SOS Monuments cuestiona los ¨²ltimos trabajos en la Casa Batll¨® de Gaud¨ª

La ¨²ltima intervenci¨®n en la Casa Batll¨®, la obra de Antoni Gaud¨ª en el n¨²mero 43 de paseo de Gr¨¤cia, un edificio reconocido como Patrimonio de la Humanidad en 2005, ha sido cuestionada por SOS Monuments, entidad formada por arquitectos, restauradores, arque¨®logos e historiadores, entre otros profesionales, con 25 a?os de experiencia defendiendo la buena gesti¨®n del patrimonio cultu...

La ¨²ltima intervenci¨®n en la Casa Batll¨®, la obra de Antoni Gaud¨ª en el n¨²mero 43 de paseo de Gr¨¤cia, un edificio reconocido como Patrimonio de la Humanidad en 2005, ha sido cuestionada por SOS Monuments, entidad formada por arquitectos, restauradores, arque¨®logos e historiadores, entre otros profesionales, con 25 a?os de experiencia defendiendo la buena gesti¨®n del patrimonio cultural catal¨¢n. Y lo han hecho a trav¨¦s de un documento en el que explican sus puntos de vista sobre los ¨²ltimos trabajos realizados en este edificio. Sobre todo, la nueva escalera que comunica los pisos superiores con la planta baja, concebida para conseguir que los visitantes que entran y los que salen no se crucen y que funcione, adem¨¢s, como el necesario lugar de evacuaci¨®n en caso de emergencia.

A los propietarios de la Casa Batll¨® les ha sorprendido el documento, tras varias reuniones con representantes de la entidad para solucionar dudas. En todo caso, remiten al Plan director de la casa de 2014 para justificar los trabajos de restauraci¨®n de los ¨²ltimos a?os en los que se han invertido 15 millones de euros, m¨¢s otros 15 millones desde 2019 en la instalaci¨®n de las nuevas apuestas tecnol¨®gicas e inmersivas con la finalidad de generar nuevas ofertas y ganar nuevos p¨²blicos.

Seg¨²n SOS Monuments, para instalar la escalera se han tenido que eliminar parte de los forjados del edificio, ya que no era suficiente el espacio de un patio interior preexistente. La entidad defiende que la declaraci¨®n como monumento hist¨®rico-art¨ªstico de la Casa Batll¨® en 1969 afecta a todo el bloque, no solo a la intervenci¨®n que hizo Antoni Gaud¨ª a la finca preexistente de 1906 en la que transform¨® las dos fachadas, la planta noble, su escalera de acceso, uno de los patios y la terraza. Se basan en el hecho de que en ese mismo momento se declararon otros edificios de Gaud¨ª y en algunos de ellos se especificaron qu¨¦ partes, pero en el caso de la Casa Batll¨® no.

Para ellos la Ley de patrimonio cultural catal¨¢n de 1993 proh¨ªbe ¡°expresamente la supresi¨®n de parte alguna del bien, excepto si estas partes suponen una degradaci¨®n del bien o que la eliminaci¨®n suponga una mejor interpretaci¨®n hist¨®rica¡±, cosa que creen que no es el caso. Por eso se preguntan, ¡°sin poner en duda de que las obras se han hecho con todos los permisos, con qu¨¦ criterio se ha eliminado y c¨®mo ha sido posible que las autoridades encargadas de velar por el patrimonio [la Generalitat] han dado los permisos necesarios para construir esta escalera¡±.

Adem¨¢s, seg¨²n explica Ricardo Vergara, arquitecto y presidente de SOS Monuments: ¡°No est¨¢ clara que la escalera cumpla esta finalidad, ya que no tiene barandilla en uno de sus lados, ni se?alizaci¨®n que indique la direcci¨®n de evacuaci¨®n. Adem¨¢s, la escalera no comunica los pisos superiores con la calle, sino que lleva al piso subterr¨¢neo y de ah¨ª se accede al exterior por otra escalera¡±. Tambi¨¦n, prosigue: ¡°Los elementos decorativos que se han colocado distorsionan su finalidad. Si es una escalera de evacuaci¨®n ha de serlo totalmente. Hay mucha ambig¨¹edad y poca claridad¡±, contin¨²a Vergara.

Se refiere a la instalaci¨®n del arquitecto japon¨¦s Kengo Kuma realizada con cadenas colgadas por uno de sus extremos que se mueven al pasar. Los 164.000 metros de cadenas de aluminio forran las paredes y el techo de la escalera, y pasan del color blanco al negro conforme se va de arriba abajo. Para Vergara ¡°la instalaci¨®n de esta obra, en caso de emergencia, que recordemos es la funci¨®n de la escalera, dificulta la evacuaci¨®n r¨¢pida del edificio¡±.

