ana, el PP y Vox olfateaban la posibilidad de una derrota clamorosa de S¨¢nchez en su primera prueba de fuego menos de dos meses despu¨¦s de lograr la investidura con los votos de ocho grupos. El tono del arranque de F¨¦lix Bola?os, el principal negociador de estos decretos, era especialmente dram¨¢tico. Lleg¨® a decir a todos los diputados que estaban en el no ¡ªen ese momento Junts insist¨ªa en que se contaba entre ellos¡ª que ¡°los pensionistas que les han votado deben saber que con su no est¨¢n evitando la subida y provocando un recorte, una congelaci¨®n de las pensiones¡±. En las bancadas de la derecha murmuraban indignados, pero a la vez pensaron que este tono era antesala de una gran derrota del Ejecutivo. ¡°Valle Incl¨¢n est¨¢ escribiendo hoy su pr¨®xima novela. Esto es un esperpento¡±, se burlaba por los pasillos Alberto N¨²?ez Feij¨®o, que insist¨ªa en que Carles Puigdemont estaba exhibiendo desde Bruselas su capacidad de ¡°humillar¡± al Gobierno al mantenerle en vilo todo el d¨ªa. ¡°Si hubiese sabido que esto era la pol¨ªtica no me habr¨ªa dedicado a ella. Mi pa¨ªs no se merece este desgobierno, esta deshonra, el Gobierno ha hecho el rid¨ªculo mercadeando con los derechos de todos los espa?oles¡±, lleg¨® a decir por la tarde el l¨ªder del PP en una comparecencia ante los medios.
F¨¦lix Bola?os, Santos Cerd¨¢n y Mar¨ªa Jes¨²s Montero entraban y sal¨ªan del pleno a toda velocidad, se reun¨ªan en la zona de Gobierno, se escabull¨ªan en zonas m¨¢s discretas del Senado. Las negociaciones se multiplicaban mientras Miriam Nogueras, la portavoz de Junts, decid¨ªa no intervenir en los primeros decretos para mantener a¨²n m¨¢s el suspense. Yolanda D¨ªaz tambi¨¦n se mov¨ªa para intentar que su decreto no decayera. Estaba esperando el s¨ª o la abstenci¨®n de Junts para intentar rematar la negociaci¨®n con Podemos, a quien ya le hab¨ªan ofrecido la posibilidad de negociar su reforma a trav¨¦s de una enmienda en la tramitaci¨®n como proyecto de ley. Pero Podemos, despu¨¦s de un ¨²ltimo intento de Trabajo que trat¨® de convocar una reuni¨®n sin ¨¦xito, a las 14.30, dio el no definitivo y con ello garantiz¨® la muerte del decreto de D¨ªaz, una venganza pol¨ªtica clara despu¨¦s de la ruptura entre los dos grupos que se consum¨® cuando los de Belarra decidieron ir al Grupo Mixto. Podemos dio un salto hasta ahora desconocido y vot¨® ¡°no¡± con el PP y Vox, y adem¨¢s rompi¨® otra tradici¨®n: se desmarc¨® de ERC y Bildu ¡ªque afe¨® la posici¨®n de los de Belarra¡ª que s¨ª apoyaron el texto, lo que dej¨® a¨²n m¨¢s solo a este grupo con la oposici¨®n.
El Gobierno trasladaba en todo momento mucha inquietud, sobre todo despu¨¦s de que Nogueras en la tribuna diera a entender que rechazar¨ªan los tres decretos. ¡°Hagan un decreto sin trampas y tendr¨¢n nuestros votos¡±, lleg¨® a decir mientras oficialmente Junts insist¨ªa en que iban a rechazar los decretos e incluso planteaban que hubiera inmediatamente un Consejo de Ministros extraordinario para rehacerlos, algo que habr¨ªa sido un golpe a¨²n m¨¢s duro para la imagen de S¨¢nchez. Bola?os y Montero abandonaban el hemiciclo con caras visiblemente agotadas, despu¨¦s de una larga noche de negociaci¨®n, y parec¨ªa que la suerte del Gobierno estaba echada. Incluso alg¨²n diputado de Junts enga?aba a los periodistas diciendo que hab¨ªan votado en contra y algunos medios lo daban por hecho. Pero no era as¨ª. Junts no hab¨ªa votado, algo que tiene el mismo efecto pr¨¢ctico que la abstenci¨®n.
S¨¢nchez se salvaba una vez m¨¢s. Pero la jornada no es una m¨¢s. Deja heridas importantes en la mayor¨ªa. Reabre la herida sangrante entre Sumar y Podemos, que se convierte as¨ª en un problema importante para el Ejecutivo que necesita sus cinco votos para todo ¡ªaunque tambi¨¦n puede suponer un gran desgaste para Podemos, que provoca as¨ª que 700.000 personas se queden con un subsidio menor¡ª. Y tambi¨¦n complica la desconfianza entre el PSOE y Junts, que les hizo sufrir todo el d¨ªa y dio as¨ª una baza a la oposici¨®n. Algunos miembros del Gobierno creen que este d¨ªa marcar¨¢ un antes y un despu¨¦s, porque nadie imagina una legislatura con este infierno parlamentario en cada votaci¨®n. S¨¢nchez logr¨® salvar los muebles, y eso es lo importante para un resistente como ¨¦l, pero muchos en el Ejecutivo creen que hay que repensar las cosas para evitar que esta tortura se convierta en la norma.