El Gobierno y Junts buscan f¨®rmulas para que los ¡®mossos¡¯ participen en el control de fronteras
Ambas partes intentan ahora rematar el acuerdo para allanar la negociaci¨®n de los Presupuestos
La situaci¨®n entre el Gobierno y Junts ha sufrido un cambio muy relevante esta semana, despu¨¦s del acuerdo para el decreto de las pensiones que desbloquea su relaci¨®n. Todo se paraliz¨® en diciembre, despu¨¦s de un pacto muy importante para el paquete fiscal, cuando Carles Puigdemont plante¨® una proposici¨®n no de ley para instar al presidente, Pedro S¨¢nchez, a presentar una cuesti¨®n de confianza. S¨¢nchez dijo que por ah¨ª no pas...
La situaci¨®n entre el Gobierno y Junts ha sufrido un cambio muy relevante esta semana, despu¨¦s del acuerdo para el decreto de las pensiones que desbloquea su relaci¨®n. Todo se paraliz¨® en diciembre, despu¨¦s de un pacto muy importante para el paquete fiscal, cuando Carles Puigdemont plante¨® una proposici¨®n no de ley para instar al presidente, Pedro S¨¢nchez, a presentar una cuesti¨®n de confianza. S¨¢nchez dijo que por ah¨ª no pasaba y los dos l¨ªderes mantuvieron el pulso m¨¢s de un mes hasta que el pasado fin de semana, con mediaci¨®n de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero incluida, se encontr¨® una salida intermedia: se tramitar¨¢ la iniciativa, pero con una redacci¨®n en la que Junts pide al presidente que ¡°considere la oportunidad¡± de presentar la cuesti¨®n de confianza, una f¨®rmula m¨¢s suave y que deja toda la decisi¨®n en sus manos, como marca la Constituci¨®n, adem¨¢s de dejar claro que se trata de una iniciativa de ¡°car¨¢cter pol¨ªtico¡±, ¡°sin vinculaci¨®n jur¨ªdica¡±.
Despu¨¦s de este pacto, el Gobierno y Junts se concentran ahora en cerrar la ¡°delegaci¨®n integral¡± de las competencias sobre inmigraci¨®n que pactaron hace un a?o, para aprobar otro decreto ¨®mnibus en el arranque de 2024. Seg¨²n fuentes de los dos grupos, el acuerdo est¨¢ muy cerca, pero falta la letra peque?a de tres asuntos decisivos que giran alrededor de lo mismo. Se trata de la participaci¨®n de los Mossos d¡¯Esquadra en tres cuestiones muy delicadas: el control de fronteras terrestres, a¨¦reas y mar¨ªtimas, la tramitaci¨®n del NIE (n¨²mero de identificaci¨®n de extranjeros) o la entrega de documentos, como la tarjeta de identidad de extranjero, as¨ª como los procesos de expulsi¨®n, seg¨²n insisten fuentes de Junts. En el Gobierno no quieren dar detalles para no complicar la negociaci¨®n, aunque s¨ª admiten que se ha avanzado mucho y falta la letra peque?a de todas las cuestiones abiertas, incluidas estas.
Son tres asuntos muy sensibles, sobre los que el Gobierno ha asegurado en varias ocasiones que tienen que mantenerse como competencia estatal porque as¨ª lo fija la Constituci¨®n y los compromisos europeos. Junts, por su parte, insiste en que a trav¨¦s del 150.2, el art¨ªculo de la Constituci¨®n en el que se han basado buena parte de las transferencias de los ¨²ltimos a?os, se puede llegar lo lejos que pol¨ªticamente se quiera. Interior, el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska, se resiste especialmente a entregar un asunto decisivo para la seguridad nacional, tal como lo ven ellos. Pero la negociaci¨®n ha avanzado mucho, seg¨²n diversas fuentes, y se est¨¢ buscando una manera de que el Estado y la Generalitat compartan de alguna manera esas competencias.
