La crisis que se avecina
La vuelta a la contenci¨®n presupuestaria alarma a quienes promovemos la acci¨®n social. En este contexto, ?qui¨¦n piensa hoy en los m¨¢s vulnerables?
La inflaci¨®n se mantiene desbocada desde el inicio de la invasi¨®n de Ucrania. Cierta econom¨ªa financiera engrosa sus beneficios a partir de la escasez de determinadas materias primas como el gas, el petr¨®leo, los cereales y algunos metales. Los bancos centrales elevan los tipos de inter¨¦s, tal como la ortodoxia econ¨®mica requiere, para frenar la inflaci¨®n. En nuestro pa¨ªs ha crecido el empleo, aunque es previsible que pasada la estacionalidad estival y con la recesi¨®n provocada se perder¨¢n muchos puestos de trabajo. Seg¨²n la nu...
La inflaci¨®n se mantiene desbocada desde el inicio de la invasi¨®n de Ucrania. Cierta econom¨ªa financiera engrosa sus beneficios a partir de la escasez de determinadas materias primas como el gas, el petr¨®leo, los cereales y algunos metales. Los bancos centrales elevan los tipos de inter¨¦s, tal como la ortodoxia econ¨®mica requiere, para frenar la inflaci¨®n. En nuestro pa¨ªs ha crecido el empleo, aunque es previsible que pasada la estacionalidad estival y con la recesi¨®n provocada se perder¨¢n muchos puestos de trabajo. Seg¨²n la nueva encuesta anual del Idescat, el Instituto de Estad¨ªstica de Catalu?a, la tasa de pobreza se ha reducido el ¨²ltimo a?o un escaso 0,8%, aunque se mantiene en un inasumible 25,9%, su m¨¢ximo hist¨®rico. Por otra parte, el mismo informe apunta que aumenta del 9,4% al 15,9% la poblaci¨®n que no puede permitirse mantener su vivienda a una temperatura adecuada, por lo que calentar la casa este invierno va a ser un lujo inaccesible para cada vez m¨¢s hogares.
Se hablaba de un pacto de rentas para que las personas trabajadoras perdieran menos poder adquisitivo, pero de momento el acuerdo no ha llegado. La escasez de mano de obra durante unos meses ha tranquilizado conciencias. Pero las decisiones de bloqueo econ¨®mico a Rusia, las consecuencias de los acuerdos de la OTAN reorientando el gasto hacia un aumento de la inversi¨®n en armamento y la vuelta a la contenci¨®n presupuestaria, despu¨¦s de unos a?os de tolerancia del incremento del d¨¦ficit preocupan, sino alarman, a quienes promovemos la acci¨®n social.
En este contexto, ?qui¨¦n piensa hoy en los m¨¢s vulnerables?
Las pol¨ªticas reactivas keynesianas pueden paliar algunos efectos de la crisis que se avecina, pero son imprescindibles medidas estructurales. Deben activarse cuanto antes acciones como la promoci¨®n real de un mayor nivel educativo de toda la poblaci¨®n, empezando por una verdadera exigencia en la formaci¨®n de maestros y profesores. Debe favorecerse la liberaci¨®n de suelo para que en determinadas condiciones la iniciativa privada pueda ofrecer vivienda a precios concertados, as¨ª como el apoyo efectivo y la desburocratizaci¨®n de las relaciones con a administraci¨®n de la econom¨ªa productiva, de la econom¨ªa social. Es imprescindible la inversi¨®n en salud, incluyendo la fragilidad mental.
Solo acciones contundentes, estructurales, har¨¢n posible que los m¨¢s d¨¦biles de la sociedad no sufran acumulativamente las consecuencias de una crisis que cada vez es m¨¢s recurrente. La verdadera equidad en la distribuci¨®n de la riqueza requiere de cambios profundos en lo m¨¢s esencial. Solo una fiscalidad que grave los beneficios financieros, quiz¨¢s algunas medidas impositivas anunciadas recientemente por el Gobierno en los sectores de la banca y las grandes compa?¨ªas energ¨¦ticas, redistribuir¨¢ verdaderamente la riqueza y aportar¨¢ los recursos para los cambios necesarios. De no intervenir de forma radical cuando antes, la pr¨®xima crisis tendr¨¢ nuevamente graves efectos para los m¨¢s vulnerables.
Josep Oriol Pujol Humet es director general de la Fundaci¨® Pere Tarr¨¦s
Puedes seguir a EL PA?S Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal