Barcelona se ba?a en un mar de pl¨¢stico
Un equipo de la UB y la fundaci¨®n Sufrider halla hasta nueve millones de residuos por kil¨®metro cuadrado en las aguas costeras de la ciudad
Si un ba?ista cruza los alrededor de 200 metros que hay entre la playa de Sant Sebasti¨¤ de Barcelona y las boyas que delimitan la zona de ba?o, su cuerpo rozar¨¢, sin saberlo, con miles y miles de diminutos residuos pl¨¢sticos.
¡±Barcelona es una de las zonas con m¨¢s concentraciones de todo el Mediterr¨¢neo¡±, resume Anna Sanchez-Vidal, profesora agregada de la Universitat de Barcelona (UB) y responsable del equipo de investigaci¨®n que, por primera vez, ha puesto cifras al n¨²mero de ¨ªtems que se a...
Si un ba?ista cruza los alrededor de 200 metros que hay entre la playa de Sant Sebasti¨¤ de Barcelona y las boyas que delimitan la zona de ba?o, su cuerpo rozar¨¢, sin saberlo, con miles y miles de diminutos residuos pl¨¢sticos.
¡±Barcelona es una de las zonas con m¨¢s concentraciones de todo el Mediterr¨¢neo¡±, resume Anna Sanchez-Vidal, profesora agregada de la Universitat de Barcelona (UB) y responsable del equipo de investigaci¨®n que, por primera vez, ha puesto cifras al n¨²mero de ¨ªtems que se acumulan en las aguas de las playas de la Mar Bella, Sant Sebasti¨¤, Llevant y la Barceloneta. Hasta ahora, se sab¨ªa la cantidad de basura que se acumula en la arena de estas playas, pero no la que deambula, como un ej¨¦rcito de diminutas medusas, en sus aguas m¨¢s cercanas.
Los primeros resultados del estudio del Grup de Recerca Consolidat en Geoci¨¨ncies Marines de la UB gracias a las muestras recabadas en octubre, noviembre y diciembre por la organizaci¨®n Sufrider y un equipo de voluntarios de siete entidades (An¨¨l¡¤lides Serveis ambientals marins, Oceanogami, Base N¨¤utica de Barcelona, Anywhere Watersports, Blue Salt School, Ungravity Freestyle Company y Manihi Surf School) evidencian que en las aguas de las playas de Barcelona se acumulan, dependiendo de la zona y el d¨ªa, entre 20.000 y 9 millones de ¨ªtems por kil¨®metro cuadrado. Es decir, que por cada kil¨®metro (0,6 millas) que se navega hay, de media, 700.000 residuos. De estos, el 90%, son micropl¨¢sticos como trozos de bolsas, material de pesca o c¨¦sped artificial.
Entre las cuatro playas analizadas, la de Sant Sebasti¨¤ es donde m¨¢s hay y la de Mar Bella, donde menos. La investigadora de la UB cree que esto se debe en gran parte al efecto de los espigones, que ayudan a que los residuos se acumulen con mayor facilidad; y a su orientaci¨®n, m¨¢s susceptible de recibir por la corriente la basura que flota en el gran azul.
¡±Nos ha sorprendido que una zona donde la gente disfruta tanto haya unas concentraciones tan elevadas¡±, explica Sanchez-Vidal. La ocean¨®grafa explica que la mayor novedad del proyecto, cofinanciado por el Ayuntamiento de Barcelona y la Fundaci¨®n Espa?ola para la Ciencia y Tecnolog¨ªa (FECYT), reside en que las muestras se han obtenido en la costa y no en alta mar, donde es m¨¢s habitual. ¡°En la costa el riesgo a que los barcos queden varados es muy alto, por lo que no se suelen hacer¡±, especifica. De ah¨ª que hayan tenido que ser voluntarios con tablas de paddlel surf los que han peinado durante tres meses la zona de estudio.
Entre las primeras conclusiones, la investigadora destaca el efecto rebote que suponen los espigones, ¨²tiles para evitar la p¨¦rdida de arena en las playas, pero con el inconveniente de que tambi¨¦n act¨²an como una trampa para la suciedad. ¡°Si comparamos estudios llegamos a la conclusi¨®n de que la zona costera de Barcelona est¨¢ entre las cinco con mayores concentraciones en el Mediterr¨¢neo, al nivel de la Laguna de Venecia¡±, sostiene.
El proyecto se extiende tambi¨¦n a otros siete puntos del litoral catal¨¢n, y los investigadores tienen previsto publicar los primeros resultados en verano. En Barcelona, los muestreos se seguir¨¢n realizando y entre otras cosas permitir¨¢n conocer cu¨¢nto aumentar¨¢ el n¨²mero de pl¨¢sticos una vez que Barcelona se vuelva a llenar de turistas.