Marina Abramovic, en el Liceo: ¡°Me enfad¨¦ much¨ªsimo cuando Mar¨ªa Callas se sacrific¨® por un imb¨¦cil¡±
La artista serbia llega al Gran Teatre del Liceu de Barcelona para representar su homenaje a la gran diva
Marina Abramovic, considerada la madre de la performance, llega este jueves a Gran Teatro del Liceo para mostrar la historia de una fascinaci¨®n. Desde el d¨ªa 9 y hasta el s¨¢bado, el escenario alojar¨¢ 7 Deaths of Maria Callas (7 muertes de Mar¨ªa Callas), un homenaje de la artista a la gran diva a la que admira desde ni?a. ¡°Cuando tienes un don y un talento as¨ª, lo tienes que compartir. Deseaba que su ¨®bra la salvara pero no fue as¨ª. Eso me enfad¨® much¨ªsi...
Marina Abramovic, considerada la madre de la performance, llega este jueves a Gran Teatro del Liceo para mostrar la historia de una fascinaci¨®n. Desde el d¨ªa 9 y hasta el s¨¢bado, el escenario alojar¨¢ 7 Deaths of Maria Callas (7 muertes de Mar¨ªa Callas), un homenaje de la artista a la gran diva a la que admira desde ni?a. ¡°Cuando tienes un don y un talento as¨ª, lo tienes que compartir. Deseaba que su ¨®bra la salvara pero no fue as¨ª. Eso me enfad¨® much¨ªsimo. Que solo aspirara a esa vida (a una de ama de casa) y que se sacrificara por este imb¨¦cil¡±, ha dicho en alusi¨®n al magnate griego-argentino Arist¨®teles Onassis. La producci¨®n, estrenada en la ?pera de M¨²nich en plena pandemia, cuenta con la participaci¨®n de siete sopranos, que interpretan otras tantas ¨¢rias de siete ¨®peras, y la parte de v¨ªdeo est¨¢ protagonizada por el actor Willem Dafoe.
Apasionada y en¨¦rgica, Abramovic ha relatado que su fascinaci¨®n por Callas empez¨® cuando ten¨ªa 14 a?os en la cocina de la casa de su abuela mientras desayunada. La radio estaba puesta y de repente oy¨® la voz de la soprano. ¡°Empec¨¦ a llorar de forma desconsolada de emoci¨®n y ah¨ª empez¨® mi admiraci¨®n¡±, ha contado. No lleg¨® a conocerla y en 1989 empez¨® a rondarle en la cabeza la idea de tributarle un homenaje a trav¨¦s de grandes directores de cine. Era tan complicado que desisti¨®. Hasta que en 2017, como ca¨ªdo del cielo, el director de la ¨®pera de M¨²nich le envi¨® una carta diciendo que quer¨ªa abrir las puertas de la ¨®pera a todos los contextos y artistas y le propuso Barba Azul. Ella lo rechaz¨® y contraatac¨® con su idea de Callas y las muertes por amor. ¡°Tard¨® tres minutos y me dijo: ¡®Hag¨¢moslo¡¯¡±.
La funci¨®n, de hora y media, comprende ¨®pera, recital l¨ªrico, performance y v¨ªdeo. Y por all¨ª desfilar¨¢n Gilda Fiume (encarna a Violeta, de La Traviata), Vanessa Goikoetxea (Floria Tosca), Benedetta Torre (Desdemona, de Otelo), Antonia Ahyoung Kim (Cio-Cio-San, de Madama Butterfly), Rinat Shaham (Carmen), Leonor Bonilla (Lucia Ashton, de Lucia de Lammermoor) y Marta Math¨¦u (Norma). ¡°Es una obra que viene a romper fronteras y a acercarse a todos los p¨²blicos. Es la historia de dos hero¨ªnas (Callas y Abramovic) desafortunadas en el amor¡±, ha afirmado el director general V¨ªctor Garc¨ªa de Gomar. La funci¨®n le sirve tambi¨¦n al Liceu para una reparaci¨®n hist¨®rica en el centenario del nacimiento de la diva: solo cant¨® una vez en el teatro de La Rambla de Barcelona frente a la veintena de veces -¡°Este era su feudo¡±- que lo hizo Renata Tebaldi.
El hilo conductor es la historia de morir por amor y de un coraz¨®n roto como el de Callas, que acab¨® quit¨¢ndose la vida, pero tambi¨¦n el de Abramovic, que tambi¨¦n estuvo a punto de perder la vida, ha dicho, por un desamor. ¡°Ella muri¨® por un coraz¨®n partido y yo a punto. Ese era el ligaz¨®n pero mi trabajo me salv¨®¡±, ha revelado explicando que nunca comprendi¨® que la diva estuviera dispuesta abandonar su carrera y su don para ser ama de casa y tener hijos y una vida con Onassis. ¡°Mi fascinaci¨®n por ella cubr¨ªa tambi¨¦n la mezcla por su fortaleza y a la vez su fragilidad. Cuando dejaba de cantar era como un pajarito fr¨¢gil. Y yo soy as¨ª un poco tambi¨¦n: soy fuerte y guerrera pero a la vez una ni?a peque?a¡±, afirma esta artista, premio Princesa de Asturias de las Artes 2021 y creadora de un m¨¦todo e instituto propio.
Tras subrayar que no ha pedido a ninguna soprano que imite a Callas -¡°Eso es imposible¡±-, Abramovic cuenta que solo en un momento de la obra recoge la voz de la diva, justo cuando muere en la habitaci¨®n recreada de su apartamento de Par¨ªs. La artista, que no abandona el escenario durante la hora y media, abre cajones y mira sus propias fotograf¨ªas reconectando las dos vidas y la idea de morir de amor. La obra est¨¢ concebida para atraer a p¨²blico joven y dice contenta que as¨ª lo ha conseguido en M¨²nich, Paris, ?msterdam y N¨¢poles. ¡°Pens¨¦ que en Par¨ªs me tirar¨ªan patatas o tomates y no fue as¨ª. Escuch¨¦ a dos se?oras decir en la ?pera Garbier: ¡®C¡¯est pas classique!¡¯ Y pens¨¦: ¡®Fant¨¢stico¡¯ Con mi generaci¨®n (tiene 76 a?os) no hay manera¡±.
El cartel de la obra recoge los dos perfiles superpuestos de Callas y de Abramovic que tienen una historia particular. Cuando se present¨® la obra en Par¨ªs, un fot¨®grafo b¨²lgaro llevo consigo una foto antigua de Callas, que era de su abuela, y ella se la compr¨®. ¡°?Fijaos c¨®mo encajan! Y no fue barata, pero la quer¨ªa para m¨ª¡±, afirma divertida. Enfrascada en ense?ar a sus alumnos performances de larga duraci¨®n -¡±Ahora estoy ense?ando una clase de Pina Bausch¡±-, Abramovic describe que ese tipo de arte tiene la virtud de que no puedes fingir o actuar y acabas siendo tu misma. ¡°Te vuelves vulnerable y esa es la conexi¨®n con el p¨²blico. T¨² y el p¨²blico te conviertes en una misma cosa y esa es la magia¡±.
Puedes seguir a EL PA?S Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal