Al banquillo por ¡°ser un Pujol¡±: la familia del ¡®expresident¡¯ niega ser una organizaci¨®n criminal
El exmandatario dice que nunca favoreci¨® a los empresarios que hicieron tratos con su hijo mayor
La familia Pujol sospecha que va a sentarse en el banquillo de los acusados por ser quien es, por su apellido. En su escrito de defensa, carga con dureza contra el auto del juez de la Audiencia Nacional Jos¨¦ de la Mata, que les atribuye, entre otros, un delito de organizaci¨®n criminal. Para los abogados del expresidente catal¨¢n, de su mujer y de sus siete hijos -todos ellos procesados-, el juez no ha aportado ni una sola prue...
La familia Pujol sospecha que va a sentarse en el banquillo de los acusados por ser quien es, por su apellido. En su escrito de defensa, carga con dureza contra el auto del juez de la Audiencia Nacional Jos¨¦ de la Mata, que les atribuye, entre otros, un delito de organizaci¨®n criminal. Para los abogados del expresidente catal¨¢n, de su mujer y de sus siete hijos -todos ellos procesados-, el juez no ha aportado ni una sola prueba de ese delito. Por el contrario,¡±acude a una suerte de responsabilidad de la tribu y de derecho penal de autor (ser un Pujol)¡±.
El texto rechaza todas las acusaciones contra la familia y pide el archivo de la causa. Uno de los puntos al que dedica mayor esfuerzo argumentativo es el de delito de organizaci¨®n criminal. La defensa denuncia que el ¨²nico v¨ªnculo tangible entre los miembros de la familia es que el hijo mayor, Jordi Pujol Ferrusola, ¡°administr¨® el patrimonio conjunto¡± en Andorra entre 1992 y 2004, cuando hizo la liquidaci¨®n definitiva. La defensa sostiene que, por definici¨®n, no puede existir ese delito con un solo autor. Y a?ade que los hermanos y la madre mostraron una ¡°conducta perfectamente pasiva¡± sobre el manejo de esos fondos. Entre los Pujol, concluye, no ha habido conductas de ¡°cooperaci¨®n ni colaboraci¨®n¡±, necesarias para sostener el delito de organizaci¨®n criminal.
La familia ha defendido, desde el inicio de la investigaci¨®n -hace casi ocho a?os- que la fortuna que mantuvo oculta en Andorra durante m¨¢s de 30 a?os procede de un legado que el padre del expresident, Florenci Pujol, dej¨® a su nuera y a sus nietos. La investigaci¨®n nunca ha dado credibilidad a esa versi¨®n y sospecha que los fondos proceden de pagos de empresarios al primog¨¦nito -que luego revert¨ªan en toda la familia- a cambio de ¡°la influencia ejercida por la familia ante las autoridades¡±. El escrito denuncia que, en realidad, se ¡°desconoce¡± el origen de los fondos, por m¨¢s que el juez los atribuya (sin pruebas, en su opini¨®n) a ¡°pagos il¨ªcitos¡±.
La defensa de los Pujol es un ataque directo contra la labor judicial. No hay ¡°atisbo de indicios¡±, sino solo una ¡°impactante adjetivaci¨®n¡± que la hace ¡°merecedora de lustrosos titulares period¨ªsticos¡±. ¡°La grandilocuencia descriptiva navega bajo el pabell¨®n de la inconcreci¨®n¡±, a?ade. Y reprocha al juez que no haya mencionado ni una sola autoridad, funcionario o resoluci¨®n sospechosas. Tampoco concreta qu¨¦ individuos de la familia Pujol mediaron o influyeron en adjudicaciones p¨²blicas.
El escrito contiene una menci¨®n espec¨ªfica al hombre que fue presidente de la Generalitat durante 23 a?os (de 1980 a 2003). La ¡°larga instrucci¨®n¡± de la causa ¡°no ha evidenciado¡± que Pujol hubiese hecho ning¨²n favor a los clientes de sus hijos (algunos de ellos, empresarios que suelen contratar con la administraci¨®n auton¨®mica). Tampoco hizo ¡°la m¨¢s m¨ªnima gesti¨®n, invitaci¨®n o influjo¡± y pide el archivo de la causa.
La cuenta 63810
En el auto, Pujol aparece mencionado como titular de la cuenta 63810 en la entidad andorrana Andbank. El juez atribuye un delito de falsedad tanto a ¨¦l como a su hijo mayor. La defensa recuerda que la cuenta la abri¨® el primog¨¦nito en 2000 y la cerr¨® diez a?os despu¨¦s. La comisi¨®n rogatoria enviada a Andorra descubri¨® dos cartas, una del padre y otra del hijo, en la que ambos asum¨ªan que el titular de la cuenta era en realidad el expresidente catal¨¢n. En sus declaraciones en sede judicial, ambos afirmaron que faltaron a la verdad y que las cartas se inscrib¨ªan ¡°en el contexto de separaci¨®n matrimonial¡± del hijo mayor con su pareja, Merc¨¨ Giron¨¦s.
El juez no ha dado credibilidad a esa versi¨®n y atribuye la titularidad de la cuenta al exmandatario. M¨¢s all¨¢ de cu¨¢l es la versi¨®n cierta, la defensa sostiene que en todo caso el delito est¨¢ m¨¢s que prescrito. Y se?ala una paradoja: si seg¨²n el auto y la inspecci¨®n, Jordi Pujol es el titular de la cuenta, entonces las cartas ¡°lejos de documentar una mendacidad expresar¨ªan la verdad de las cosas".
El escrito analiza y rechaza todos los delitos atribuidos a los Pujol: contra la Hacienda P¨²blica, blanqueo de capitales, organizaci¨®n criminal y falsedad. La defensa remarca que no hay un nexo causal entre los negocios del primog¨¦nito y los pagos a la familia en las cuentas en Andorra, niega que en los negocios de Jordi Pujol Ferrusola (hasta 32 operaciones est¨¢n bajo sospecha) interviniera ning¨²n otro miembro de la familia y rechaza con especial vehemencia el delito de blanqueo de capitales. ¡°Bajo rumbosas y grandilocuentes expresiones, se cobija la nada¡±.