Vergara reconoce que ¡°la rehabilitaci¨®n de la zona m¨¢s visitada y conocida es meritoria y que la recuperaci¨®n de algunos elementos desaparecidos mediante reproducciones es una apuesta interesante y leg¨ªtima¡±, pero apunta que, a veces, ¡°queda devaluada por una ejecuci¨®n muy mejorable, como el arrimadero de madera que exist¨ªa en 1906¡±. Un arrimadero que los gestores del edificio ha rehecho a partir de fotograf¨ªas de la ¨¦poca, ya que no se ha conservado ning¨²n fragmento del original.

Para Vergara la instalaci¨®n de Kuma ¡°no aporta nada a la comprensi¨®n del monumento y es gratuita¡±. Tambi¨¦n lo son, seg¨²n ¨¦l y su entidad, las dos instalaciones inmersivas ¡°creadas como reclamo de ser experiencias nunca tenidas hasta ese momento¡±. Para ellos, ni Gaud¨ª D?me, en la que el visitante entra en la mente del arquitecto, ni Gaud¨ª Cube, en una estructura en cuyo interior se proyectan a gran velocidad im¨¢genes relaciones con Gaud¨ª y su obra ¡°aportan nada en absoluto a la visita y no hay ninguna explicaci¨®n de lo que se est¨¢ viendo¡±.

Desde la familia Bernat, propietarios del edificio desde 1993 y desde 2003 a trav¨¦s de Inmobiliaria Casa Batll¨®, aseguran que les ¡°sorprendi¨® el documento ya que nos reunimos con ellos en dos o tres ocasiones para explicarles todas sus dudas¡±. Y lamentan que ¡°las incoherencias en el texto de SOS Monuments generen malentendidos¡±. Seg¨²n ellos, los trabajos se han realizado dentro de los criterios que establece el Plan director de la Casa Batll¨® aprobado en diciembre de 2014, que comenz¨® a desarrollarse en 2017 en el que las actuaciones priorizan la recuperaci¨®n de los elementos que corresponden al proyecto y la obra de Gaud¨ª y que ¡°permite la valorizaci¨®n del conjunto del edificio y de cada uno de sus espacios, determinando claramente aquellas partes que se conservaban del proyecto de Gaud¨ª, que en muchos casos hab¨ªan sido, lamentablemente, alteradas¡±. Unas alteraciones que ¡°merman el valor de la obra de Gaud¨ª¡± y por eso est¨¢n justificados y aprobados estos trabajos.

Seg¨²n explican: ¡°la escalera de evacuaci¨®n no se ha dispuesto en el patio interior, sino el ascensor que garantiza la total accesibilidad al edificio¡±. Y aseguran que la escalera se ha creado en el espacio donde estaban ¡°las cocinas de los pisos de renta del que no se conservaba ninguna original, ya que la planta noble, primera, segunda y cuarta planta hab¨ªan sido derribadas en los a?os sesenta¡±. Tras reconocer que ¡°la ¨²nica alteraci¨®n ha consistido en la eliminaci¨®n del forjado para poder disponer la escalera¡±, inciden en que ¡°la escalera ha sido dise?ada para que discurra dentro del espacio de las antiguas cocinas, sin sobrepasar este espacio y sin derribar paredes que delimitaban estos espacios¡±.

En cuanto al hecho de que la escalera no permita acceder a la planta de la calle mantienen que ¡°ha sido consensuada con el departamento de Bomberos de Barcelona y permite que las dimensiones de la escalera minimicen la afectaci¨®n del edificio¡±. Tambi¨¦n, que la escalera cuenta con ¡°toda la se?al¨ªtica y elementos de seguridad, como ha certificado una empresa de control externa¡± y que las cadenas de la instalaci¨®n de Kuma ¡°no invaden el espacio de la escalera de evacuaci¨®n¡±.

Vergara lamenta que ¡°los puntos expresados por SOS Monuments a estos trabajos se tomen como una cr¨ªtica y no como algo que sirva para ayudar a mejorar un edificio Patrimonio de la Humanidad, adem¨¢s de para conciliar diferentes puntos de vista. Aunque el proyecto est¨¦ aprobado, la realidad te puede llevar a cambiarlo, y en el caso del pasamanos est¨¢ claro que es necesario en una escalera de evacuaci¨®n¡±.