Solo cuando se resuelva este asunto, explican distintas fuentes, se podr¨¢ pensar en abrir la carpeta de los Presupuestos, en la que Junts exige algunas premisas dif¨ªciles, como resolver antes la ejecuci¨®n de los a?os anteriores o pactar un nuevo reparto de la senda de d¨¦ficit m¨¢s favorable a las autonom¨ªas. El Gobierno tambi¨¦n busca avances en otras cuestiones complejas, como la oficialidad del catal¨¢n en la UE, algo en lo que est¨¢ trabajando el ministro de Exteriores, Jos¨¦ Manuel Albares. De momento no hay fecha para otra cuesti¨®n sensible, esto es, la reuni¨®n entre S¨¢nchez y Puigdemont. El presidente ha dicho en varias ocasiones que est¨¢ dispuesto a dar ese paso, aunque la l¨®gica pol¨ªtica se?ala que no se har¨¢ hasta que no est¨¦ la negociaci¨®n m¨¢s avanzada y con los Presupuestos en el punto de mira.
La discusi¨®n de fondo es qu¨¦ papel tienen los mossos en esas competencias que ahora ejerce de manera exclusiva el Estado. El Gobierno ha ofrecido la posibilidad de que los mossos est¨¦n en todas esas zonas sensibles, pero bajo el mando de las autoridades estatales. Pero Junts exige ir m¨¢s all¨¢ y por eso los negociadores est¨¢n buscando una f¨®rmula intermedia que pol¨ªticamente les sirva a los dos, como se ha hecho hasta ahora en todas las complejas negociaciones entre estos dos grupos, en las que siempre ceden ambos aunque despu¨¦s en la manera de venderlo p¨²blicamente pueda parecer que nadie lo ha hecho.
El Gobierno insiste en cualquier caso en que la f¨®rmula que se alcance ser¨¢ plenamente constitucional y respetuosa con los compromisos europeos de Espa?a, un pa¨ªs miembro del espacio Schengen y cuyas fronteras no son solo espa?olas, sino tambi¨¦n europeas. En cualquier caso, como se ha hecho con otras competencias, no ser¨ªa una cesi¨®n, sino una delegaci¨®n, la f¨®rmula constitucional que se ha usado en otras ocasiones, en las que formalmente el Estado no pierde la competencia. En este caso se apunta hacia una especie de delegaci¨®n compartida, es decir, una participaci¨®n de la Generalitat en colaboraci¨®n con la Administraci¨®n central. Pero en la letra peque?a est¨¢ la clave, y a¨²n no parece cerrada.
Como es habitual, el secretismo domina las conversaciones sobre este asunto tan delicado, y, por tanto, no se podr¨¢ conocer con claridad qu¨¦ se ha pactado hasta que no se haga p¨²blico el documento. Incluso despu¨¦s, siempre habr¨¢ discusi¨®n con las interpretaciones, como sucedi¨® con el acuerdo de financiaci¨®n que se alcanz¨® con ERC en verano y que abri¨® la puerta a la investidura de Salvador Illa, pero que a¨²n no se ha concretado definitivamente y llevar¨¢ tiempo para que se vean sus efectos pr¨¢cticos. Son asuntos de m¨¢xima sensibilidad pol¨ªtica, y, por tanto, se medir¨¢n con lupa las palabras del acuerdo pol¨ªtico y sus consecuencias jur¨ªdicas reales.
Se da la circunstancia at¨ªpica de que Junts est¨¢ reclamando esta competencia para la Generalitat en un asunto en el que tiene una posici¨®n muy dura contra los inmigrantes irregulares, una cuesti¨®n en la que compite electoralmente con Alian?a Catalana, un grupo independentista ultra con mensajes extremos e islam¨®fobos contra los inmigrantes, pero en realidad quien gestionar¨ªa esta competencia ahora es el socialista Salvador Illa, que es quien gobierna la Generalitat en este momento, sin participaci¨®n alguna de Junts. Por tanto, ser¨ªan los socialistas los que dirigir¨ªan esta pol¨ªtica tan sensible en Catalu?a y en la que el grupo de Carles Puigdemont ha puesto mucho ¨¦nfasis con discursos duros que en esta comunidad ¨Dy en otras¨D son cada vez m¨¢s frecuentes.